Un matrimonio a la fuerza

Capítulo 10

aquí os dejo un nuevo capítulo. Espero que no hayáis sufrido mucho la ausencia de un nuevo dia de esta pareja tan...peculiar jajaja! Gracias a todas las que cometáis y votáis.MUCHISIMAS GRACIAS!!!! Os quiero a todas! Me hacéis muy feliz!!!

QUE DISFRUTÉIS ESTE NUEVO CAPÍTULO!!!

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            En el viaje en coche hasta el aeropuerto tan solo hablaba Sabine con su marido. Yo me mantuve callada y al margen de la conversación, pensando en mis cosas, en mi padre, del cual estaba muy decepcionada. En mi Nana, a la cual tardaría en volver a ver y la echaría mucho de menos. Y en mi prima, que tenía su vida en Madrid y que quizás vendría a verme en vacaciones.

            Cuando llegamos al aeropuerto, comprobé que no íbamos a ir en un vuelo normal. Un Jet privado nos esperaba ya listo con las puertas abiertas y la tripulación esperando para saludarnos. Michael y Sabine entraron los primeros, saludando al capitán como también a las azafatas. Después entró Liam haciendo lo mismo. Luc tiró de mi, entrando delante de mi para estrecharle la mano a el piloto.

            -Bienvenida a bordo, señorita Schröder. Es un placer conocerla.-Le di la mano amablemente.

            -Lo mismo digo. Gracias.-me senté al lado de Luc. Liam estaba situado justo delante de mi marido. En cuanto a mis suegros, se sentaron algo lejos de nosotros, en unos sofás que había en el avión.

            Una vez acomodada me fijé bien en el jet. Era espacioso, con un par de mesas y sillones que parecían muy cómodos. También había sofás. Al fondo había tres puertas. Dos era de baños, ya que tenían unas pegatinas que lo indicaba y la que estaba en el medio permanecía cerrada, por lo tanto no sabía qué se escondía tras ella.

            -Es una pequeña habitación. Con una cama y unos cojoncitos. Es cómoda pero no se duerme tan bien como en una cama en tierra firme.-dijo Liam divertido.-Hay más cosas que no se ven a simple vista. Hay televisiones y un par de consolas para pasar el viaje. También un pequeño minibar, por si te apetece algo.

            -Vaya. Todo un lujo de avión. Increíble.-Dije asombrada.

            -Papá tiene muchos caprichos.-miré a mi marido mientras él miraba una pantalla que salía de la mesa que teníamos delante.-Y mamá también. Es una familia de caprichos.

            -Entiendo…-susurré.

            Antes de que pudiera decir algo más, el piloto comenzó a hablar por el altavoz diciendo que íbamos a despegar. También comentó algo de cuánto iba a durar el viaje, cuándo nos podríamos quitar los cinturones, que había azafatas a nuestra disposición…Lo típico que se dice en un viaje en avión.

            El despegue fue tranquilo. La verdad es que los jets eran mucho más cómodos y menos ruidosos que los aviones convencionales comerciales. Daba gusto ir en uno. Me acomodé en mi sillón para poder dormir un poco. Estaba cansada y agotada. Cerré los ojos quedándome dormida al momento, ya que no recuerdo el viaje para nada.

            -Nena…-me moví levemente adormilada.-Cielo, despierta. Hemos llegado.-abrí los ojos encontrándome de frente a Luc, ya de pie y sonriente.-Has dormido como un lirón. Venga. Hay un coche esperando por nosotros.