💞Capítulo 3💞

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(Leanlo con música ☝🏻)

- Ay negrita, creo que nos pasamos con el tequila - dije riendo.

-Opino lo mismo mi Maytecita - jamás me había llamado así.

Le estaba por comentar eso cuando empezó a sonar Perfect, una de sus canciones preferidas.

La vi levantarse para luego extender su mano y decir - Me concedería esta pieza bella dama - sin dudarlo tomé su mano y me puse de pie.

Enredo sus brazos en mi cintura mientras que yo los míos en su cuello - Que bonitos rizos tienes, negrita - le dije jugando con ellos.

-A mi me encanta tu sonrisa mi May - me sentí apenada así que baje la mirada haciendo que un mechón de cabello cayera sobre mi cara.

-No le escondas tu belleza a mis pobres ojos - dijo levantando mi cara para colocar el cabello detrás de mi oreja. Admito que parecía una especie de escena de telenovela.

Dejamos que el ritmo de tan hermosa melodía nos guiara, nuestros cuerpos parecían encajar perfectamente. Parecíamos dos piezas separadas que pedían a gritos volver a estar juntas.

Su aroma me estaba intoxicado, mi cuerpo pedía más y más, no era algo bueno. Necesitaba alejarme o no podría poner freno a mi cuerpo, a mis deseos, a mi amor.

Al levantar la mirada me encontré con sus grandes ojos verdes posados sobre mis labios. Fue ahí cuando el tiempo se detuvo. Estábamos tan cerca que la piel se me erizó. Sentí algo vibrar dentro de mí ser, una sensación inexplicable con palabras, es algo que solo saben los que alguna vez la llegaron a sentir.

-Fer yo...- iba a hablar pero me calló con un beso. Pero no fue un simple beso. Este parecía uno de esos besos de novela, uno de esos besos donde entregas el alma, donde entregas todo de ti.

Admito haber dado miles de besos y haber besado muchos labios pero jamás me encontré ante algo así. Fue un beso que logró que todos mis miedos y dudas se desvanecieran en cuestión de segundos. Fue de esos besos que quieres guardar en tu memoria para siempre, de los que te quitan la respiración. De los que te quitan las ganas de probar otros besos distintos a esos u otros labios ajenos a ellos...

Al separarnos me observo fijamente por unos segundos hasta que habló - Pensarás que es el alcohol o que estoy delirando, incluso pensarás que estoy loca, pero no es así. Yo te quiero, pero no como amiga, no como hermana o compañera. Te quiero y deseo como mujer Mayte...- iba a seguir hablando pero esta vez la que la besó fui yo.

Mi cuerpo comenzó a subir de temperatura, sabía que debíamos parar o en la mañana nos arrepentimos pero no podíamos. Iba más allá de mi, más alla de ella...

Las ganas que tenía de tenerla en mis brazos para siempre fueron más fuertes que mi capacidad de razonar. Si ambas sentíamos lo mismo ¿Para qué esperar? Ya bastante tiempo esperamos para llegar a este momento.

-No creo que estés loca, siento lo mismo que tú. Te quiero, te deseo, te necesito Fer - le susurre al oído - Ámame como nadie me amó jamás...

Por amarte así Donde viven las historias. Descúbrelo ahora