{Vida de Mackenzie}
Mi historia comienza en Irlanda en una pequeña ciudad, mas el destinó me llevaría a otros lares, vivíamos bien, podría decir que esos años fueron los más felices de mi vida.
Mi madre era la mujer mas cariñosa de todo el mundo, o para mi así era, ella era lo mejor que tenía, mi padre casi no estaba con nosotros pero eso no importaba tanto, ya que para un niño su madre es más importante la mayoría del tiempo.
Lamentablemente mi madre enfermo unos años después y murió, cuando yo tenía 11 años, a mi padre se le ocurrió la grandiosa idea de mudarnos, salimos de prisa de ahí, yo no comprendía el porque, pero tampoco preguntaría, ya que el estaba enojado siempre, así viajamos a Londres.
Según papá era una vida nueva, y mejor, trataría de olvidar la tragedia de mi madre atrás, como un niño yo me maravillé al ver las luces de esa gran ciudad, me parecía increíble, tanto que deseaba que mamá hubiera estado ahí, por alguna razón mi padre siempre actuaba como si alguien lo siguiera, no entendía muy bien.
El lugar donde llegamos era pequeño, pero papá dijo "solo será un tiempo" no me importó, no era alguien que se quejaba, no solía hacer drama por casi nada, mi madre me enseñó hacer feliz con poco, y ese poco era un oso de peluche, amaba ese oso, y mientras el estuviera conmigo yo me sentía en casa.
Los años pasaron yo ansiaba ir a la escuela como todos los demás, pero papá siempre estaba ausente y lo que solía hacer, era dejar me en ese frío cuarto, sin comida por horas, me sentaba en un rincón y abrazaba a mi oso, hasta que el sueño me vencía y medio dormido escuchaba ruidos detrás de la puerta, a veces podría jurar que se trataba de papá ¿Pero el no estaría con mujeres o si?.
Me cansaba tanto y tenía tanto apetito que jamás comprobé si eran sueños o era real, mi padre y yo no teníamos una buena conversación cuando solía preguntar algo el me callaba, o simplemente hacía como que no existía, no me importaba tanto, cuando mamá estaba igual parecía no verme, pero para mi la falta de ella era inmensa.
No se si papá la extrañaba, porque solo veía como tomaba algo de una botella que olía muy mal, después se quedaba dormido, y otras noches nunca llegaba a casa, frente de nosotros vivían dos mujeres una madre y su hija adolescente, ella solía darme fruta cada que me veía, me gustaba que lo hiciera ya que yo comía ansioso lo que ella ofrecía.
No salía a la calle, papá decía que era peligroso, que sería bueno quedarme en casa, la chica de la fruta, como le llamaba yo, pasaba libros para colorear debajo de la puerta, yo los tomaba emocionado y me tiraba de panza en el piso para colorear, mis dos únicos y favoritos colores eran rojo y amarillo, no tenía más.
Mi padre cuando regresaba no me hablaba, yo deseaba mostrarle lo que hacía, más a el no le importaba, así que en mi imaginación le enseñaba a mamá, a ella le encantaba todo lo que yo hacía, no era muy joven como para tener amigos imaginarios, pero crecer casi aislado de todo, me hizo ser ingenuo en algunos aspectos.
Veía como noche tras noche papá llegaba oliendo horrible y caía en la cama, el cuarto que solo era "un tiempo" se había convertido en años y al parecer permanente.
Cuando cumplí 15 años quise salir y buscar trabajo, quería estudiar o hacer algo, más las salidas a escondidas me costaban golpes por parte de mi padre, jamás respondía nada, pero el decía que para un joven el mundo era peligroso, aunque trataba de convencer le de que si conseguía que hacer, podríamos estar mejor, tener dinero y comida, pero fracasaba cada vez.
Aún que mi padre era duro, yo lo amaba era mi padre, y mamá me había enseñado a respetarlo, a pesar de los golpes, seguí saliendo y ayudando con bolsas en supermercados, las señoras me daban monedas, y yo las guardaba, o aveces me compraba algo caliente para comer, me gustaría haberle llevado a mi papá, pero sabía que si se enteraba el se enojaría.
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"Enfoque De Amor"
Romance{Genero yaoi} Mackenzie Stenson este, se encuentra en una dura situación, su padre, adicto al los juegos de azar, a perdido todo, y su alcoholismo no ayudaba, el chico con apenas 17 años huérfano de madre, buscando un empleo para pagar la jugosa de...