Un sueño a través de letras

Fui yo

Fui yo quien no aceptó quedarse con los recuerdos positivos e interpuso los negativos para hacerse daño en un patético intento para lograr olvidar a alguien a quien me negaba olvidar.

Fui yo a quien no le bastaron un par de horas, porque las querías todas.

Fui yo quien decidió dejar de huir y quedarse, entonces le tocó ver partir y darse cuenta que dolía más, que era más difícil respirar, que cerrar los ojos no era suficiente.

Fui yo quien tomó la decisión de darlo todo sin medida, de quedarme a cualquier costo (sin saber realmente que alto era el precio a pagar), quien se negó a aceptar lo que me lanzaban cada tanto a la cara incluso cuando me sacudió hasta hacerme caer de dolor.

Fui yo quien esperó con paciencia infinita ser la primera opción cuando siempre fui la última o la segunda opción dentro y fuera de cualquier contexto bajo el pretexto de una ilusión que estuvo manipulada por la interpretación errada de un amor desmedido que jamás fue correspondido bajo el mismo escenario.

Fui yo quien se tragó y guardó millones de lágrimas que hicieron su propio océano, el cual me terminó ahogando derramándose sin permiso por mi ojo izquierdo.

Fui yo quien siempre mintió al decir: "está bien", "no importa", "ok"...incrementando la intensidad del desastre natural dentro de mi pecho que amenaza con convertirse en agujero negro sin dejar rastro de aquello que más anhelo.

Fui yo quien ocultó detrás de una sonrisa y mis ojos, flotando en lágrimas no derramadas, que el fallo estuvo en haberme enamorado de aquella esencia oscura y maldita que una vez me abrazó tan fuerte –tomándolo como protección- para después apuñalarme sin advertencia mientras me susurraba al oído: "Perdóname"...