18.Hola dormilón

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Logan.

Suena mi despertador como todos los días, pero no es un día cualquiera. Hoy tengo una cita con Alexia.

Mentiría si dijese que no estoy nervioso, de hecho creo que nunca en mi vida lo he estado tanto.

Estos días me han servido para darme cuenta de que Alexia me parece una chica interesante, despierta algo en mí y me hace ser una versión de mí que es más arriesgado y me eso me hace sentir vivo.

Me gusta. ¿Porque negarlo?

Estaba aterrorizado cuando le pedí la cita, de hecho esa cita tenía que ser el día de su cumpleaños pero no me atreví a preguntarle. Además en el tiempo que la conozco solo nos hemos peleado, perdonado y besado. Casi ni hablamos y la quiero conocer más.

La he hecho hablar un poco pero siempre necesito más cuando se trata de ella.

No me voy a quejar, besarme con ella es fantástico pero también deseo que me hable de ella cuando era niña, de sus miedos, de sus sueños, sus alegrías y tristezas...

Pero siempre que pregunto acabo mal.

Lo tengo claro, hoy voy a por todas, con Alexia es todo o nada y anque no me gusta nada eso hoy voy a por el todo.

No la voy a bombardear de preguntas pero quiero saber aunque sea un poco más de la chica que me hace sentir más vivo.

Me levanto de la cama con mucho sueño, casi no he dormido he estado dando vueltas por la cama y mirando el techo.

Voy directo a la ducha, el agua fría cae por mi piel espavilándome de golpe y escojo mi ropa para hoy, cojo lo primero que veo por el armario.

Unos jeans un poco rotos y una camisa blanca de botones. Me la pongo dejando los dos primeros botones desabrochados y me peino el pelo rapidamente con la mano.

Bajo a la cocina a por mi desayuno.

-Buenos días cielo-me saluda mi madre.

-Buenos días mamá.

-Logan escúchame, tu padre hoy por la noche me ha dicho que no estará en su casa porque tiene una cena con un amigo y como hoy te toca estar en su casa tendrás que estar solo. Pero si no quieres cenar solo puedes venir aquí, a mí no me importa.

Genial, me va genial que mi padre no esté hoy en su casa, así podré llevar a Alexia a cenar allí y me ahorro tener que buscar un restaurante, después de comer podemos ver una película y la acompaño a su casa, una cita perfecta.

Si tengo un poco de suerte nos besaremos, pero no me quiero hacer ilusiones.

-No mamá, no pasa nada, cenaré solo y así podré hacer los deberes y estudiar-le miento a mi madre.

-Como quieras-me responde ella-ahora desayuna que llegarás tarde.

Mi madre me da un plato con el desayuno y lo deboro todo lo rápido que puedo.

Cuando he acabado cojo mi mochila y voy al instituto. Tengo que decir que para vivir tan cerca de Alexia nunca me la encuentro por las mañanas, supongo que la acompaña su amima Lara.

El otro día recibí un mensaje de Katie para que vayamos juntos por las mañanas pero todavía no le he contestado, no quiero problemas con Alexia ya que a ella no le cae bien Katie pero la verdad no sé porque. Es decir Katie se porta mal con Alexia pero alguna razón tiene que haber.

Igualmente no quiero que justamente hoy Alexia se enfade conmigo así que mejor evito el problema.

Cuando llego al instituto me doy cuenta que hoy solo comparto una clase con Alexia: química.

EspinasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora