Hola, buenos días. Otro capítulo más. Quería comentaros que como recién terminé de editar la historia me decidí por mi segunda opción de título, porque pienso le va más. Un abrazo y buena lectura, espero que os guste.
Baltimore 2013
(Siete años atrás)
Lily
En cuanto mi tía Alejandra llegó esa tarde a casa empezó a quejarse de todo el trabajo que tenía. Venía cansada de las largas jornadas cocinando en casa de los Tyler y dejó caer unas bolsas de compras que traía en el suelo de la cocina con mirada de disgusto.
—Lily, por favor ¿Podrías ayudarme un momento con las compras?
La miré con gesto grave.
—Seguro tía. Por supuesto que sí.
Dejé mis cuadernos de dibujo a un lado y rápidamente me acerqué a ayudarla. Hacía ya poco más de un mes que vivía con ellos. Tio John trabajaba como ensamblador de equipos electrónicos, mi tía Alejandra como cocinera para una familia rica de la ciudad y mi prima Becky, como oficinista; aunque no tuviera muy claro qué horario tenía porque se pasaba la mayoría de los días en casa. Todos en aquella familia trabajábamos, incluida yo, que había conseguido finalmente un empleo en uno de los restaurantes del puerto para los fines de semana.
—Estoy muy cansada, y además no me encuentro bien, debo de estar incubando algo —dijo tía Alejandra—.Todo el mundo se empeña en pedirme cosas en aquella casa, estoy sobrepasada Lily, además la señora Tyler siempre tiene invitados, es imposible hacer bien mi trabajo y tenerlos a todos atendidos.
—¿En qué trabaja el señor Tyler?
—Es empresario y tiene importantes negocios financieros, su esposa está todo el día quejándose del poco tiempo que la dedica.
—Pues con tanto dinero..., lo normal sería que contrataran algo de ayuda extra para el verano.
—Antes lo hacían, tu prima Becky en ocasiones me ha echado una mano. Tal vez este año pueda conseguir algo de ayuda pero nada fijo, por supuesto.
—Me parecen unos aprovechados —dije— ¡Cuánto más ricos más roñosos!, Jamás entenderé a la gente rica.
—¡Uff! Tienen mucho personal, pero para otras cosas que no son la cocina. La casa es enorme y necesita mucha dedicación, solo en jardineros se les va un dineral, a propósito y hablando de dinero... ¿Qué te parecería trabajar el sábado por la mañana conmigo? Como algo extra.
—¿En casa de los Tyler?
Lo cierto es que supondría un ingreso muy bienvenido y asentí divertida.
—Se lo pediría a Becky pero tu prima rehusará. Ya sabes que está haciendo las prácticas en las oficinas que el señor Tyler tiene en el centro, y ni querrá oír hablar de servir mesas.
—Comprendo.
—La señora Tyler dará una fiesta este sábado y me ha pedido que busque ayuda, necesitan a alguien que ayude a los camareros a servir las copas. Mimi estará hasta arriba de trabajo, y yo poco puedo hacer desde la cocina para ayudarla.
—¿Y no suelen contratar a un servicio de catering en esos casos?
—¡Oh sí!. Habitualmente sí, aunque según la señora Tyler será una fiesta con los más íntimos y no quiere levantar demasiada polvareda este año. Eso quiere decir que su marido le ha cortado el grifo con los gastos. Normalmente la señora es más derrochadora.
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Tal como éramos
RomanceLily Palmer ya no es la chica alegre, inocente que va por la vida de manera despreocupada. Mel tampoco es el chico de oro de la universidad que sueña con ser reconocido por algo más que el fútbol. Sus caminos ser han separado, una tragedia ha sacudi...