Teach Love.

Capítulo 48. Las piezas en el tablero. (Parte 1)

Sesshomaru estacionó el auto afuera de la casa de su padre y a penas Inuyasha bajó, un furioso Inu no salió apresuradamente de la casa seguido por su esposa...

------Inuyasha!! ------Llamó el patriarca acercándose a su hijo menor.

------Por dios, que alivio! ----Expresó Izayoi abrazando a su hijo. ------Nos tenías preocupados!

------En donde carajos estabas a estas horas?!?!?------Cuestionó Inu no.

Al ver que Inuyasha se había quedado helado, sin saber qué excusa poner, Sesshomaru intervino:

------Estaba conmigo. ----Mintió. -----Tiene examen de leyes mañana y quería que lo ayudara.

Inuyasha se mostró sorprendido ante la ayuda inesperada de su medio hermano.

------Oh, con un carajo!!------Se quejó el patriarca Taisho. ------No puedes estar molestando a tu hermano, Inuyasha!! No ves que tiene cosas importantes que hacer?!?!

------Déjalo. Está bien. -----Aseguró Sesshomaru. -------No resultó tan mal.

-------Bieno, menos mal. -----Suspiró Inu no entornando los ojos y luego miro a Inuyasha. ------Vuelve adentro con tu madre.

Inuyasha asintió; miro a Sesshomaru por sobre su hombro y le expresó las gracias con un gesto, su medio hermano respondió con un ademán de cabeza.

------Lamento las molestias que seguramente te causó. ------Se excusó el Taisho con su hijo mayor, una vez que estuvieron solos en la entrada de la casa.

-------Ya no importa. -----Dijo Sesshomaru con desinterés empezando a caminar de regreso al lado del conductor.

-------Has hablado con Kagura??

Sesshomaru suspiró con fastidio mientras abría la puerta del auto.

-----No.

------Que extraño...quedó de notificar esta semana.

------A penas es martes. Seguramente lo hará pronto.

------Confírmame de inmediato en cuanto se comunique contigo. Y estaré listo, lo más seguro es que tengamos que partir enseguida.

------Bien. Me voy.

------Descansa. Mañana no te veré en el colegio. Tengo cosas que hacer. Puedes encargarte?

------No me preguntes idioteces.

Dicho aquello, Sesshomaru subió al auto y lo entendió...

------Conduce con...-------Inu no no terminó. Su primogénito aceleró y salió disparado fuera de su propiedad como alma que lleva el diablo. ------cuidado...

Al día siguiente, Rin envió un mensaje a Sesshomaru preguntándole si todo estaba bien, ya que no volvió a llamarle la noche anterior y estaba preocupada.

Se arregló para irse a la escuela y mientras cambiaba sus cosas de la mochila por aquellas que utilizaría ese día, la caja que había comprado en la farmacia cayó al suelo.
Su corazón dio un vuelco al recordar que no había tomado aquel fármaco la noche anterior ya que había llegado tan cansada que solo se durmió.
Tomó la caja y la destapó, sacó la única pastilla que había adentro y se la tomó con un baso de agua que tenía en su mesa de noche.
Gusrdó la caja vacía en su mochila para tirarla en la escuela y así pues, salió de su recámara.
El malestar en sus músculos y sobre todo entre sus piernas a penas le permitían moverse con disimulo...sería un largo día.
Desayunó junto a su abuela, lavo los trastes y se despidió de ella.

Llego a la pared a en donde Kohaku y Shippo ya la aguardaban junto con la hermana del primero.

El viaje en autobús fue más tortuoso de lo que la joven pensaba, a tal grado que tuvo que tomar una pastilla para el dolor a mitad de camino.

Llegaron finalmente a la escuela y fueron directo a su salón para su primer examen del día.

Rin se sintió decepcionada; había estudiado mucho y ese examen de álgebra a penas tenía un par de problemas por fórmula unas cuantas preguntas capciosas.
Entregó su examen a penas veinte minutos después de iniciada la hora destinada para el examen, su profesor le permitió retirarse del salón y así lo hizo.
Tenía una hora libre antes de su próximo examen, en ir a ver a Sesshomaru a su oficina, pero se dio cuenta de que su auto aún no estaba en el estacionamiento, así que simplemente se fue al patio.
Anduvo por el campus un rato y finalmete se sentó al inicio de las gradas de la cancha de fútbol, debajo de la sombra que hacía el tejado con los árboles, evitando así que la nieve que caía suave, callera sobre ella.
Sacó de su mochila el libro en turno que estaba leyendo: "Orgullo y prejuicio" de Jane Austen.
Comenzó a leer en la página que se había quedado, solo le faltaban dos capitulos para terminar. Estaba tan concentrada en su lectora que no se percató cuando alguien se acercaba...

La vio desde la ventana de su oficina. La vio atravesar el campo de fútbol para llegar a las gradas y sentarse a leer. Sonrió para sí mismo.

Salió de la oficina y bajó por las escaleras rápidamente, atravesando los pasillos hasta llegar afuera.
Atravesó el campus y llegó al campo de fútbol.
Comenzó a caminar hacia ella intentando hacer el menor ruido posible, pero ella parecía tan concentrada en su lectura que al parecer no escuchaba el crujir de la nieve bajo los pies del Taisho que se aproximaba.
Estaba a unos cuantos metros de ella cuando pudo ver que el libro que leía era "Orgullo y prejuicio"; un libro que ella misma ya había leído al menos dos veces antes, pero era de sus favoritos. Se lo había leído a él en voz alta en un montón de ocasiones, al grado de que, sin él haber leído el libro propiamente, sabia cada párrafo, renglón y diálogo de memoria.

Los últimos metros que le quedaban los paso corriendo, dejándola sin tiempo a percatarse de su presencia antes de tomarla en sus brazos sorpresivamente para darle un par de vueltas mientras citaba:

------«En vano he luchado. No quiero hacerlo más. Mis sentimientos no pueden contenerse. Permítame usted que le manifieste cuán ardientemente la admiro y la amo».

------Por dios, Sesshomaru!!!-----Exclamó ella entre risas ante semejante sorpresa. Él la bajó al suelo nuevamente, le tomó las manos y prosiguió:

-------«Tiene que saberlo. Tiene que saber que todo lo he hecho por usted. Es usted demasiado buena para jugar conmigo. (...) Si sus sentimientos siguen siendo los mismos, dígamelo. Mi afecto y mis deseos no han cambiado, pero una sola palabra suya me silenciará para siempre. Sin embargo, si sus sentimientos han cambiado, debo decirle que ha embrujado usted mi cuerpo y mi alma y que la amo, la amo y la amo y que ya nada podrá separarme de usted"

Ella sonrió ampliamente mientras sentía sus ojos empezar a cristalizarse. Estaba tan conmovida así como profundamente feliz de verlo...

------Dios, Sesshomaru...----Le sonrió pasando ampararse de puntillas para rodearlo por el cuello con sus menudos brazos...-----En verdad te has vuelto loco. Alguien podría vernos.

Sesshomaru sonrió...

------"Cualquiera en su sano juicio se habría vuelto loco por ti. " ------Citó Sesshomaru en respuesta haciéndola a ella sonreír con aún más amplitud.

------Veo que prestabas atención cuando te leía el libro.

------Claro que si. -----Aseguró el acariciando su mejilla. ------Siempre te escucho, Rin.

------Siempre?

-----Siempre.