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'Obedeció'

YoonGi está por arrepentirse de aquella descabellada idea dirigida por su excitación. Pero para su placer, sintió como el suave, húmedo y caliente lugar lo esperaba, JiMin por su parte no sabía que era lo que estaba haciendo, pero después de escuchar aquella amenaza se obligó a obedecer.

Tomó parte por parte el caliente, largo y ancho miembro en su boca, degustando con cautela el agrio sabor del pre-semen, jamás en su corta vida había sentido tal cosa, cuando el miembro de YoonGi estuvo casi que  por completo en la pequeña cavidad bucal creyó que estaba a punto de ahogarse, YoonGi no se contuvo y soltó un fuerte jadeo, deseó que ese momento nunca acabara, y que se alargará a lo máximo, el lugar donde reposaba su adolorido miembro era tan estrechó que no se movió por unos segundos, con cuidado y completa atención tomo los cabellos de la nuca de JiMin y lo sostuvo de allí.

-— Mueve tú lengua —- logró pronunciar con entendimiento. Su pecho subió y bajo con rapidez.

La inexperta boca de JiMin se cerró a unos pocos centímetros de la pelvis de YoonGi, pues la hombría de este no cabía por completo. Así trato de hacer lo que se le pedía aunque sus piernas estuvieran vueltas gelatina.

En cuestión de segundos YoonGi se vió apurado con los entendibles movimientos de la legua de JiMin, no importando quien era aquel joven, YoonGi embistió con fuerza la boca de este, llegando a el lugar de su campanilla,  haciendo que en el proceso este se ahogarse con el duro miembro dentro de él, JiMin tosió, pero eso a Yoongi no le importó pues una segunda vez lo hizo, una tercera y es que aquel caliente lugar lo estaba volviendo completamente loco, sentir como la garganta del pequeño lo apretaba lo enloquecio hasta que abrió los ojos y miró hacia abajo, fue allí donde se encontró con un JiMin con lágrimas en todo su rojo rostro, eso en vez de frenarlo lo excitó aún más, dió unas dos estocadas más, estaba segado del placer, su polla brincaba con fuerza, las pulsadas, y eso que JiMin no era un experto, sólo era un agujero donde YoonGi estaba descargándose, pero ni con todo eso YoonGi pensó en detenerse, no ahora que estaba tan cerca, sus párpados pesaban tanto que se rindió por tenerlos abiertos, sus roncos jadeos inundaban la habitación, su sudor o agua caían se resvalaban por su espalda, sus caderas se movían frenéticamente, y cuándo sus testículos se agotaron dando aviso a su eyaculación fue el fin. Su climax Lo alcanzó de la mejor manera: dentro de él. Fue su fin y el fin para JiMin, el semen de YoonGi cubrió parte de la boca, barbilla, rostro y parte del cabello que llegaba a los pequeños ojos de este.

—- Sí.. -— murmuró YoonGi saciado, miró con orgullo aquel delicado rostro, que estaba cubierto con su esencia, se agachó hasta tocarlo — Oh, JiMin.. — dijo y se lanzó hasta tomarlo de la barbilla.

JiMin intento escupir aquel escurridizo liquido pero la venosa y pálida mano de Yoongi lo detuvo, en ese acto logró que por accidente JiMin tragase su semen.

—- De-desgraciado -— logró comunicar con repulsión y arcadas, era obvio que las náuseas estuvieran presente después de tragar el viscoso líquido blanco. JiMin se levantó y corrió fuera de la habitación, dejando a YoonGi sin palabras, pero con una inmensa satisfacción.

—- Obedeció -— susurro para Si.

Caminó hasta el baño, pues las que antes eran gotas de agua ahora eran grandes gotas de sudor casi secas, su mente no estaba en contra de lo que había hecho, y aunque en su vida jamás le habían interesado los chicos su perspectiva cambió, estaba tan confiado de que de nueva cuenta podría tener al hijo de su esposa, porque deseaba repetir lo sucedido. El agua volvió a caer en su cuerpo derritiendo todo contacto con la calidez. Pensó en SuRan, si ella no era capaz de darse cuenta de lo que ocurría nada podía. Nadie lo haría, y así seguiría. Porque JiMin le habían mostrado la sumisión en primera estancia.