#22 Blind for a Week ⟩⟩ Hurt II

3.8K 248 36
                                    

YEOJONG¡!

en donde jongho está temporalmente ciego
y yeosang sólo puede ver de un ojo

Gracias a un pequeño accidente hace dos días, Jongho había quedado ciego temporalmente

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Gracias a un pequeño accidente hace dos días, Jongho había quedado ciego temporalmente. Dicho infortunio disiparía en una semana y media o dos, según el médico. Yeosang se había reído de él cuando oyeron que no sería permanente, diciendo que el karma existía y era sorprendentemente rápido.

Jongho bufó por segunda vez en la mañana cuando Yeosang le picó la costilla con una rama, preguntándole la hora.

―Siri, ¿qué hora es? ―dijo Jongho con fastidio.

Yeosang pidió disculpas reiteradas veces recordando la situación de su novio y este le pegó con fuerza en la pierna, el sonido de su piel retumbó en todo el parque.

―Si sigues pegándome, me iré. ―Yeosang sobó su pierna con dolor―. Deja de ser tan violento, yo no te dejé ciego.

Jongho abultó los labios, disculpándose con su novio y tomando su mano.

―Lo siento, sigo molesto por esto ―dijo Jongho señalando sus propios ojos con una mano―. No tienes la culpa, lo sé. Lo siento ―gruñó, agobiado.

―No te preocupes. ―Yeosang le besó la mano.

―¿Cómo sigue tu ojo? ―preguntó Jongho, arrastrando la mano por el pecho de su novio hasta llegar a su rostro y acariciar su mejilla.

―Sigo sin poder abrirlo completamente... También continúa hinchado y muy morado ―Yeosang tocó su ojo sintiendo la hinchazón en él.

―¿Cómo se ve dentro?

Yeosang sacó un espejo de su bolso y se miró en él.

―La partecita blanca sigue extremadamente roja ―murmuró, viendo la esclerótica manchada.

Jongho se acercó a su novio y dejó un pequeño beso en su pómulo.

―¿Ya te dije que lo sentía hoy?

Yeosang rio bajito y asintió con un casi inaudible “sí”, recordando que su novio se había disculpado, cada mañana al despertar a su lado, desde el accidente.

Ambos se recostaron en las mantas de picnic, con las manos entrelazadas. Les encantaba salir a ese parque a ver el lago y los peces, algunas veces solían alquilar botes y pasar la tarde entera en el agua.

―Somos dos chicos en un parque con sólo un ojo para guiarnos. ―Yeosang de repente habló―. Quizás debamos llamar a Seonghwa para que nos venga a buscar.

―Seonghwa no ―Jongho gruñó―. Recuerda que está en el hospital, Hongjoong dio a luz hoy.

Ambos suspiraron nuevamente.

―Hay que ir a visitarlos más tarde.

Jongho asintió con una sonrisa resplandeciente.

―Entonces llamemos a Mingi. Yunho le regaló un auto hace poco ―murmuró Yeosang, explorando las alternativas.

―Quién pudiera... ―Jongho rio.

―¡Hey! ―Yeosang chilló con gracia―. Yo te regalé un anillo de compromiso, una cosa a la vez.

―No le hemos puesto fecha a la boda, según yo no te quieres casar conmigo.

Yeosang soltó la mano de Jongho lentamente, quedándose en silencio. Aquel reclamo injusto y agresivo le había hecho sentir incómodo, especialmente porque no tenía tanto dinero como para comprarle un auto a su novio o planear la boda para la semana siguiente. 

Jongho dejó de lado su ceño fruncido cuando se dio cuenta de que Yeosang no estaba en la manta contigua.

―¿Yeosang? ―Jongho tanteó las zonas cercanas, pero no tenía sentido de la orientación así que no pudo pararse correctamente―. No estaba hablando en serio... Hey, cariño... ¿Adónde fuiste?

Justo cuando Jongho comenzaba a entrar en pánico, cuando la taquicardia le comenzaba a dar calor en todo el cuerpo, escuchó a alguien sentarse a su lado y colocar un palito de madera en sus manos.

―Te compré un gigantesco algodón de azúcar ―dijo Yeosang, tratando de sonar gracioso y ocultar su pena―. Quizás así seas un poco más dulce conmigo.

―No dije... eso en serio. ―Jongho se quedó callado.

―Sí, como digas...

―Oye... ―Jongho colocó la mano sobre la pierna de Yeosang―. No quise sonar agresivo. Dios, en cualquier momento te cansarás de mí si continúo haciéndote sentir mal.

Jongho no podía ver a su novio, pero sabía que este estaba llorando. Con pesadez, se recostó sobre las piernas ajenas dejando el algodón a un lado.

―Te amo, lo siento.

―Tranquilo ―murmuró Yeosang, acariciando el cabello de su novio con cariño―. Ya me acostumbré a tu tipo de amor.

―Pero eso está mal ―se quejó el menor, abultando los labios―. Cuando recupere la vista te compensaré todo.

Te llenaré de mimos, de besos y abrazos, te llevaré a tantas citas que se te caerán los pies, te alimentaré con todos los dulces y postres que te encantan. Haré que te sientas como un príncipe. ―Jongho hizo esa promesa silenciosa.

Dom

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Dom., 8 de septiembre 2019

Más raro esto, perdón. Estoy un poco desanimada :(

Treasure ⸺ateez。2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora