Todo o nada // Albalia

Vino y chucherías

POV NATALIA

¿Mami? Joder. Una  hija. Madre mía Alba tenía una hija... me hubiera esperado cualquier  cosa antes que eso. Me molesta que no me lo dijera. Hablamos de mil  cosas, ¿y se le olvida comentar que tiene una hija de, qué, tres años? Claro,  es lo típico que se te olvida. Me molesta que pensara que me asustaría  solo por eso. Pero sobre todo me molesta que se haya referido a mi como  "cualquiera"... joder vale que solo nos conocemos de poco tiempo, pero ¿cualquiera? ¿En serio? Iba andando hacia  casa pensando en lo que había pasado. Me dolía que Alba pensara que iba a  salir huyendo... joder que no me voy a acojonar porque tenga una hija.  Solo es una niña. No iba a huir. De repente me di cuenta que había hecho  justo eso. Huir. Me paré en seco en mitad de la calle y cogí el móvil.

NATALIA

Solo para que conste. No huyo porque tengas una hija.

No me contestó. Tampoco lo leyó, o eso creo al menos. Llegué a casa y me tiré en la cama maldiciendo contra la almohada.

Me desperté y cogí el móvil. Tenía varios whatsapp y entre ellos, uno de Alba.

ALBA🔥
Entiendo que te fueras.

NATALIA
Yo en cambio sigo sin entender que me ocultaras a tu hija. Entiendo que igual no me la quieras presentar conociéndonos poco, pero podrías habérmelo dicho.

ALBA🔥
Natalia no es fácil hablar de esas cosas.

NATALIA
Si no se intenta seguro.

Alba no me contestó. Yo tiré el móvil bufano encima del sofá y me puse a ordenar un poco la casa. No paraba de darle vueltas a todo. Al día siguiente por la mañana, Alba me escribió.

ALBA🔥
¿Quieres  venir a comer a casa? Te advierto que el menú son macarrones con tomate  y que puede que acabes viendo una peli de dibujos...

NATALIA
Me encantan los macarrones. Y las pelis de dibujos. Pero, ¿estás segura? ¿Pasas de llamarme cualquiera a invitarme a comer con tu hija?

ALBA🔥
Bueno, ya te ha conocido... ¿a las 2?

NATALIA
A las 2 estoy ahí.

Cuando  vi aquel mensaje de Alba se me dibujó una sonrisa tonta en la cara.  Estaba embobada cuando de repente sonó el timbre. Era Marta.

- Vengo a secuestrarte para ir a comer una pizza, me muero de hambre.
- Pues no va a poder ser...
- ¿Uy y eso por qué? – me quedé parada al darme cuenta de que iba a comer con Alba y con su hija.
- Marta, ¿qué le gusta a una niña de tres años?
- ¿Qué? ¿Natalia qué dices? – dijo sorprendida.
- Marta es en serio. ¿Qué puedo llevarle a una niña de 3 años?
- Pero vamos a ver, ¿qué niña de que coño hablas?
- Alba tiene una hija.
- ¿Qué?
- Marta lo que oyes.
- ¿QUE TIENE UNA HIJA?
- Calla coño no grites. Si, tiene una hija de unos 3 años más o menos, creo...
- Pero y, ¿lo sabías?
- Bueno, es largo de explicar, me enteré ayer.
- Natalia... ¿vas a tener una relación con una chica con una hija? Pero si seguro que la niña es más madura que tú.
- Eres idiota – le di un codazo en el brazo y ella se rió.
-  A ver Natalia, que una hija es algo muy serio, no se... - me siguió  hasta la habitación y yo empecé a vestirme - ¿te ves de madre?
- Marta por dios que solo voy a comer con ellas. No se de qué me veo pero quiero caerle bien.
- Pues yo que se, lleva chucherías, eso le gusta a todos los niños ¿no?
-  Vale si. Chucherías. Eso me gusta – salí hacia el baño y me lavé los  dientes rápido y me peiné mientras Marta seguía acribillándome a  preguntas – MARTA YA POR DIOS. Voy a comer a casa de Alba con su hija, ya está, no hay más.
- Vale, vale. Pero te estás metiendo en un lío Natalia – cogí mis cosas mientras iba hacia la puerta con Marta detrás.
- ¿Sales o qué?
- Si, si. Cuéntame luego qué tal.
- Que si, pesada. Hasta luego.