2. KING [Chenmin]

13. DESCUBRIENDO

Yixing se encargó de mantenerlo ocupado las siguientes noches. 

Minseok entrenaba arduamente en el gran patio bajo la luz de la luna. A veces Seulgi lo acompañaba y otras veces Sooyoung, una de sus hermanas, se unía a ellos. Aprendió mucho de ambas, cada una tenía una técnica diferente, pero las dos eran muy buenas en lo que hacían. Durante sus descansos, Minseok se sentaba bajo un enorme árbol con flores amarillas y recostaba su espalda en el tronco. Cerraba sus ojos e intentaba captar alguna emoción de Jongdae, pero solo recibía algunas sensaciones vagas de cansancio y no estaba seguro de que no fueran las suyas.

Al cuarto día tenía mucha sed. No era para morirse, pero había empezado a captar los olores de los demás vampiros a su alrededor con mayor detalle. Ahora sabía cuando Seulgi venía hacia ellos, incluso unos minutos antes de que llegara, con solo oler el aire. Pese a su hambre y a la gran variedad de olores a su alrededor, nadie se le antojaba, por decirlo de alguna forma. Muchos olores le desagradaban y muchos otros le eran totalmente indiferentes. Solo sentía una especial curiosidad por la sangre de Yixing y por la de Joohyun, otra de las hermanas de Seulgi, ellos dos olían de una forma muy dulce que le recordaba un poco al olor de Jongdae.

—Podría enseñarte a cazar —Yixing sugirió, sentándose a su lado—. O podrías aceptar beber de mí.

Minseok negó inmediatamente.

—No. Creo que puedo soportarlo un poco más.

Yixing le dio una mirada que no supo descifrar, parecía nostálgico.

—Bien —aceptó—. Pero si empiezas a ponerte salvaje, voy a obligarte a beber —advirtió, poniéndose de pie—. Ve a la biblioteca un rato, estudia para tu examen.

Minseok hizo una mueca. No le gustaba tener que leer tanto. Pero no iba a negar que los escritos por vampiros eran interesantes. Tenían una perspectiva de la vida muy diferente de la humana. Probablemente porque ellos ocupaban su tiempo para las artes, hacerse de riquezas, viajar y entregarse a los placeres carnales y recreativos. No tenían que preocuparse por enfermedades, lo cual era una gran ventaja, pero habían muchas disputas territoriales a medida que los cuatro reinos se expandían sobre territorios no dominados. A veces Minseok pensaba que ellos vivían en un mundo paralelo. Para los humanos los vampiros eran solo una leyenda, historias de terror en las que ya nadie creía. Para los vampiros, los humanos no eran más que una fuente de alimentos o servidumbre con una promesa de pago enorme. Cuando tuvo que leer el Decreto de Vida (porque Yixing se lo exigió), descubrió algunas cosas interesantes como que cada vampiro solo tenía derecho a convertir a tres humanos a lo largo de su vida y que debía hacerse cargo de ellos hasta que fueran vampiros independientes. A muchos no les gustaban los convertidos, frecuentemente se les veía como la clase más baja. La mayoría de vampiros prefería beber de un humano hasta saciarse y luego asesinarlo (en caso de que este no muriera inmediatamente debido a la pérdida de sangre). Minseok no quería asesinar humanos, intuía que llegado el momento terminaría aceptando la sangre de Yixing.

* * *

El momento llegó la sexta noche luego de que Jongdae se marchara. Minseok sentía su boca reseca y su visión borrosa cuando se presentó al patio de entrenamiento. Ni siquiera sabía cómo es que había logrado llegar hasta ahí.

—Oh, por los dioses, Minseok —Yixing corrió a su encuentro y lo sostuvo por los hombros—. No puedes esperarlo más. Ni siquiera serás capaz de llegar hasta la ciudad de humanos más cercana. Ven conmigo.