Cuando me levanto por la mañana es tardísimo. Mi hermana y mi padre ya están liados con la cena de nochebuena mientras mi cuñado juega con mi sobrina.
A las siete, cuando voy a meterme en la ducha, me miro en el espejo. Mi aspecto exterior es bueno aunque por dentro estoy destrozada. Enciendo el móvil y encuentro cuatro llamadas perdidas de Natalia y un mensaje de Cepeda: "Pasaré a buscarte sobre la medianoche. Ponte guapa."
El "Ponte guapa" no me ha gustado pero continúo con lo de antes.
¿Por qué no puedo quitarme a Natalia de la cabeza?
¿Por qué digo una cosa cuando quiero hacer otra?
¿Por qué...?
Es evidente. La quiero. Estoy enamorada de ella hasta las trancas. Pero, estoy harta de sus tonterías y voy a recuperar mi vida.
Voy a mi habitación y cojo el vibrador que me regaló Natalia. Quiero fantasear. Lo necesito.
Enciendo el agua calentita y me pongo un poco de incienso, apago el agua y pongo música de fondo, suena la canción crazy de Aerosmith mientras se llena la bañera, una vez dentro me abro las piernas y dejo volar mi imaginación.
Mi ardiente cuerpo se mueve excitsdo mientras me muerdo los labios para no gritar. Natalia está presente. Mi mente vuela y vuela.
Tras la ducha regreso a mi habitación. Escondo el vibrador y enciendo el móvil. Seis llamadas perdidas de Natalia.
Para lo cena de nochebuena me pongo un vestido negro. Explosivo. Seguro que si Natalia me ve, no se podrá resistir, lo gracioso esque yo la negaré.
Cuando salgo mi hermana me ve:
-Nenaa, que vestido tan bonito.
-¿Te gusta?
-Es precioso, aunque para mí gusto enseña demasiado.
-Madre mía estas preciosa. - dice mi padre.
-Gracias, papá.
-¿Piensas ir a trabajar al pub con ese vestido?
-Si, ¿por qué?
-No creo que a Natalia le guste.
-Papaaa!
A las nueve y media nos sentamos y degustamos la cena de nochebuena. Risas, charlas, anécdotas, pero recuerdo que había quedado con Cepeda y me voy a retocar. Cuando estoy terminando entra mi hermana alarmada.
-Acaba de llegar Cepeda y está en el salón junto a Natalia.
-¿No jodas?
-¿Tienes un novio y una novia, tita?
-No, cariño, no.
-¿y por qué han venido los dos ha buscarte?
-Tu tita es de lo que no hay. - responde mi hermana.
-Me voy a ir con David, Marina.
Mi hermana abre los ojos como platos y al darme la vuelta veo a Natalia.
-Alba, no te vas a ir con él. No te lo voy a permitir.
-¿Tú me lo vas a impedir?
-Si tengo que cargarte al hombro lo haré.
-Cuando los peces vuelen.
-Mi paciencia se agota, pequeña...
-¿Tu paciencia? Me llamas, te presentas en mi trabajo. La gente aún cree que somos novias pero no. Y aún así tienes la cara de decir que tu paciencia se ahoga...
-Te quiero, Alba.
-Peor para ti.
-No puedo vivir sin ti.
-Tú y yo hemos acabado.
-Te vas a venir conmigo.
-¿Contigo? Ni lo sueñes.
-¿Qué no lo sueñe?
-Pues no.
-Alba...
-Te dije que si me iba, asumieras las consecuencias.
- Lo sé.
-¿entonces?
-Actúe mal. Soy una mierda, pero necesito que me perdones.
-Estas perdonada, pero lo nuestro se acabó.
-Pequeña...
Sin decir nada, me coge y me besa. Pero cusndo separa sus labios de los míos le digo:
-Me he cansado de tus imposiciones. De tus enfados, de tus numéritos y de...
Vuelve a besarme.
-No vuelvas a hacerlo, por favor.
-Si me vas a dar con el mango de la sarten, hazlo. Pienso seguir besándote hasta que me des una nueva oportunidad.
-Natalia... Lo nuestro se acabó.
-No, cariño.
-Si... He desaparecido de tu empresa y de tu vida, ¿que más quieres?
-Solo te quiero a ti. Te quiero, y el quererte así a veces me hace ser irracional ante ciertos temas. Si, dudé al ver las fotos con Betta. Pero mis dudas se fueron cuando me hablaste y me hiciste ver lo ridícula que soy. Tú no eres Betta. Tú no eres una mentirosa. Tú eres una maravillosa y preciosa mujer que no se merece el trato que le di, y nunca me perdonaré hacerte sufrir.
-Natalia, no...
-Cariño, no dudes que eres lo más importante de mi vida y que estoy loca por ti. ¿Tú ya no me quieres?
-No me hagas esto Natalia...
-Por favor, mi amor, por favor, escúchame. Yo no sé hacerlo, no tengo tu magia ni tu gracia. Sólo soy una amargada que se pone delante de ti y te pide... te suplica una nueva oportunidad.
-Natalia...
-Escucha, he hablado con los dueños del pub y lo he solucionado todo. No tienes que ir a trabajar. Yo...
-¿Qué has hecho qué?
-Pequeña...
-Pero vamos a ver, ¿quién eres tú para...?¿Te has vuelto loca?
-Cariño. Los celos me matan y...
-Los celos no sé, pero yo sí que te voy a matar. Acabas de joderme el único trabajo que tenía. Pero ¿quién te has creído que eres?
-Quiero y necesito estar contigo. No puedo permitir que sigas regalando tu maravillosa sonrisa a los tíos. Te quiero, pequeña, te quiero demasiado para olvidarte y haré todo lo que sea para que tú me vuelvas a querer.
Los ojos se me llenan de lágrimas. La mujer a la que quiero me está diciendo cosas muy bonitas. Pero me aferro a mi orgullo, Natalia lo ha hecho pasar mal, realmente mal.
-Suéltame.
-Entonces, ¿es cierto? ¿Ya no me quieres?
-Yo no he dicho eso, pero tengo que hablar con cepeda.
-¿Por qué?
-Porque ha venido a buscarme y se merece una explicación.
Natalia asiente. Noto su incomodidad en su mirada. Cepeda al verme silba.
-Estás espectacular, Alba.
-Gracias.
Agarro del brazo a cepeda y lo saco al jardín para hablar con él. Entiende lo que le explico y tras darme un beso en la mejilla se va. Vuelvo a entrar en casa, todos sonríen y Natalia tiende su mano hacia mi.
-¿Te vienes conmigo?
No respondo.
-Tita, la tienes que perdonar. Natalia es muy buena. Mira, me ha traído una caja de bombones y un pijama de bob esponja, que sabe que me gusta mucho.
Entonces, veo que Natalia le guiña un ojo a mi sobrina y ésta se ríe. ¿Está sobornandola?
-Natalia, de momento, vamos a hablar.
-Lo que tú quieras, cariño.
-Dame un segundo.
Entro en mi habitación y mi hermana viene detrás.
-Deja tu orgullo a un lado, idiota, y disfruta de que ha venido a buscarte.
-Esque me saca de mis casillas, Marina.
-Y Jesús a mi, pero nos queremos y eso es lo que cuenta.
Lo que siento por Natalia es tan fuerte que puede conmigo. Al regresar al salón con mi equipaje, Natalia sonríe, me abraza y consigue ponerme la piel de gallina cuando dice delante de toda mi familia.
-Te voy a conquistar todos los días.
