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Caminé por los pasillos intentando que nadie me viera, pero lamentablemente no era buena evitando porque me encontré de frente con Kai y Beomgyu.

- !Profe! - Chillaron los dos acercandose rápidamente.

- Hola muchachos. - Les sonreí torcidamente.

- ¿Cómo qué "hola muchachos"? Se supone que usted debería de estar descansando. - Me miró con seriedad Kai.

- Tengo que ir hacer una cosa importante, luego me iré. - Avisé rascándome la coronilla.

- Si el CEO te ve, te dará una trundra de reclamo. - Me sonrió divertido Beomgyu mientras se cruzaba de brazos.

- Ya sé, pero ustedes haganse los ciegos que no ven. - Les chasqué los dedos sonriendoles chevere.

Ellos me miraron con precausión pero de igual forma terminaron por asentir y suspirar.

Le di un abrazo a los dos y caminé rápidamente hacia la sala de los pajuos. Me escabullí cuando entré recibiendo los insultos de los ocho de coñazo.

- ¿Y usted qué hace aquí, señorita? !Deberías de estar descansando! - Me gritó Ariana señalandome con ambas manos.

- Si bruja, deberías de estar postrada en la cama viendo dramas romanticos. - Alzó una ceja Taehyung.

- Ya saben, tengo un compromiso por cumplir. - Respondí enderezandome de donde estaba.

Seokjin me sonrió coqueto tirandome un beso al aire, causando que desviara la mirada. Señor, dame fuerzas.

- ¿Ya no estás molesta con nosotros? - Preguntó Hoseok preocupado.

- Muy, así que muevan su culo fuera de la sala. - Ordené señalando la puerta.

- Pero nosotros queríamos cuidarte, eres injusta. - Juntó sus cejas Jimin, quejandose.

- Ajam, además fue tu culpa por darte cuenta de nuestra presencia. - Agregó Yoongi guardandose las manos dentro de su sudadera.

Solté una risa ironica, figiendo estar arrecha todavía.

- Entonces van a seguir espiandome como los propios ninjas maricos, ¿y yo tengo la culpa? Bien bello pues. - Pregunté de forma rétorica.

- Si. - Respondieron en unisono.

- Son unos coño e madres. - Solté al aire. - Pero adorables, y sólo por eso no les doy sus coñazos aquí mismo.

- ¿Entonces ya estás bien? - Preguntó Jungkook.

- Un poco, aunque si me buscan mi chocomolk de merienda, no lo estaré más. - Aseguré levantando una mano.

- Nunca es mi vida tuve tanta urgencia por buscar algo. - Comentó Taehyung, haciendonos reí a todos.

- Tengo que hablar algo con....Seokjin, así que vayan desfilando para afuera que luego los alcanzamos.

Ellos enseguida nos sonrieron orgullosos y asintieron mientras salían en silencio de la sala. Vayan a saber que estarán pensando.

Me quedé mirando por unos segundos la puerta con una sonrisa, hasta recordé que Seokjin estaba ahí y me coloqué seria enseguida.
Él estaba sentado todavía con los codos entre sua piernas, mirandome con una sonrisa y atento.

- Hoy me junté con Daniel - Solté de una vez. La cara de Seokjin se deformó en un ceño intensamente fruncido que me hizo sonreír. - Hablé con él y todo ya está claro.

- ¿Qué está claro para él?

- Se lo dije. - Dije enseguida, fui invadida por la pena, ay no. Mis manos comenzaron a temblar y a sudar. - ¿Tan difícil es declararse a alguien? Porqué naguevoná. - Dije sacudiendo mi blusa, ahora estaba sudando toda. - Ya va, necesito un momento. - Agregué levantando mi dedo indice.

La Catira De Kim Seokjin © √ K.SKJDonde viven las historias. Descúbrelo ahora