Custodios del Amor

Tomo 2 Capitulo 2-48

—Abuelita ya quiero comer —dijo la pequeña Serenity que ya estaba sentada a la mesa esperando— tengo hambre

—Lo se mi amor, pero tus padres ya no tardan en llegar esperemos un poco ¿sí?

—Abuelita ¿por qué siempre que se van de noche llegan en la tarde del día siguiente? —preguntó el hombrecito de la casa.

—Bueno es que... —se quedó pensando en cómo explicarle sin hablar más de la cuenta.

—Se quedan más tiempo porque cuando salen de noche no les da tiempo de volver temprano a casa, ya que se quedan a revisar que todo esté en orden

—Ah ¿por eso llegan con otra ropa? —pregunto Serenity jugando con la cuchara.

—Así es, por que uno debe cambiarse a diario y a nuestros padres no les gusta verse mal

—Mmm mami siempre llega con manchas en el cuello, creo que no se baña bien —dijo en un susurro como si fuera un secreto.

Ahogo una sonrisa ante la observación de su hermanita pequeña.

—Ya llegamos familia —dijo al entrar sonriendo de la mano de su esposo— pero que linda familia —soltó a Seiya para acercarse a besar a sus hijos comenzando con Hotaru seguida del niño y al final la pequeña.

—¡Mami! —la abrazó observándola— otra vez tienes machas en el cuello mami ¿no te bañaste bien?

—¿Que? —preguntó confundida— ¿de qué hablas mi amor?

—Ay mamá que despistada eres —haciéndole una ligera seña para que entendiera a que se refería su hermanita.

Se llevó la mano al cuello volviendo la mirada hacia Seiya— Bueno mi amor, es que... mmm me manche con pintura

— ¿Y no se quita mami?

—Sí, pero tardan en quitarse princesa —se puso de pie— creo que tendré más cuidado con la pintura

—Si es pintura —sonrió un tanto divertido acercándose a saludar a su hija mayor— ¿cómo te portaste?

—Bien papá, llegue en la mañana a desayunar con mis hermanos. Te mando felicitar la profesora Kakyu

—Muchas gracias ¿cómo se encuentra la profesora?

—Bien, me preparo unos sándwiches y me dejo ver una película

—Me alegro —besando su frente.

—¿Ya podemos comer? muero de hambre —dijo la niña recargándose en la mesa fingiendo que ya no podía moverse.

—Claro —sonrió acercándose para besar su frente y enseguida saludar a su hijo— yo también muero de hambre

—Ya pedí que sirvieran la comida —dijo sonriendo negando ante lo ocurrido con la pequeña— felicidades hijo, te merecías ganar esos premios

—Gracias mamá —acercándose a besar su mejilla.

—Siéntense para comer —dijo Neherenia sonriéndoles.

—Si gracias mamá —sonrió Serena volteando a ver a Seiya preguntándole con la mirada si era el momento oportuno.

Seiya sonrió asintiendo ligeramente.

—Bueno nosotros, queríamos contarles algo —dijo colocándose a un lado de su esposo— es algo que a Seiya y a mí nos da mucha alegría

—Así es —sujetó su mano— y que esperemos a nuestra pequeña familia reciba con buen agrado esta gran noticia