Custodios del Amor

Capitulo 45

Se sentía inmensamente feliz tenia pocos días de haber regresado de su luna de miel. Jugaba con su sortija mientras esperaba a que su hermana llegara al centro comercial.

Llego prácticamente corriendo en cuanto la vio sonrió— ¡Haru! —grito incluso antes de llegar con ella, sintiéndose feliz y contenta de verla— hermanita

Se puso de pie al escucharla— Serena —sonrió sintiéndose muy feliz.

—Hermanita —de inmediato la abrazo— ¿cómo estás? te ves hermosa, la luna de miel te sentó muy bien

—Estoy bien —correspondiendo el abrazo de su hermana— la pasé muy bien, fue sensacional

—Tienes que contarme todo, bueno no todo. En realidad, nada porque te ves increíblemente hermosa

— ¿Te parece? —sonrió ampliamente.

—Sí ¿estuviste muy feliz verdad? —suspiró profundamente— espero yo también volver así de feliz

—Sí, estos días junto a Darien han sido maravillosos

—Felicidades hermanita, la verdad es que si te ves de maravilla

Sonrió un tanto sonrojada— Gracias, pero tú no te ves nada mal

—Ah gracias —se sonrojó un poco— nos va bien, pero aun nos cuesta a veces contenernos, dice que lo hace por nuestro bien y que la noche de bodas se desquitara

— ¿Y cómo te sientes tú?

—¿Yo? —murmuró sonriendo sutil— lo extraño y mucho, pero no es algo que ansié desesperadamente que no me pueda controlar. No niego que a veces deseo estar con él, pero mejor nos ponemos a jugar. Ya me enseño algo sobre la baraja, aunque no entiendo muy bien

— ¿Baraja? que divertido

—No es tan divertido como hacer otras cosas, pero bueno al menos me entretengo, además esta tan ocupado con la gira que ya ni hace por tratar de seducirme ni yo a él

—Bueno entonces lo disfrutaran mucho cuando llegue el momento y estas conociendo algo más de él ¿no es así?

Asintió sonriendo— A veces nos ponemos a platicar por horas o hasta que me quedo dormida, pero sabes, la última noche que estuve con él me di cuenta de que no me unía a él solo el sexo, si no el amor que en verdad nos tenemos

—Eso me alegra, por que sin duda serás una mujer muy dichosa

—Sí, lo amo tanto que a veces me parece un sueño que nos vayamos a casar

—Pero te vas a casar hermanita. Anda vamos a buscar tu vestido de novia y el mío como dama de honor

—Sí, vamos, ojalá que este el vestido que me probé hace tiempo ¿recuerdas? me gusta ese, tiene todo lo que había buscado; es sexy y sensual pero también es como muy de princesa

—Mmm si ese sería perfecto, pero ¿crees que aún lo tengan?

—Espero que sí, porque ese es mi vestido perfecto, ya que Seiya no quiere que use tres me tendré que conformar con uno y tiene que ser el más hermoso

Sonrió caminando por las tiendas— Debe ser muy especial entonces

—Sí, porque yo quería uno sensual para la boda por el civil, uno de princesa para la boda religiosa y uno sumamente sexy para la recepción, pero mi prometido no quiso. Así que tiene que ser uno que tenga un poco de las tres cosas que quiero

—Ya entiendo, es un chico muy inteligente y me alegra que seas feliz con él ¿ya saben a dónde irán de luna de miel?

—Aun no, supongo que será parte de la gira de hecho me estoy preparando porque los primeros meses quiere que vaya con él