Los Chicos Del 39B [Maylor / Deacury]

Chapter twenty one

Después de aquel bochornoso -y para algunos- impactante momento, los cuatro decidieron dirigirse a su siguiente salón de clases.

-Freddie, ¿conoces lo que es la privacidad?

-¿De verdad preguntas eso, Brian?- Preguntó Roger sarcásticamente.

-Sólo pregunto, debes respetar la privacidad de tus amigos.

-Oh, discúlpame querido señor pelos locos, pero que yo sepa el baño de la secundaria no es un lugar para besuquearse y ABANDONAR A SUS AMIGOS.- Contestó Freddie.

Brian, Roger, e incluso John, no pudieron evitar reírse como desquiciados al ver el grado de berrinche que estaba haciendo un histérico Freddie que, mientras hablaba y hablaba, alzaba a su gatita y observaba a sus amigos con el ceño fruncido, dando a entender lo muy ofendido que se sentía.

La discusión duró todo el día que estuvieron en clases, sin embargo, a la salida decidieron no retomar el tema -por suerte- y decidieron pasar a asuntos más interesantes e importantes. Entre ellos el famoso baile que será la próxima semana.

Sí, ya había pasado un mes de cuando Paul McCartney le comentó a Freddie sobre 'Dreamer's Ball'. El tiempo estaba volando.

Con esto también quiere decir que las vacaciones del medio curso ya estaban por terminar.

-Tengo una idea, ¿que tal si vamos a un salón a bailar? Así podríamos practicar para el evento de la próxima semana.- Exclamó Mercury para luego regalarle al castaño una de sus sonrisas más coquetas que él había visto.

-Suena genial, Fred.- Exclamó Brian con seguridad luego de observar como John asentía y su pequeño rubio lo miraba con unos ojos de cachorrito queriendo ir con ellos pero, a la vez, queriendo estar con él también.

-Excelente, queridos. Entonces, vámonos.

El trayecto fue de lo más agradable, chistes por aquí, bromas por allá y sobre todo mucho cariño y felicidad entre ellos. Definitivamente estos chicos nunca se podrán separar jamás.

Al llegar al club, la decoración de éste era sencillamente preciosa. El ambiente era muy relajante. Tenían una linda y muy colorida rockola donde se podría ver un par de jóvenes eligiendo una canción para luego dirigirse a la pista de baile.

John, Freddie, Brian y Roger se sentaron en una de las mesas que les permitía ver toda la pista de baile, tan iluminada, con una bola disco en medio de esta, brillando y girando por toda la pista.

Comiendo unas hamburguesas y una ensalada, los chicos hablaban sobre temas banales y uno que otro comentario sobre sus compañeros de clases.

-David irá con Mick, ya me lo dijo él mismo.- Exclamó Roger mientras leía al detalle el menú.

-Lo sabía, sabía que ellos eran pareja.- Respondió Freddie mientras realizaba la misma acción que el rubio.

-Escuché también que Paul irá con John.- Esta vez fue Brian quien habló.

-¡Oh por dios! Tendré que tomar una fotografía de ellos juntos con la cámara de Deacy!- Exclamó el pelinegro con mucha euforia.

Mientras conversaban Roger de vez en cuando se perdía en los ojos color hazel que tenía su rizado. Estaba todo claro. Roger se había enamorado profundamente de Brian y ya no había nada que hacer. El hermoso aire del amor nació. Ya no había nada que hacer. Esos ojos que por ratos cambiaba de tonalidades y a veces era complicado elegir un tono específico, esos cabellos ondulados, tan perfectamente imperfectos que caían y decoraban su rostro. Esos colmillos que al sonreír se sobresalían y lo hacían lucir más adorable de lo que ya era. Brian era hermoso y ahora Roger lo tenía bien claro.
Nuevamente; Roger se había enamorado de Brian y ya no había nada que hacer...