Imaginas (Shawn Mendes)

Tu única razón

Me acerqué a la sala común de la casa de Mason al escucharlo a él y a Shawn discutir. Al entrar vi a Shawn con su mano sosteniendo el cuello de la camisa de Mason completamente enojado.

-Ustedes dos ¿qué está pasando? -grité entre su disputa.

Ambos se separaron y me voltearon a ver claramente enfadados.

-¿Qué es todo esto? -pregunté una vez más.

-¡Dile Mason! -dijo Shawn especulante.

-Yo no tengo nada que decirle, tal vez seas tú el que le debería de decir la verdad -fruncí mi rostro completamente confundida.

-No te metas -espetó Shawn.

-Si tú no se lo dices, lo haré yo -Mason volteó a verme claramente frustrado. - T/n estoy cansado de verte junto a Shawn, los dos muy cariñosos cuando la verdad es que Shawn te ha estado usando -Sentí un apretón en el corazón.

-No... entiendo.

-Shawn te ha estado usando, él sabía desde un principio que tu padre era el famosísimo Señor t/a. Te mintió ¿Por qué crees que alguien  como él se habría fijado en alguien como tú el momento en que se conocieron? Él sabía que tu padre era poderoso -hizo una pausa pero no tardó mucho en continuar- Esa pequeña escena en el museo no fue coincidencia, Shawn lo tenía todo planeado.

Mi estómago se dio vuelta al escuchar eso último. Shawn y yo nos habíamos conocido en el museo, ambos nos topamos al observar la misma estatua y el resto fue cosa del 'destino' o eso era lo que yo creía.

-Shawn, dime que es mentira, dime que lo puedes negar -. Su mirada no se despegaba de mis ojos pero no hizo más que eso -no puedes negarlo ¿cierto? Todo es verdad, lo que dice Mason es verdad.

-No, no puedo negarlo.

Lo dijo tan fácil y excento de emociones que algo en mi se activó. Estaba triste y decepcionada pero sobre todo sentia un enojo y rabia que superaba fácilmente cualquier otra emoción.

Me acerqué a Shawn y con un dedo acusador toqué su pecho -Estúpido mentiroso -. Dije y salí de la casa.

Escuché abrir y cerrar la puerta junto con el sonido de unos pasos a toda prisa detrás de mi.

-T/n, por favor, déjame explicarte... -me detuve y lo miré a los ojos, los cuales estaban sorprendentemente húmedos.

-¿Explicarme qué Shawn? ¿Cómo me usaste para conseguir fama? ¿Cómo planeaste todo esto sólo por ti? ¿Cómo me mentiste a la cara desde el primer momento en que nos conocimos? Eres un egoísta, Shawn -me volví a mi camino pero está vez ya no escuchaba sus pasos.

-Eso fue antes -gritó haciendo que me detuviera en seco y me girara hacia él.

-¿Antes de qué Shawn?

-Antes de darme cuenta de que te amo. -Sentí como que si me huvieran golpeado fuerte en el estómago.

-Yo también te amo, Shawn -hice una pausa para evitar llorar y proseguí -o solía hacerlo pero no soy lo suficientemente estúpida como para pasar todo esto por alto. Tu única razón para llegarme a conocer fue tu propio interés, eso no es amor.

Él me miró con una cara indescifrable, trató de acercarce pero lo detuve.

-No me sigas, lo último que quiero ver es a tí -. Y con eso me retiré sin voltear a ver nuevamente.

Llegué a mi casa y por suerte no estaban mis padres, únicamente Ryan mi hermano mayor.

-¿Todo bien? -preguntó después de abrir la puerta de mi habitación y verme acostada a media cama.

-No lo sé -él entró y se acercó a la orilla de mi cama.

-Vamos, sabes que me puedes decir lo que sea, puedes contar conmigo.

Me levanté y suspiré, luego lo ví y todo el enojo que tenía por Shawn volvió a mí.

-¿Por qué los hombres son así? Idiotas... mentirosos... interesados -dije mientras golpeaba su pecho reclamandole.

-Oye, oye, calmate -tomó mis muñecas para evitar que le siguiera golpeando -Primero que nada, eso dolió y segundo no todos somos así.

Me vio a los ojos mientras que los mios ardían llenándose de lágrimas.

-No sé que hice mal Ryan, ¿por qué no lo vi desde el primer momento? Era tan obvio -escondí mi cara en su pecho y lloraba aún más con cada palabra que decía.

Ryan soltó mis brazos y me abrazó, luego colocó una mano en mi espalda y otra acariciando mi cabello mientras yo llenaba de lágrimas y mocos su camisa.

-No sé lo que te haya pasado, no entendí la mayoría de cosas que me has dicho pero quiero que sepas que yo no te dejaré sola en esto y que sea lo que sea siempre me tendrás a tu lado -tomó mi cara entre sus manos y la levantó para que lo mirara -ahora limpiate esa cara fea que tienes porque no quiero verte así.

Sonreí ligeramente al escucharlo.

Una vez me había lavado la cara regresé a mi cuarto y me senté en la cama justo al lado de Ryan.

-Estaba en casa de Mason junto con Shawn, los escuché pelear y cuando los detuve Mason me lo contó todo, me dijo que Shawn salía conmigo únicamente por nuestro padre, él sabía quién era él y sabía que yo era su hija -miraba mis manos en mi regazo sin levantar la vista -Shawn me mintió -dije, mi voz rompiéndose al final.

-Ese maldito... va a arrepentirse de lo que te hizo.

Sus nudillos se volvieron blancos y sus manos envueltas en puños.

-Gracias, pero no quiero que te metas de esa manera -coloqué una mano sobre las suyas tratando de tranquilizarlo.

-¿Cómo quieres que me quede con los brazos cruzados? Necesita saber que nadie se mete contigo -negué.

-Eso no es lo correcto, Ryan.

-Claro que sí, ¡es justicia!

-No, no confundas la justicia con la venganza.

Lo volteé a ver y su mirada se suavizó.

-¿Qué harás entonces?

-Aceptarlo. Superarlo. Seguir adelante.

Ryan sonrió honestamente y me abrazó.

-Eres una increíble chica y hermana, t/n. Jamás comprederé cómo las personas se atreven a lastimarte.

Lo abracé de vuelta y sonreí al darme cuenta de lo mucho que significaba para él.

-Gracias por todo, Ryan.

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Les pido perdón por estar tan inactiva pero quiero que sepan que siempre buscaré tiempo para ustedes. ¿Qué les pareció? ¿Quieren parte 2?