Juegos Pesados (COMPLETA)

capitulo 25- Guerra

Le Duciel.

Di un salto cuando sono la explosion y los disparon, empezaron a resonar como si estuviera en el mismisimo oeste. El piso se estremecio a causa de la explocion haciendome tener que sostener contra uno de los mesones que habian alli. Vi la mesa moverse de un lado a otro.

Se exploto la guerra y yo ni habia llegado a la sala.

Pero, ¿Que coño hace esa mujer hay arrinconada?
Se ha fumado una lumpia...
Me habia escabullido, unas horas antes entre las chicas de limpieza que ya empezaban a marcharse a medida que iniciaba la fiesta.
Era un castillo aquel lugar. Que enorme era.
La morena, pelo enrulado de buena figura estaba arrinconada, mientras le disparaban. No me habia visto. Estaba escudandose con una columna que estaba siendo reventada. Hasta que vi algo brilloso caer a sus pies. Ella como que tambien, noto la granada porque corrio hacia el pasillo, donde conectaba la cocina donde estaba yo.

Por la fuerza de la explosion de la granada la vi caer al piso de boca, corri hacia ella, tomandola por un brazo, arrastrandola hacia donde estaba antes. tumbando la mesa de una patada y escudandonos con ella. ¡Van a matarla! O peor. ¡Van a matarme a mi!

Cuando me percate ya tenia varios guardias de Tony, baleandome la mesa, dios gracias que era de metal, que ya comenzaba a calentarse. ¡Me van a matar aqui por esta¡, recargue el cartucho y me levante disparando en contra ataque para que me diera chance de hacerlos retroceder un poco.

¿Quién diablos eres?-. Me pregunto acelerada la morena, de enorme cabellera. recargando su arma, la vi hacer una mueca, sobandose un costado de su cuerpo para girarse y ayudarme a disparar y escudarse con la mesa de hierro cuando podíamos. Ahora eramos dos las que haciamos retroceder a los guardias.

-¿Importa?-. pregunte, cambiando uno de los cartuchos y soltando una de las pistolas que se me habia quedado trancada, para sacar otras de las que traia

-¿Asi le hablas a tus mayores?

¿Mayores?
¿Cuantos tiene esta pues?

-Ojala de vieja me vea asi...- admiti y vi de reojo a la hermosa morena sonreir.

-Si voy a morir, dame el placer de saber quien eres.

¡Tiene razon!

-Mi estúpido novio me llama loba vestida de oveja- dije sonriente al pensar en Nixon. Por lo menos su recuerdo, no me lasyimaba tanto como crei al abandonarlo. Al descuidarme senti algo empujarme y arderme en el hombro. ¡Me habian dado!, senti el brazo prensarceme en seguida ante el dolor y la sangre empezar a fluir on rapidez manchandome la camisan - Maldicion!-. Me agache detras de aquella mesa tapandome con una mano el hombro. Aguantandome las ganas de gritar de dolor.

-Mierda...- oi decir a la morena, levantandose para soltar disparos a diestra y siniestra. Vi de reojo que le dio a casi todos lo que estaban menos a uno que estuvo a punto de dispararle, pero un disparo de un arma que no era de ninguna de nosotras dos logro darle. Matandolo.
La morena se giro hacia la direccion donde estaba una policia que la apunto de vuelta, me levante colocandole el arma muy cerca del rostro. Ahora eramos dos apuntandole a la rubia pelo corto, vestida de militar - policia.

- Bajen las armas-. Nos dijo la rubia, ojos verdes. apuntando fijo a la morena.quien se veia bastante determinada a no bajar el arma. Y fue cuando me pregunte ¿Por que la estoy ayudando?
- No estas en disposicion de exigir.-. Le sonrei con triunfo y esta rubia me miro de reojo. Ambas giramos a ver a la morena que bajaba el arma. ¡¿Que hace esta?!
- Se nota que tenemos el mismo enemigo-. dijo sorprendiendome. Baje el arma en seguida y la poli igual.
- Tony-. dijimos al unisono.
- Alba Ortiz...- solto la rubia con firmeza.
- Osiris Dragonitt-. dijo la morena sin mas. Vi cuando ambas giraron a verme, mientras me realizaba un torniquete en el brazo deteniendome el sangrado, o ni llegaria a sair de esta cocina. Le sonrei a ambas.
- Soy Le Duciel...- dijo esta. - lamento decirles que voy por la cabeza de Tony.
- La que llegue primero...- dijo Alba. sonriente. Suena divertido. Y a mi me encantan los juegos, si son pesados mejor.