Espinas

19.La cita

Alexia.

Estoy de los nervios, miro por enésima vez mi armario.

No encuentro nada bueno, parece que alguien haya venido a mi casa y me ha robado toda la ropa bonita de mi armario.

Quiero gritar, estoy enrollada en una toalla ya que me acabo de duchar. Me desago de la toalla y me pongo unas bragas negras de encaje y un sujetador a juego.

Dicen que si te pones ropa interior con la que te veas sexy estarás más segura de ti misma y que razón...

Finalmente me decido por un vestido rosa pastel, es pegado al cuerpo con escote profundo y va por encima de las rodillas.La espalda es casi toda descubierta y puesto da un aire sexy y atrevido.

Me miro en el espejo y estoy satisfecha con el resultado. Voy corriendo al lavabo y me seco es pelo, decido hacerme ondas para que tenga un poco de volumen.

Como no puede faltar cojo la pulsera que me regaló Logan y me la pongo.

Voy a maquillarme, solo me pongo rímel y un pintalabios del mismo tono que el vestido. Cojo unos tacones negros y ya estoy lista.

No sé que hora es pero si tengo que estar esperando un minuto más me voy a tirar por la ventana. Me tengo que relajar, solo es una cita de amigos, vamos a cenar y quizás mirar alguna película después como Logan es un buen chico me acompañará a casa y ya estará.

No me lo creo ni yo. Logan y yo somos muchas cosas pero amigos creo que no es una de ellas.

Un sonido interrumpe mis pensamientos.

¡El timbre!

Bajo las escaleras todo lo rápido que puedo y abro la puerta.

Ahí está Logan...

Lleva una camiseta negra de botones con los primeros desabrochados, unos jeans rotos por las rodillas y su pelo no peinado le da un aspecto muy sexy, parece el típico fuck boy.

De repente hace muchísima calor...

Me doy cuenta después de unos segundos que estoy dándole un repaso en toda regla pero parece no darse cuenta porque él todavía no ha acabado con el suyo.

Está embobado mirando mi vestido y traga saliva.

Doy una vuelta sobre mi misma.

-¿Qué te parece?-le pregunto con una sonrisa.

Estoy intentando que no se note que estoy nerviosa.

-Estás...espectacular-me dice todavía mirando mi vestido.

-Gracias, tu también-le digo-bueno pues... ¿Nos vamos?

-Sí claro.

Juntos salimos de mi casa.

-¿Dónde vamos?-le pregunto.

-Pues resulta que mi padre hoy no vendrá a dormir ni cenar a casa así que había pensado que podríamos ir allí así estaremos más tranquilos-me explica.

¿He escuchado bien? ¿Su casa? ¿Solos?

Creo que se me ha parado el corazón.

-Sí no quieres podemos ir a otra sitio...

-No, me parece bien-le digo mostrándole una sonrisa nerviosa.

Vamos hacia su casa en silencio.

Cuando llegamos me abre la puerta y espera que pase yo primero, que caballeroso.

Miro la casa y veo que la mesa ya está preparada.

-Así que ya lo tenías preparado-le digo sonriendo- ¿Qué habrías hecho si te hubiese dicho que no?