Capítulo 33

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En el lugar donde estaban todos reunidos, se respiraba un ambiente de calma tensa. Darcy no entendía qué se suponía que estaban esperando, por qué Jor no quería moverse de ahí, pero estas interrogantes tuvieron una respuesta cuando aquella puerta se abrió. El primero en salir fue Peter, que al ver a Loki se sobresaltó.

—Ay no puede ser, es Loki. –A su lado estaba el otro Peter que volteó a verle con cara burlona-

—¿Es enserio? ¿Te da miedo Loki? –El otro joven se le quedó viendo-

—Perdón, pero a mí me llegaron a contar historias de todo lo que hizo Loki. –El Dios solo se reía por aquella escena- Yo era un niño, pero vi lo que pasó con la invasión que trajo a la ciudad.

—Sí, yo también. Pero no le tengo miedo. Así que muévete. –Le dio un pequeño empujón para que se alejara de él. El pobre muchacho no quitaba la mirada aterrada al ver a Loki. –
No pasaron más de dos minutos cuando la puerta se volvió a abrir, es ves sí salieron todos. El momento fue tan confuso, tan lleno de sorpresa, de desconcierto. Las caras de todos eran de expectación total. Jor lentamente tomó a su madre de los hombros, no tenía idea de lo que pudiese pasar, de lo que pudiese hacer. Luna por su parte, solo volteó a ver a la suya. Vaya que era perturbadora la escena. Kate fue la primera en colocarse las manos en la cabeza, si lo de hacia un rato le hacía temblar un ojo, esto le hacía explotar la cabeza. Pero el punto central aquí, era las reacciones de las dos Darcy. Ambas se miraban fijamente, era como si vieran su reflejo en un espejo, realmente era increíble. Lo único que las diferenciaba, además de la ropa que llevaban puesta, era el peinado. La madre de Jor llevaba flequillo, mientras que la de Luna lo llevaba al natural completamente. Las dos dieron un paso al frente alejándose así de sus hijos, para poder estar frente a frente. Todos esperaban para ver qué pasaba, pero lo que ocurrió desconcertó a propios y extraños, menos a Luna, ella sí sospechaba que algo así podría pasar. Pero ¿Qué pasó? Pues, su madre dibujó una enorme sonrisa, y con esa jocosidad que le caracteriza, expresó en un tono algo.

—¡Mírate! Me encanta como te ves, el flequillo te queda genial. –Los demás se veían entre ellos confundidos mientras las dos mujeres sonrían emocionadas- ¿Estás viendo? –Volteó hacia Stephen- Me queda muy bien el flequillo, pero tú dices que no…

—¿Qué? Yo nunca dije que… -Luna con la mirada le negó, no debía terminar aquella frase, así que se interrumpió y torció la boca-

—No tienes idea de lo emocionada que estoy al conocerte en persona. –Expresó la madre de Jor- Desde que Luna me contó, tenía unas ganas enormes de conocerte. –Las dos mujeres estaban muy emocionadas. Jor se quedó viéndoles y solo expresó mentalmente-

—“Esto es tan raro, mucho más de lo que yo podría haber imaginado” –Volteó hacia Luna que solo sonría y le habló mentalmente también- “¿Por qué estás tan tranquila?” –Luna volteó a verle-

—“Vamos, yo conozco a mi mamá. Sabía que se iba a poner así al ver otra versión de sí misma. No tienes idea de cuánto deseaba esto” –Encogió los hombros y sonrió. Luego volteó para ver a su padre, este no le quitaba la mirada a Loki, y viceversa- “¿Estás viendo eso?” –Le hizo gestos con la boca haciendo que Jor volteaba a ver a su padre. Es que, si las miradas mataran, esos dos ya estarían en un féretro. Entonces, antes de que Jor o Luna pudiesen decir algo, Loki tomó la palabra-

—¡Strange! Que sorpresa verte por acá. –Luna frunció el ceño-

—¡Loki! No diría lo mismo.

—¡Momento! ¿Ustedes se conocen? –Luna y Jor hablaron al mismo tiempo. Esto no paraba de ponerse cada vez más raro-

—¿Le cuentas tú? –Le habló Strange a Loki-

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