Eran las seis de la mañana y ya estaba vistiéndome. Hoy era un gran día, un día especial, un día esperado... Hoy era el día en el que empezábamos Hogwarts. Cuando acabé de peinarme ya lista, desperté a Rose y a Victoire.
-venga vamos, es tarde son casi las siete de la mañana- dije zarandeandolas. ¿Que que obtuve por respuesta? Simple, nada. Era increíble lo difícil que era despertarlas. Me cansé de moverlas y bajé abajo a buscar una pluma. En esta semana había estado mucho con todos y me sentía realmente Weasley, quiero decir, todos eran como mis tíos, y la abuela Molly y el abuelo Arthur eran como mis abuelos. Era increíble lo rápido que todos nos habíamos cogido confianza, me sentía como en casa. Subí a la habitación con pluma en mano y les destape los pies. Como es de imaginar les hizé cosquillas y mas o menos se despertaron, para entonces ya eran las 7:08 a.m.
-venga despertar- decía una y otra vez. -por favor que hoy hay que ir a Hogwarts-.
Increíble, pero después de que pronunciara la ultima palabra se levantaron automáticamente.
-haberlo dicho antes ¿como se me ha podido olvidar?- dijo Rose entrando al baño.
-lo mismo digo- dijo Victoire, mientras yo rodaba los ojos.
-lo que digáis, pero ¡correr! Ademas hay que ganar a los chicos, si les ganamos hoy desempatamos- dije sentada en la cama mientras las esperaba. A Lily no la iba a despertar porque para ella que no se tenia que preparar para Hogwarts seria demasiado pronto. Al fin acabaron y bajamos corriendo las escaleras. Soltamos un suspiro al ver que habíamos ganado, porque si: Victoire también hacia carreras.
-uf, al menos hemos sido primeras- dijo Rose riendo.
Nos preparamos el desayuno, y derrepente oímos un estruendo desde las escaleras. Sobresaltadas nos levantamos y fuimos a ver que pasaba.
-¿pero que os ha pasado?-dijo Rose riendo a mas no poder.
-¿estáis bien?- pregunte intentando no reírme.
James, Frank y Fred al parecer estaban bajando las escaleras corriendo (supongo que para intentar ganar) y llevaban una cuerda con la que han acabado cayéndose todos y se han echo un nudo en ellos con la cuerda.
-¿tu como crees que estamos?- murmuró James algo malhumorado, pero luego soltó una carcajada y sus amigos le siguieron.
-teníais que habernos visto- dijo Frank limpiándose lagrimas falsas.
-si, hubiéramos ganado un premio a la mejor caída- dijo Fred llorando literalmente de la risa.
-bueno, me alegra saber que estáis bien- dijo Victoire.
-lo sabemos Vicky, nos quieres mucho- dijo James riendo.
-si, si lo que sea, vamos a deshaceros- dijo Victoire también riendo.
Los deshicimos y (como llevábamos haciendo toda la semana) desayunamos todos juntos. Al cabo de un rato bajo Ted con aspecto adormilado y otros minutos después bajaron Molly y Lucy. Ya a las 9 a.m. Mas o menos se empezaron a despertar los adultos (y los pequeños).
A pesar de que el tren salía a las 12, a las 11 ya estábamos todos listos, todos estábamos nerviosos; tanto los que nos íbamos como los que no. A las 11:30 salimos en coches voladores hacia Kings Cross y a las 11:50 ya habíamos llegado. Ahora si que estaba mas nerviosa que nunca ¡estaba a unas cuantas horas de ir a Hogwarts!
Nos acercamos al anden 9 y 3/4 y cada uno con su carrito atravesamos el muro. Era extraña la sensación, pensaba que me chocaría pero por suerte no. Al pasar, lo primero que vi fue un enorme tren de color escarlata con una placa donde ponía: "Expreso de Hogwarts". ¡Que emoción! Después de admirar el tren sonó un pitido, lo que indicaba que ya era hora de irse. Todos nos despedimos de todos y pude ver en Albus tristeza por no poder ir, aunque por suerte solo le quedaba un año. Lily lloriqueaba pidiendo ir también y Harry y Ginny la intentaban consolar. No solo ellos querían ir, los otros también les pedían a sus padres que les dejaran pero estos respondían que aun no les tocaba y que tendrían que esperar un poco mas.
El segundo pitido sonó lo que significaba que ya era hora de subir al tren. Todos entramos en este y Victoire se fue con sus amigos al igual que Ted, Molly y Lucy con los suyos. Nos quedamos solos: Rose, Fred, Frank, James, Alice y yo así que decidimos buscar un compartimento vacío. Al fin encontramos uno al final del tren y entramos. El tren se puso en marcha y nos despedimos por ultima vez de sus familias. Llevábamos unos 5 minutos de viaje callados mirando por la ventana cuando Frank decidió romper el silencio:
-¿como creéis que será?- preguntó con tono soñador.
-¿el que?- preguntó Rose apartando su cara de la ventana.
-ya sabéis, Hogwarts- aclaró el de pelo oscuro.
-no lo se pero tengo una cosa clara: será una pasada- respondió James sonriendo.
-seguro que si- añadí feliz.
Nos quedamos callados un rato, pero fue relajante y no incomodo.
-¿queréis algo del carrito?- preguntó una bruja anciana con un carrito lleno de chuches al abrir el compartimento.
-Mmm... Danos 6 ranas de chocolate y unas varitas de regaliz- pidió Fred.
-aquí tenéis- nos dijo dándonos las golosinas.
-gracias- respondimos a coro. Después de que se fuera empezamos a comernos las chucherías. Decidimos abrir las ranas de chocolate a la vez y cuando lo hicimos, todas saltaron fuera de la caja llendo de un lado para otro. Nos empezamos a reír mientras intentábamos atraparlas.
-¡Alice cógela ya casi la tienes!- dijo Fred entre carcajadas y de repente una rana se posó en su cabeza, era la de James ya que era la única que quedaba.
-Fred no te muevas- dijo James mientras cogía un baúl pequeño y lo levantaba.
Fred obedeció pero fue un error ya que James le pegó tan fuerte que la rana quedó espachurrada.
-¡Auuu!- gritó Fred sobandose la cabeza justo donde James le había golpeado. Los demás no aguantamos y nos echamos a reír.- ¡Oye no os riáis! Ahora voy a tener un chichón tan grande que pareceré un unicornio- dijo Fred algo enfadado.
-Lo siento, pero ha sido muy gracioso- habló Frank intentado serenarse.
-sinceramente; no eres tu quien me tiene que pedir perdón ¿eh James?.
-esta bien, esta bien: perdón, lo siento mucho, no era mi intención, espero que perdones a este guapo y sexy sirviente- se disculpó con sarcasmo James de rodillas dramatizando. Era en esos momentos donde dejaba claro que era igualito a su abuelo.
-se que no tienes remedio, así que te perdono- dijo Fred siguiéndole el juego a James. Luego todos nos empezamos a reír. Después de otro rato en silencio Alice hablo:
-oye y vosotros ¿en que casa queréis estar?
-¡vaya una estúpida pregunta!- exclamaron Frank, Fred y James fingidamente indignados.- en Gryffindor donde habitan los valientes y nobles de corazón- dijeron después de sacar una espada imaginaria y "luchar".
-yo no lo se, mis padres fueron Gryffindor, pero mi madre estuvo a punto de ir a Ravenclaw así que no lo se- dijo Rose pensativa -cualquier casa me iría bien.
-yo estoy igual que tu Rose, mi padre Gryffindor y mi madre Hufflepuff, tampoco se donde iré...- dijo Alice.
-¿Y tu Lesley donde quieres ir?- me preguntó Rose.
-no estoy segura, mi familia es muggle así que no lo se- respondí.
-bueno mientras no quedes en Slytherin...- dijo Frank y Fred y James asintieron efusivamente.
-¿que pasa con Slytherin?- preguntó Rose.
-mi padrino y mi madrina eran Slytherins y no son malos- dijo Alice y Rose asintió.
-¿como que que pasa con Slytherin?- gritaron los chicos indignadísimos.
-¿es que no prestáis atención a las historias de mi padre? Los Slytherin lo trataban fatal, bueno a el y a todos- contestó James.
-si bueno, pero estos son otros tiempos- explicó Rose.
-la gente no cambia- argumentó Fred.
-¡te equivocas, si que lo hace! Bueno vamos a relajarnos y a cambiar de tema ¿vale?- dijo Alice con una tranquilidad que dio miedo.
-esta bien- aceptaron los chicos. Y así entre risas y conversaciones triviales, llegamos a nuestro destino.
Al bajar del tren vi a un hombre ENORME llamando a los de primero:
-los de primer año conmigo- repetía el hombre gigante.
En cuanto James, Fred y Frank lo vieron fueron corriendo a abrazarlo.
-ese de allí es Hagrid, el guardián de las llaves y los terrenos de Hogwarts, era muy amigo de mis padres, ven te lo presentaremos- me dijo Rose mientras ella y Alice me arrastraban hacia él.
-¡Hagrid!- exclamaron cuando llegaron mientras le abrazaban.
-¡chicas! pero como habéis crecido todos- respondió con una sonrisa.
-pero si nos vimos el mes pasado- dijo James riendo.
-ah Hagrid, esta es Lesley. Lesley, este es Hagrid- nos presentó Alice.
-encantado de conocerte- me saludó con amabilidad.
-igualmente- le respondí con una sonrisa que el me devolvió.
-bueno, los de primer año por aquí, subiros a las barcas de 6 en 6, este año las hemos ampliado- gritó con su sonrisa.
Como era de esperar, Frank, Alice, Fred, James, Rose y yo nos subimos juntos en una.
-¡guau!- exclamé al ver el castillo, que al ser por la noche parecía muy misterioso, pero eso no le quitaba lo bonito.
-estoy igual- contestó James embelesado.
-estoy deseando empezar con ya sabes que...- oí que le susurraba Frank a Fred. Increíble, apenas habíamos llegado y ya tenían algo planeado.
-¿sabéis que?- preguntó Frank.
-que- contestó Alice por todos.
-lo único que espero es que papa no sea el que nos reciba en la puerta- dijo el primero fingiendo un escalofrío.
-¡es verdad! se me había olvidado que es profesor aquí- exclamó la segunda.
Llegamos a las puertas y para desgracia de Frank y de Alice el profesor que nos recibía era tío Neville.
-hola chicos- dijo sonriendo en cuanto nos vió.
-hola ¿que tal por aqui pap... Digo profesor Longbottom?- preguntó Frank.
-bien, lleno de alumnos como siempre- respondió sonriente.- tranquilo ya os acostumbraréis a decirme "profesor".
-bueno ahora que estáis todos os explicaré que va a pasar- empezó Neville.- dentro de poco entrareis en el Gran Comedor, donde seréis seleccionados para una de las 4 casas por el sombrero seleccionador: Hufflepuff, Ravenclaw, Slytherin o Gryffindor. Después empezará el banquete.- concluyó.
Miro su reloj y levantó la cabeza hacia todos.
-es la hora- dijo. Y todos le seguimos hasta llegar a una gran puerta. Neville la abrió y pude ver lo mas espectacular del mundo: el Gran Comedor. Me habían hablado de las mesas llenas de gente, de ese ambiente acogedor y de ese cielo que se veía estrellado en el techo. ¡Pero verlo era REALMENTE increíble!
En cuanto me di cuenta, al final de las mesas enfrente de la de los profesores, habían un taburete y un sombrero que era cogido por Neville quien tenia una lista. Y enseguida empezó la selección. Yo estaba echa un saco de nervios y me costaba estar quieta.
-Watson, Amanda- Neville decía el nombre y le colocaba el sombrero en la cabeza.
-¡HUFFLEPUFF!
-Mondy, Kelly-
-¡SLYTHERIN!
-Weasley, Fred- vi como Fred caminaba hacia el taburete y antes de que el sombrero le tocara la cabeza, este gritó:
-¡GRYFFINDOR!- él, feliz se sentó con los leones.
-Weasley, Rose- Rose se acercó y casi igual que con Fred el sombrero gritó:
-¡GRYFFINDOR!- Rose se sentó con su primo también contenta.
-Longbottom, Frank- el con paso tembloroso se dirigió donde su padre y un poco después:
-¡GRYFFINDOR!- él, con cara de felicidad se fue con sus amigos.
-Longbottom, Alice- se acercó y...:
-¡GRYFFINDOR!- dando saltitos se fue a su mesa junto a los demás.
-Potter, James- con paso decidido se sentó en el taburete y después de un rato el sombrero gritó:
-¡GRYFFINDOR!- él, mas contento que nadie se dirigió corriendo a su mesa.
Me quedé distraída un rato cuando de repente oigo:
-y por ultimo alguien especial, Lesley Arilas- inmediatamente todo el comedor enmudeció y noté todas sus miradas en mi. Con paso inseguro pero firme llegué hasta el taburete y me senté. Neville me pusó el sombrero en la cabeza el cual me tapaba los ojos y enseguida oí una voz en mi cabeza:
"-Mmm pero que interesante ¡una Arilas! Esto si que no me lo esperaba, pero bueno, Mmm... Podrías ser Ravenclaw... eres muy inteligente y sabia, pero no, no es lo principal en ti. A ver... También podrías ser una gran Hufflepuff, tienes buen corazón, también eres Gryffindor veo valentía escondida en tu interior, o tal vez Slytherin... Pues también eres ambiciosa...Creo que ya lo tengo claro.-" dijo (en mi cabeza) por fin:
-tu tienes que estar en... ¡GRYFFINDOR!- gritó y todo el gran comedor aplaudió.
Me fuí al sitio que me habían guardado mis amigos y la directora Mcgonagall empezó a hablar:
-bienvenidos todos estudiantes, un año mas a Hogwarts. Como veréis tenemos a alguien muy especial entre nosotros y confío en que la cuidéis. Por cierto los de primer año recordad que ahora vuestra casa será como vuestra familia durante otros 7 años mas. Cualquier éxito que consigáis durante el año sumará puntos a vuestra casa, así como también podéis perderlos. Al final del curso se entregará la copa de las casas a la que mas puntos obtenga. El señor Filch me ha pedido que os recuerde que a partir de las 9:30 de la noche no podréis salir de vuestras salas comunes y que como su nombre indica: el bosque prohibido esta completamente prohibido. Y ahora sin mas dilación que empiece el banquete- acabó la directora.
Y todas las mesas se llenaron de comida buenísima. Después de cenar los prefectos nos acompañaron a la sala común. Por suerte los prefectos de Gryffindor eran Victoire y Ted (Molly y Lucy eran Ravenclaws). Fue increíble subir las escaleras que cambian de posición y mas estar frente al retrato de la dama gorda. Ted dijo la contraseña: "Draco Dormiens" y la sala común me dejo realmente impresionada. Era muy acogedora, toda de rojo y dorado los colores de nuestra casa. Victoire nos indicó los dormitorios de las chicas y Ted a los chicos. Rose, Alice y yo subimos juntas y estábamos contentísimas: ¡nos había tocado juntas! ¡7 años juntas! La habitación era preciosa y cálida, habían 4 camas puestas en circulo lo que significaba que tendríamos otra compañera ¡que bien! Solo llegar y me pedí la cama mas cercana a la ventana; un ventanal enorme con vistas al lago.
Estuvimos hablando de lo contentas que estábamos y un rato después llegó nuestra otra compañera. Era una chica de pelo castaño un poco ondulado, ojos verdes y piel dorada. Mas o menos igual de alta que nosotras.
-esto... hola- saludó con timidez.
-hola- respondimos nosotras tres a coro.
-yo soy Rose Weasley.
-yo soy Alice Longbottom.
-y yo soy Lesley Arilas.
-¿enserio? ¡guau que suerte he tenido! yo soy Livrana Howl pero llamarme Liv (por que realmente odio mi nombre), encantada de conoceros.
-también estamos encantadas de conocerte- le dije sonriendo.
Estuvimos casi toda la noche hablando y riendo, nos cayó muy bien. Al principio parecía tímida pero luego se soltó. Me recordó mucho a mi ya que también soy así. Cuando estuvimos mas cansadas (mas o menos a las 2 de la mañana) decidimos ir a dormir ya que mañana era el primer día de clase.
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¿Magia? Magic.
FantasyCuando una chica corriente se encuentra en contacto con la magia y ve que es parte de una misteriosa y peligrosa profecía, ya nada puede parecer extraño. Claro que, jamás se puede subestimar a Lesley Arilas que, junto a la tercera generación puede r...