¡NYA!| Proyecto ZRin [LEER DESCRIPCIÓN Y ÚLTIMA PARTE]

15. Explicaciones

Pasamos un par de minutos llorando, hasta que por fin pudimos calmarnos, le sonreí a Rin en agradecimiento y luego me senté para no caerme luego de lo que iba a decir.

--Creo que después de esto ya no tiene caso ocultarlo más tiempo--Kana me miró bastante asombrada por eso--, hace cerca de un año mis padres y yo tuvimos un accidente de camino al recital de mi hermana--, tomé aire haciendo una gran pausa--. Mi padre iba demasiado rápido, y no se dio cuenta de que un camión estaba pasando, como pueden intuir... fui el único que sobrevivió al choque, mi madre murió al instante, y mi padre en el hospital.

Las dies chicas que tenía frente a mí me miraban atónitas, por lo que yo proseguí mi historia ignorando su sorpresa.

--Estuve internado en un hospital por dos semanas, solo para verificar que todo estaba bien, fue un milagro que saliera con apenas un par de rasguños--, miré a Kana, quien probablemente estaba recordando los días en los que yo no despertaba--, luego de que volví a casa ya no podía seguir viviendo como siempre en ese lugar, así que tomé la decisión de venir a Japón con mi tía--, a pesar de que no quería preocupar a las chicas, lo siguiente era de lo más importante que tenía para decir--. Desde ese día vivo con pesadillas prácticamente a diario, y no puedo dejar de recordar el accidente, al menos no por mi cuenta.

La información fue toda de golpe, por lo que las chicas tardaron en reaccionar, la primera en hablar fue Rika.

--¿Todo esto pasaba por tu mente cada vez que estabamos juntos?--preguntó con un tono apenado.

Negué, como era obvio--No, el concierto, las prácticas, y la mayoría del tiempo que paso con ustedes me ayuda a olvidarlo por un rato.

Luego de eso volvió el silencio, bastante incómodo, pero cuando yo iba a dar por terminado todo, una voz habló.

--¿Por qué?--preguntó Rin en un susurro.

--¿Por qué qué?

--¡¿Por qué no nos dijiste nada?!--gritó antes de comenzar a llorar y saltar a abrazarme con mucha fuerza.

La recibí en mis brazos y acaricié su cabello con una sonrisa--No quería que pasara esto, y tampoco quería que cambiaran su forma de verme--, miré a las demás con mi media sonrisa--, no superé el accidente, ya lo dije antes, pero tampoco quiero que se preocupen por eso, es mi carga y solo mía.

--No tiene porqué ser así--susurró Rika mirando el suelo.

Mis lágrimas amenazaban con volver, pero antes de que salieran Rin habló--Es injusto que tengas que sufrir, podemos ayudarte--, escucharla afligida y al borde del llanto me quebró, dejé caer todas mis lagrimas mientras abrazaba a la pelinaranja con mucha fuerza.

Era incapaz de hablar, de expresar todo lo que sentía en aquél momento, por lo que simplemente me alejé de ella y le sonreí.

--Gracias Rin--me obligué a parar por un momento--. Creo que por ahora voy a volver a casa.

Todas asintieron, mientras que Kana guardó rápidamente su violín, para luego acompañarme tomando mi mano con fuerza.

Nos alejamos sin mucha prisa, yo todavía manteniendo mi sonrisa.

--Ellas te hacen bien--sonrió la pelirroja, sonriendo de vuelta.

Asentí bastante más tranquilo--Nunca voy a poder agradecerles lo suficiente.

El resto del camino lo pasamos en silencio, caminando sin soltar la mano del otro, después de todo eramos lo único que le quedaba al otro.

--¿Vas a cambiar esa cuerda?--le pregunté a Kana antes de abrir la puerta de la casa.

--Si, pero por ahora quiero descansar un rato, fueron muchas emociones por un día--me dio un tierno abrazo antes de irse a su habitación.

Sonreí antes de entrar a mi habitación, allí pude ver un escritorio, una lampara prendida, y bajo su tenue luz se encontraba mi objetivo, una hoja de papel llena de palabras junto a un bolígrafo azul.

--Ahora sí, a terminar con esta cosa--me dije antes de terminar de acomodar las ideas de la canción.

Otra vez le debía mi canción a Rin, escribía por y para ella. Algo que al final del día, llenaba mi corazón.