Capitulo 27

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Liz

— ¿Qué se supone que le tengo que regalar?— Miro a Lucy, hace una mueca

— No lo se.— Bufo — Tal vez un collar.

— No, es muy basico.— Suspiro

— No tiene que ser necesariamente material.— La miro. Levanto una ceja

— Eso no es un regalo, ya le di sexo.— Abre los ojos de par en par

— Cielos, Liz. Yo hablaba de una fiesta.— Levanto las cejas

— Oh. Si, claro. Es buena idea.— Asiento. Suspira—Tendre que hacer llamadas. Aunque, Teo no es mucho de fiestas. Es decir, antes lo era por lo que escuche.

— A el le dara igual mientras estes tu.

— Supongo.— Giro mi cabeza— Ven, hay que comprar licor.— Sonrio y empiezo a caminar

●○●

— ¿Una fiesta?— Sonrio

— Si.— Se miran entre ellos

— Teo ya no suele festejar muchas cosas.— Bufo

— Vamos, sera divertido. Ademas yo estare con el y el estara rodeado de las personas que ama, y de mi.— Octavia sonrie

— Ya entendimos, estaras con el en caso de que se ponga de mal humor.— Asiento

— Si, no hara nada si estoy yo.— Me encojo de hombros—  Ademas, el tiene una gran alegria en el fondo.

Solo hay que escavar un poco.

— Si tu lo dices. ¿Llamaras a su madre?

— Claro.— Me encojo de hombros — ¿Donde vive?

— ¿La iras a buscar?— Hermes levanta sus cejas y yo frunzo las mia

— ¿Qué tiene de malo?

— Nada, nada.— Niega con la cabeza — Me sorprendió un poco es todo.— Me encojo de hombros

— Mándame la dirección por mensaje y si Teo pregunta me fui con Lucy.— Tomo las llaves y salgo

○○●

Muevo mi cabeza hacia ambos lados y detengo el auto cuando veo la numeración de una casa. Me estaciono y salgo del auto. Camino hacia la casa mientras doy un vistazo al vecindario.

Suspiro y toco la puerta. Se abre unos segundos despues y sonrio.

— Hola.— Me mira unos segundos y parpadea

— Hola, ¿puedo ayudarte?— Pregunta suavemente

— Si, no se si oiste de mi..— Frunzo levemente el ceño— Soy Liz. ¿Eres la madre la Teo, verdad?— Levanta lentamente las cejas

— Si, si soy yo. ¿Teo esta bien?— Asiento

— Si, por supuesto. Yo vengo por otra cosa.— Asiente y me hace paso

— Pasa pasa.— Sonrio y me adentro lentamente. Suspiro mirando toda la casa— Oi mucho de ti.— Me giro hacia ella

— ¿De verdad?— Asiente y me lleva a la cocina

— Eres mas hermosa de lo que te describió.— Murmura. Sonrío mas y niego con la cabeza — Por favor, sientate.— Hago lo que me pide — Hare té.— Asiento y se gira

Detallo la acogedora cocina mientras apoyo mis manos arriba de la mesa.

— Cuentame, ¿estan juntos, verdad?— Gira su cabeza

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