Déjame resguardada en tu mente, oculta entre las tinieblas, oculta entre las tinieblas de tus secretos más íntimos y sagrados.
Déjame a la distancia mientras me tocas con tu mirada y me transportas a tu lado porque me necesitas ahí encajada en tu costado izquierdo.
Déjame en el recuerdo de aquel momento intenso sin intervención de sabanas, mientras éramos la pura esencia del infierno.
Déjame con la cercanía de su cuerpo, con ese golpeteo frenético de nuestros corazones antes de incluso haber comenzado.
Déjame sin dolor, pero deja la nostalgia de lo que comenzamos y no terminamos.
Déjame con la misma ausencia en la cama pero con tu olor en ella.
Déjame el sonido de la risa en ese momento púnico, creado por mi imaginación en mi intento por divertirte.
Déjame con el placer infinito de ser alimentada de tu mano, a la penumbra de tus ojos encendidos.
Déjame perpetuar en tu mano, para así acompañarte el resto del camino.
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Un sueño a través de letras
RomanceTengo está loca idea de hacer perdurable, a través de letras, mi historia con ella. Como queriendo que no se pierda entre la neblina del olvido, entre el pasar del tiempo y su enorme despiste; tan solo quiero que no solo viva el recuerdo en mi memor...