Another Magical Issues

Capítulo 28

  Mientras estos eventos ocurrían en la dimensión de los sueños, en el mundo de la vigilia, se veían las consecuencias de los mismos. Al instante que Luna hizo explotar a Nightmare, los cielos de la ciudad empezaron a oscurecer. Era de día, pero parecía que la noche empezaba a caer nuevamente, provocando con esto que las criaturas, las pesadillas, volvieran a salir al ruedo.  Las personas que se encontraban en el santuario se vieron sorprendidos por aquel oscurecer repentino.

—¿Qué es lo que pasa? –Preguntó Anne acercándose lentamente a una de las ventanas. Realmente estaba oscuro- ¿Cómo? –Todos voltearon a ver a Stephen, pero este no se movía de su ubicación, al parecer, algo no estaba bien dentro de aquel sueño. -

—Ok, esto es raro, muy raro –Comentaba Kate un poco nerviosa, pero su mirada al instante se desvió hacia los tres hombres que yacían dormidos. Pudo observar que los tres se movieron de una forma rápida, movimientos leves, pero se movieron- Oigan, díganme que no fui la única que vio que se movieron. –Les señaló- Díganme que los vieron, porque se movieron. –Estaba un poquito acelerada. -

—Sí Kate, yo también los vi. –Peter intentó calmarle- ¡Doctor! ¿Qué es lo que está pasando? –Cuando Strange levantó la mirada con intención de responderle, algo sucedió. Algo que les dejó atónitos. Tanto Anne como Peter se desplomaron como plumas. Kate actuó rápido y corrió para que la rubia no se golpeara la cabeza. Darcy no sabía qué decir, estaba anonadada-

—¿Qué pasa? ¿Qué les acaba de pasar? –Kate se ponía cada vez más nerviosa- ¿Por qué están inconscientes? –Stephen se levantó y fue junto a Peter-

—¡No puede ser! –Se lamentó muy bajo, pero este lamento llamó la atención de Darcy-

—¿Qué pasa? ¿Por qué tienes esa cara? –La pregunta de Darcy fue tajante y seca. Solo esperaba una respuesta igual, directa. Stephen no respondió, solo movió al joven junto a los demás. Luego se acercó hacia donde estaba Kate con Anne y alzó a la rubia para llevarla con los demás. Tanto Darcy como Kate seguían con el desconcierto, pero la mujer se puse de pie y le plantó cara- ¿Qué pasa?

—Los introdujo en el sueño. Perdí el rastro de los que estaban adentro, ya no tengo la conexión. Lo que sea que haya pasado allá adentro, fue realmente fuerte y los atrapó ahí-.

—¿Cómo que los atrapó? –Preguntó Kate sin comprender- ¿A todos?

—Tengo que intentar volver a tomar el control de la situación porque… -La cara de Darcy al escuchar a este hombre hablando, reflejaba más que indignación, así que le interrumpió de golpe-

—Te lo voy a decir una sola vez, allá adentro, en ese horrendo mundo de pesadillas, está mi hija, está mi esposo, y hay otras tantas personas ahí. Así que, o haces algo para traerlos a todos de vuelta, o te juro que vas a tener que rezarle a Shambala o las eternos Visshanti para terminar con tu sufrimiento. Porque te juro, nuevamente, tú y todas las versiones tuyas en el inmenso multiverso, la van a pagar ¿Estamos? –La cara de Kate al escuchar aquellas palabras fue de pánico, mismo que se intensificó cuando volteó y vio a Jor. -

—¡Oigan! Yo sé que toda esa amenaza es necesaria, porque sí, es un impulso. –Hablaba, pero no les miraba, solo observaba a Jor- Pero aquí tenemos una situación, una grave. –Stephen volteó a verle-  Acaba de abrir los ojos y están verdes ¿Si saben que el color de sus ojos no es verde? ¿También saben lo que pasa cuando están verdes? Pues, a mí no me emociona mucho lo que ocurre cuando esto pasa. –Si antes estaba altera, ahora ya estaba incontrolable. Stephen maldijo entre los dientes y corrió hacia donde él estaba, dejando a Darcy de pie-

—¿Qué es lo que pasa cuando se vuelven verdes? –Preguntó Darcy sin comprender, a lo que Kate le vio con pesar y negó-

—No creo que quiera averiguarlo. Por cierto, usted me da un poco de miedo. Toda esta situación me da miedo. –Tragó fuerte y cruzó los brazos como si se abrazara a sí misma-

Con todo esto ¿Qué pasaba en el reino de las pesadillas? Los cuatro que ahí se encontraban permanecían expectantes. Luna no dejaba de abrazar a su padre mientras los otros dos no dejaban de caminar de aquí para allá.

—Ok, vamos a pensar con cabeza fría –Intervino Jor- Si él logró salir, ya no estará en su mundo, en su fuente de poder. Por ende, no será tan poderoso. –Peter se le quedó viendo y negó- ¿No? Además, los que están afuera podrán encargarse o por lo menos hacer tiempo hasta que nosotros salgamos de aquí.

—No es tan sencillo como lo dices. –Comentaba Strange- No es la primera vez que esto pasa y no es sencillo. No es como soplar y hacer botellas. –Negaba- Además, no creo que desde allá afuera vayan a poder hacerse cargo si están al pendiente de nosotros. –Luna se separó de él y empezó a caminar con las manos en la cabeza-

—Esto es mi culpa, todo esto es mi culpa. –Ellos negaban- Sí, porque si no me hubiese pasado esto, ustedes no hubiesen entrado. Y si no me hubiese dado ese ataque de pánico, Nightmare seguiría aquí.

—No, Luna. Esto no es tu culpa. –Jor se acercó a ella- Todos nosotros estuvimos de acuerdo en venir. Excepto él –Apuntó a Peter. -  Él le tenía miedo a venir. -

—¡Oye! Muchas gracias.

—Como sea. El punto está, en que todos estamos en esto. Todos tenemos algo que ver con esta situación. Así que todos juntos debemos encontrar la forma de salir de aquí ¿Sí? –Los ojos de Luna estaban cristalizados, suspiró y asintió. Pero no todo era tan sencillo, no todo era tan fácil. Justo al decir esto, la risa espeluznante de Nightmare empezó a retumbar en el lugar. La cara de todos fue de desconcierto ¿Qué Estaba pasando? - ¿Qué es eso? No entiendo.

—Me sorprende que ninguno de ustedes lo haya previsto. –Se escuchaba la voz con eco- Especialmente tú, Stephen Strange. –Con una muy brillante luz verde, Nightmare apareció frente a ellos- ¿Acosa creías que no aprendería de mis viejos errores? ¿De verdad creíste que dejaría mi reino para irme a su mundo? No soy tan estúpido como para caer en el mismo juego otra vez.

—¿Qué es lo que quieres realmente Nightmare? –Preguntó el hechicero-

—Ya Luna lo sabe. Yo le hice el ofrecimiento, solo está en ella aceptarlo.

—Luna no va a aceptar nada.

—Ella puede hablar por sí misma. –Volteó hacia la joven- Te vuelvo a hacer la propuesta ¿Te unirías a mí para juntos controlar este enorme multiverso? Lo que hiciste fue asombroso, la prueba viva de lo que podríamos lograr juntos.

—Ya yo te di una respuesta. No estoy interesada en tu propuesta. –El demonio encogió los hombros y se dio una espalda-

—Es una pena, ye te lo había dicho. Pero soy muy insistente. Y una de mis estrategias en este momento será muy divertida. –Todos se vieron las caras- Quiero hacer un juego, uno muy entretenido. –Volvió su mirada hacia todos los que estaban ahí. - Pero me falta gente, sí, me faltan un par de personas. –Chasqueó los dedos dejando expectantes a los demás. - Paciencia, las cosas no son tan rápidas. –Caminaba alrededor de todos- Sí, me falta gente, y también me sobra. –Con un leve movimiento de sus manos apartó violentamente a Peter y a Stephen-

—¡Papá! –Gritó Luna al verle salir disparado hacia la parte alta de la gran nada en la que estaban. Quedando atrapado junto a Peter en una enorme burbuja verde. -

—Tranquila que no les va a pasar nada. Por lo menos no todavía. –Mostró aquellos filosos dientes con algarabía-

—Eres un maldito.

—Muchas gracias querida. Esto no es más que un halago para mí. –La rodeó tocándole el cabello- Ay, ya llegan mis invitados. –Dijo con emoción mientras veía un resplandor que le abría paso a Peter y Anne- ¡Bienvenidos a mi reino!

—No, Anne no. –Jor intentó correr hacia ella, pero Nightmare le detuvo. - ¡No! –Gritó sin poder moverse-

—¿Qué es este lugar? ¿Qué es todo esto? –Preguntó Anne nerviosa, no entendía lo que estaba pasando, lo que estaba viendo. -

—¡Luna! –Al Peter ver a Luna intentó ir hacia ella, pero también fue detenido por el demonio-

—No, no, no. Aquí las reglas las pongo yo.

—¿Qué es lo que quieres? –Le gritó Luna-

—Jugar un juego. Ya te lo dije, así que deja de azararte, porque a ti, justo a ti, te va a caer de maravilla todo lo que tengo planeado. –Se quedó en silencio un momento y cerró los ojos sonriendo- ¡Ay! Como amo los nuevos temores. Esto se va a poner divertido. –Sonrió nuevamente y se apartó un poco. Luna observó a Jor, su rostro estaba extraño, era como si estuviese haciendo mucha presión, como si estuviese conteniéndose. -

—¿Qué te pasa? ¿Qué tienes? –Le preguntó con notoria preocupación-

—No puedo controlarlo Luna, no puedo.

—¿Qué? No, no, no, no…. –Intentó acercarse pero él le apartó con un fuerte empujón, al instante que sus ojos se volvían intensamente verdes, sus pupilas habían cambiado, ahora estaban de forma vertical. Y en su boca, dos pares de filosos colmillos se hicieron notar. Luna negaba nerviosa, Anne veía más que con preocupación, con mucho miedo, temblaba del miedo. Mientras los demás veía observaban incrédulos aquella escena. El tronar de cada uno de los huesos del joven Lokison hacia sonreír a Nightmare, era como música para sus oídos. Y de pronto, frente ellos ya no estaba Jor, frente a ellos se encontraba esa enorme y monstruosa serpiente.  Pero no estaba ahí solamente, no, estaba libre, estaba encadenada por todos lados. Se veía que era doloroso. Mientras Nightmare se reía, Luna fue hacia él a plantarle cara. - ¿Qué te pasa? Esto es tu culpa.

—¿Mia? –Preguntó con sobreactuada indignación- ¿Acaso soy yo quien le tiene miedo a las serpientes? –Al decir esto volvió a reír. Luna le veía con ira, pero no le prestó más atención y fue hacia donde estaba Jor, porque al final de cuentas, era él-

—Jor, préstame atención, yo sé que tú me escuchas. Todo va a estar bien, tienes que intentar pensar en que todo está normal. –Mientras hablaba se iba acercando. Todos le gritaban para que no lo hiciera, los dos Peter y Stephen, pero ella no escuchaba- Por favor escúchame. Sé que estás sufriendo en este momento, sé lo que sientes, por favor. –Estaba ahí frente a él, intentando evitar los latigazos. Pero sin medir nada, colocó una mano sobre él. -

—¡Luna! ¡No! –Le gritaba Stephen-

—Ahora sí entiendo la comparación de las arañas con las serpientes. –Comentó Peter nerviosamente haciendo que Stephen le ofreciera una mirada asesina-

—Cállate ¿Sí?

—Lo siento, es que estoy nervioso, y cuando estoy así, no puedo dejar de hablar, a veces digo estupideces, pero es involuntario. Lo lamento.

—Todo va a estar bien. Te lo prometo. –Luna le hablaba a Jor.  De pronto, las cadenas desaparecieron, pero él seguía en aquel estado. Luna no entendía ¿Por qué seguía así si al parecer él logró contener su miedo? Pero cayó inmediatamente cuando volteo y vio a Anne paralizada del miedo- Es por Anne. –Corrió hacia ella para hablarle- ¡Anne! ¡Anne! Escúchame, préstame atención. Es Jor, no es nadie más, no es nada más. Él no te va a hacer daño. Pero tienes que controlar ese terror que estás sintiendo. Este lugar materializa tus peores temores y aunque lo niegues, es evidente que te aterra esta parte de Jor, pero es él, y no te va a hacer nada. Si no lo controlas, él no va a cambiar. –Anne le veía con nerviosismo- ¿Sí? Por favor, él depende de ti. –Le tomó las manos- Ven conmigo. Por favor. –Anne tragó fuerte y dio un par de pasos. Luna volteó hacia Peter y solo le asintió, fue como si hablaran con una sola mirada. Lentamente iba acercando a Anne hacia donde se encontraba Jor, ella temblaba, mientras Nightmare disfrutaba del espectáculo. - Todo va a estar bien, él sabe que eres tú.

—Esto es sub-real. –Comentaba Peter desde las alturas. -

—Jor, mírame. –Luna hablaba nuevamente- Escúchame bien. Anne está aquí. Está nerviosa, y es normal. Se va acercar conmigo ¿Ok? Ven Anne, tienes que relajarte un poco porque si no, no hacemos nada.

—Esto es una locura. –Murmuró ella-

—Lo es, pero ¿Qué no es una locura en toda esta historia? –La mirada de Luna reflejaba mucha sinceridad. Él está así porque tú tienes miedo, le tienes miedo. El suyo era estar encadenado, ahora está libre, pero sigue siendo eso, y es por ti. Aquí el único remedio que tenemos para sobrevivir, es superar los miedos ¿Me entiendes? –Anne asintió y luego de un suspiro apretó la mano de Luna. Jor empezó a rodear a las chicas, pero de una bastante perturbadora. El siseo era intenso y hacía temblar a Anne- Todo va a estar bien. –Anne volteó a mirarle y ella le asintió. Jor se iba acercando poco a poco, él también estaba asustado y Luna lo sabía. Cuando bajó la cabeza, a la altura de ellas, el nerviosismo de todos era evidente, pero Luna fue la primera en dar el paso, posó su mano sobre aquella rectileana cabeza. Tenía un nudo en la garganta, pero estaba firme ante él. Tomó la mano de Anne y la fue acercando poco a poco, ella temblaba, pero si era cierto lo que Luna decía, era el único camino. Cuando su mano le tocó, tragó fuerte y una lagrima recorrió su mejilla. Pero fue su mirada, aquella mirada extrañamente familiar, la que hizo que su corazón se fuera derritiendo. Podía sentirlo a él, detrás de todo eso, podía sentirlo a él. - Te lo dije, todo va a estar bien. –Anne le soltó la mano de Luna y se posó en solitario frente a él, todavía estaba muy nerviosa, pero de algún modo sentía un poco de calma. Era como si los segundos pasaran mucho más lentamente, se hacían pesados, se hacían eternos. Pero de a poco, lo logró. Jor se alejó de ella para lentamente volver a ser él. Anne corrió y le abrazó. -

A esto, Nightmare viró los ojos y movió la cabeza con fastidio.

—Le quitan lo divertido a todo. Son unos aguafiestas. –Luna tragó fuerte y le miró fijamente, al momento que Peter iba hacia ella y le abrazó. Solo apartó la mirada de Nightmare por un par de segundos para asentir a algunas cosas que Peter le hizo- Especialmente tú, pequeña rubia arrogante –Se acercó a Luna, pero Peter se colocó delante de ella. Entonces, ella le movió para quedar frente a él. - Eres valiente, quizás demasiado. Y eso te hace caer en la arrogancia, lo que es perfecto para mí. Pero… Ya me cansé. Mejor empecemos este juego de una vez. –Aplaudió una sola vez, pero fuertemente, haciendo que los cuatro chicos que estaban frente a él se colocaran en un círculo, todos frente a todos, pero ninguno se podía mover. Al parecer Nightmare era quien les controlaba. -