Temptation.

Stripper Cas.

Por cosas de la vida, a Gabriel le dieron ganas de pasar todo el día con su amor, pero Cas estaba ocupado en un caso donde no podía dejar solo a los Winchester. De todas formas, Gabe se anotó a la cacería.

El arcángel había comenzado a repartir besos por el cuello del menor, por mucho que Cas le repitiera que este no era el lugar apropiado. Dean, no se había acercado demasiado al auto, cuando notó lo que esos dos hacían en el asiento de atrás de su Baby. Corrió hacia allá, con Sam riendo por lo bajo.

Gabriel solo se detuvo cuando Dean lo atacó con la bolsa de sus hamburguesas.

- ¡No en mi Baby, pervertido! – Regaño el cazador.

- ¡Aguafiestas!

El resto del tiempo fue un poco más de lo mismo, y es que Gabe no se podía mantener alejado de Castiel por mucho tiempo. Pero entonces, el caso puso a prueba al castaño.

Al parecer, la chica testigo era una bailarina stripper en uno de eso lugares a los que Gabriel conocía muy bien. El castaño se aferró a su novio, intentando no mirar donde no debía.

Hombres y mujeres bailaban en tubos dispersos por el amplió lugar, entre las mesas de los clientes. La música estaba a todo volumen, y el lugar seguía estando muy concurrido aunque fuese temprano. Sam se acercó al cantinero para preguntar por la chica.

- Tendremos que esperar a que termine su show. – Lamentó el menor.

- ¡Genial! – Espetó Dean. – Busquemos una mesa.

- ¿Por qué, Padre? – Sollozo Gabe aun abrazado a Cas.

Para Cas era adorable verlo contenerse en el tipo de lugares que le gustaban porque le amaba más a él.

Encontraron una mesa en el centro de cuatro de esos pequeños escenarios. Dos hombres a la derecha y dos chicas a la izquierda, Dean se había hipnotizado con la preciosa castaña vestida en cuero negro.

- Gabe. – Llamó Cas al sufrido arcángel.

- ¡No mire! ¡Lo juro! – Chilló el otro, defendiéndose aunque su pareja no iba a acusarle.

- Puedes ver. – Concedió el ángel.

- Cas, no. – Dijo.

Era una hermosa acción pero no podía traicionarlo ni con el pensamiento. Sin embargo, Castiel insistió hasta lograr convencerlo. Gabriel levantó la mirada, solo para encontrarse con el bailarín que parecía tener su vista fija en su precioso ángel. Ya no le interesaban las chicas semidesnudas a su alrededor, ese tipo se estaba comiendo a Su novio con la mirada.

- No pareces feliz. – Dudo Cas, extrañado por el comportamiento del mayor.

- Estoy planeando como matar a ese sujeto. –

La mirada penetrante del arcángel logró llamar la atención del bailarín. Gabe lo señalo y luego uso su índice para crear una línea imaginaria a través de su cuello, una amenaza directa.

Por fin la chica termino el show, haciéndole una señal a Sam para que la siguieran. Las cosas fueron con tranquilidad a partir de allí, trastabillaron un poco cuando la chica menciono que Castiel sería un excelente stripper, pero Gabe logró guardarse sus celos. Aunque Dean se lo recordó a la salida.

- ¿Y Cas? ¿Ya pensaste lo de ser bailarín? – Bromeó el cazador.

- De ninguna manera. – Sentencio su pareja, sin dejarle contestar.

- ¿Por qué? – Interrogó el ángel. – A ti también te gusta.

Ese comentario libero una estridente risa de Dean y la sonrisa cómplice de Sam.

- Cariño, apenas mantengo las bestias lejos de ti con ropa, imagínate sin ella. – Explicó. – Nadie más que yo va a verte sin ropa.

- Yo ya lo he hecho. – Rio el rubio, burlándose del más bajo.

- Yo también. – Comentó por lo bajo Sammy.

- Los odio...