Tal como éramos

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Hola a todos, hoy saque un poco de tiempo y os pude poner otro capítulo. El primero de Mel. Espero os guste.

Baltimore, Junio

(Actualidad)

Mel

Tuve que refugiarme en una sonrisa falsa para no delatar que el encuentro con Lily Palmer en el aparcamiento no me había afectado más de lo deseado. Nunca me había preparado mentalmente para volverla a ver, jamás ni en mis más disparatados sueños me imaginé que pudiera encontrarla en el sitio menos previsto, en el momento más inadecuado, pero la vida era así, en muchas ocasiones te daba sorpresas que no esperabas.

Arranqué el encendido de mi pickup y me senté malhumorado al volante. El destino era un gran cabrón y había movido los hilos de manera majestuosa, miré durante largos segundos el timón de mi auto y finalmente arranqué mientras veía la silueta de ella desaparecer dentro del edificio de su apartamento.

Había sido un iluso pensar que iba a solucionar todo con aquella esporádica charla, ni yo estaba preparado para afrontarla ni ella para verme. Estaba claro su resentimiento y no la juzgaba. Pasados los primeros instantes de alteración, cavilé: ¿en qué momento se me ocurrió pensar que podría solucionar todo amenazándola?

Necesitaba convencerme de que todo había sido un embrujo tonto de juventud. Pero ahora, que tenía a Liv en frente, me había dado cuenta que no iba a ser tan fácil. Había demasiadas cosas que nos separaban, pero todavía podía percibir el latido errante de mi corazón sonando.

Todo había comenzado la noche anterior cuando mi novia Grace y dos de sus compañeras de apartamento organizaron una pequeña fiesta para celebrar el final de las clases y la despedida de su vida estudiantil, yo no era muy amante de las fiestas, hacía años que había terminado la universidad y de hecho, siempre había aborrecido ese tipo de celebraciones; en realidad, tras un largo día de trabajo lo único que me apetecía era regresar a casa, darme una ducha, descansar en mi sillón favorito con un cigarro en la mano y ponerme algo de música.

No estaba preparado para toparme con mi pasado, ni mucho menos para que nos separaran solamente unos cuantos metros. Si en un principio me sentí paralizado al reconocerla, enseguida me recompuse mostrándome indiferente, la llegada de Grace hizo que disimulara sobre la marcha la impresión y la turbación que sentía al haber visto a Liv.

Ella seguía siendo igual de atractiva, el mismo peinado, tal vez un poco más recortado y estiloso, continuaba teniendo esos labios hermosos y embriagadores, igual de llenos y sugerentes como los que me habían extasiado cada vez que la besaba. Su cuerpo siempre había sido una tentación para mí y, continuaba llena de curvas con unos rasgos que la diferenciaban más allá de una belleza física, y que denotaban una fuerte personalidad haciendo de Liv Palmer sin ella saberlo, un ser inconfundible y único.

Me recompuse enseguida mostrando mi máscara de desinterés, mirándola tan fijamente como si ese encuentro me importase una mierda. Me reprendí unos segundos por lo que estaba haciendo, poniéndome nervioso por una mujer que había salido de mi vida hacía mucho tiempo y a la que había dejado de lado siendo muy consciente de a dónde me llevaría ese paso.

Había una parte de mí a la que le perturbaba volver a verla, otra sin embargo quería apartarla y olvidarla para siempre.

—¿Te ocurre algo? Estás muy serio.

Miré a Grace, que estaba a mi lado preguntándome extrañada.

—No. Solo estoy cansado, tengo un poco de dolor de cabeza.