No lo niegues

Parte 32: Un error

KELLAN

—Felicidades, papá. Todo salió increíble. — Abracé a Stephan luego de que bajó del escenario. El lanzamiento de la nueva línea de primavera había sido un éxito, papá se lució con los diseños y la organización del desfile en conjunto con el evento en general estuvo perfecto.

Mientras estaba sentado en segunda fila durante el desfile de pasarela, escuché los comentarios que la gente de mí alrededor hacía, todos ellos positivos y uno que otro comentario constructivo que me aseguraría de hacerle llegar a papá luego. Él siempre se tomaba con mucha gratitud las opiniones del público.

—¿Te gustó? ¿No dije nada demasiado estúpido? ¿Me vi bien en la pasarela? — Preguntó mientras salíamos de aquel salón rumbo a donde se llevaría a cabo el cóctel de celebración.

—Siempre te ves bien en la pasarela, quien desfilara con la novia al final deberías ser tú. — Dije sonriendo, papá tenía esa aura moderna que le hacía brillar en la pasarela más que cualquier otro modelo. Las fotos que salían de él en las redes después de cada evento eran impactantes, tanto que papá Peter tenía un álbum especial con todas ellas en casa.

—¿Seguro que quieres ir al cóctel? Peter llegará y ya no es necesario que me acompañes si estás aburrido, bebé. — Mencionó acariciando mi mejilla con una sonrisa fraternal, yo negué suavemente con la cabeza.

—No puedo privar al mundo de la moda de una foto del gran diseñador junto al guapo de su hijo, eso es ilegal. — Le guiñé un ojo de forma divertida, él rió junto conmigo.

—Bien dicho, vamos entonces. — Asentí, y dejando que tomara mi mano me guió hasta el salón donde ya se encontraba toda la gente.

Ése era el momento en donde papá conversaba con importantes proveedores, negociando sobre una y otra cosa que yo realmente no entendía mucho. Papá me miró cuando se acercaba a él uno de esos hombres con los cuales no le era muy grato conversar, pero que sin embargo era absolutamente necesario hacerlo.

—Buena suerte... — Susurré para él, dándome media vuelta para dirigirme a la mesa donde estaban los bocadillos.

Saqué mi teléfono para revisar posibles mensajes, lo había tenido en silencio en todo momento por respeto a papá.

Tenía varias notificaciones del grupo en whatsapp que teníamos con los chicos, pero no tenía ganas de leer todo lo que habían escrito así que solo respondí al mensaje de Dae.

Dae: ¿No alcanzas a volver para una junta el fin de semana? Kristopher y Geremy han confirmado.

Kellan: No es posible, nos quedaremos hasta el domingo por la noche. ¿Les has dicho que yo iría?

Dae: ¿Te refieres a si Geremy aceptó incluso sabiendo que irías?

Kellan: Ahórrate el detalle y responde...

Dae: Qué humor. Y no, les dije que estabas en Nueva York y que no irías. Pero te pregunto de todas formas.

Kellan: Lo siento, sabes que el tema me perturba. Te hablo mañana, Peter acaba de llegar.

—¿Todo bien? — Me preguntó papá acercándose a mi lado, pasándome un brazo por los hombros y besando mi sien. No importaba el evento de etiqueta en el cual estuviéramos, mis padres no dejaban sus costumbres de lado conmigo ni por asomo.