Los Chicos Del 39B [Maylor / Deacury]

Chapter twenty three

NOTA DE LA AUTORA: Por favor, cuando encuentres una canción en este capítulo escúchala mientras lees, la emoción es increíble. Ahora sí, que disfrutes.❤

~Viernes por la tarde~
~Día del Dreamer's Ball.~

En la pequeña casa de los Bulsara ya hacían dos pequeños muchachos arreglándose para el baile de esta noche.

-Y listo, te ves como todo un príncipe.

-Gracias, Fred. Quedó muy bien el maquillaje.- Contestó el rubio mientras observaba su reflejo en el espejo.

-Eso es obvio, querido. Soy todo un experto.- Exclamó haciendo uno de sus muy conocidos y peculiares ademanes.

El chico de cabellos negros terminó por agregarle los últimos detalles al traje del rubio. Y justo cuando terminó con el toque final, el timbre de la puerta principal sonó.

-Es él, ya llegó. Quédate aquí, querido. Diablos, a Brian le va a dar un infarto cuando te vea.

El chico de cabellos dorados no pudo evitar reír y sonrojarse al escuchar el comentario del azabache. Mientras se quedaba en la planta de arriba esperando, lograba escuchar los halagos de Freddie al atuendo de Brian.

El rizado y el persa subieron las escaleras hasta que se encontraron con Roger tratando de peinarse su cabello con sus manos. Sin embargo, al notar la presencia del rizado, éste dejó de hacerlo y se quedó como una estatua, mientras empezaba a sentirse un tanto nervioso y emocionado.

-Hola, Bri. Te ves bien...- Exclamó con timidez.

-Roggie, tú te ves aún mejor ¡tan solo mírate!- Respondió Brian con una gran sonrisa en su rostro mientras se acercaba al nombrado.

Cuando ya estaban lo suficientemente cerca no dejaban de mirarse el uno al otro con una preciosa y tierna sonrisa, y un ligero rubor bañando sus mejillas.

Lo que no se percataron era que Freddie aún seguía en la habitación, observándolos de pies a cabeza a ambos.

-Si siguen así y se besan voy a gritar, lo juro.- Exclamó con una risita de por medio.

Esa pequeña risita se encargó de contagiar a los otros dos chicos restantes, terminando por alejarse el uno del otro.

El trío de amigos siguió conversando y después de una larga charla. Los tres optaron por esperar a John e irse los cuatro juntos al baile.
No sabían qué los esperarían allá, entonces pensaron que es mejor idea si los cuatro van juntos.

Pasaron alrededor de dos horas y Freddie aún no estaba listo. Había pasado tanto tiempo que Roger se había quedado dormido con Brian en el sofá de la sala de estar.

Finalmente, luego de mucho -mucho- tiempo. Freddie estaba listo, aquél traje que portaba era el más elegante y extravagante que alguien se podría imaginar. Parecía que este fuese hecho especialmente para él.

Finalmente al cabo de unos minutos, John llegó y luego de mil y un halagos por parte del pelinegro y el castaño; los cuatro chicos partieron rumbo al baile.

🎶

-¡VAMOS A LLEGAR TARDE!

-No Brian, vamos bien.- Contestó John un poco hastiado. Era la tercera vez que decía eso en menos de quince minutos.

-Tenemos que correr, ¿y que tal si nos quitan la mesa?

-¿Rick y Mike irán?- Preguntó Roger con un poco de temor tratando de cambiar el tema y -de cierto modo- calmar a un Brian muy histérico.