Déjame Amarte ✓(Jinkookjin) [Completa]

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Jungkook lavó sus manos en el pequeño baño que le habían facilitado a él y a un puñado de sus compañeros de clase. Ese día, como parte de sus clases, debían hacer una revisión de rutina a unos pequeños niños de un jardín infantil que quedaba muy cerca de su universidad.

—Jeon.

Jungkook miró a su compañero y asintió para luego secarse bien las manos con una toalla de papel.

La directora de dicho establecimiento los llevó hasta una sala en donde se haría el operativo.

—Aquí están las fichas de los niños que revisaran —su profesor les habló —en dicha ficha está la autorización de cada familia a que revisemos a sus hijos —el profesor se paseó por delante de ellos —tengan paciencia, son niños que están en una etapa en donde no saben muy bien seguir órdenes. Si un niño se rehúsa al control ¿Que es lo que ustedes deben hacer?

—Anotarlo en la ficha.

—Muy bien Choi.

—Lo anotan y avisamos al equipo encargado de ellos para tratar de solucionar el problema.

Los alumnos asintieron y escucharon la puerta abrirse detrás de ellos.

—Aqui están los cinco primeros niños.

—Bien, empezamos enseguida.

Jungkook le sonrió a la pequeña que se paró frente a él. Se agachó para estar a su altura.

—Hola soy Jungkook, ¿Cómo te llamas tu?

—Jenny.

Jungkook sonrió al escuchar su bonita voz de niña pequeña. Y también se asombró, la niña era muy pequeña y parecía entender todo lo que estaba escuchando en la sala donde se encontraba.

—Bien Jenny, te voy a pesar ¿Si?

La niña asintió mirando a una de sus tías de la sala.

Prontamente habían atendido sin problemas a 10 niñas y 5 niños.

—Aquí están los niños que faltan.

El castaño sonrió, estos se veían más pequeños que los otros y le llamó la atención que uno de los niños venía en brazos de la tía encargada.

—Él es Kim Hoseok —dijo la mujer —tiene un leve trastorno del lenguaje, no habla mucho, solo unas cuantas palabras sueltas... A veces es difícil tratar con él, por lo que no sé si se va a dejar examinar.

Jungkook miró a su profesor y este lo instó a intentarlo.

—Bien. —Jungkook se acercó y acarició sus cabellos suavemente. El niño lo miró —Mira Hoseok —el castaño sacó de su bolsillo un avión pequeño de juguete y le estiró los brazos. Hoseok aceptó el avión y los brazos del chico. Jungkook comenzó con la revisión mientras sonreía cada vez que el niño hacía algún ruido con su boquita. Era adorable.

Pudo medirlo y pesarlo sin mayores problemas. Y solo cuando estaban terminando el niño se puso a llorar.

Jungkook lo tomó en brazos para calmarlo y lo paseo por la sala cantándole unas canciones que a él mismo Alexander le había cantado cuando era pequeño.

—Tranquilo, no llores —acaricio su cabello suavemente mientras lo mecía.

—Jeon, no somos guardería, entrega al niño para que se hagan cargo de él.

—Si señor —el castaño miró al niño y le sonrió —ahora irás con tus amiguitos ¿Si?

—S-ssiii —dijo Hobi en respuesta.

—Muy bien, buen trabajo repitiendo.

—Jeon —la voz de su profesor lo hizo bajar a Hoseok y dejarlo para que este fuera llevado por la tía de su nivel hasta su respectiva sala.

El castaño se despidió del niño con la mano y fue correspondido por el menor. La tía se asombró por ese acto ya que Hoseok no repetía mucho y los gestos como los de saludar o despedirse todavía no estaban del todo resueltos para él.

—Deberías ser tío de jardín de niños Jeon —se burló Choi.

—Serías un lindo papá Jungkook —suspiró su compañera Lisa.

Jungkook solo sonrió. A él siempre le habían gustado los niños pequeños, no tenía problemas al momento de estar con algún niño, incluso bebés. Amaba tomarlos en brazos y poder hacerlos reír.

Sin duda amaba a los niños.

—Nos atrasamos mucho hoy, así que no es necesario que vuelvan a la universidad. De aquí pueden retornar a sus hogares.

Los alumnos asintieron y comenzaron a guardar los implementos para llevarlos hasta la camioneta de su profesor que debía volver a la Universidad.

Jungkook terminó de guardar los últimos archivos y se dirigió a buscar su chaqueta, se topó en la entrada con varios padres que a esa hora retiraban a sus pequeños.

Se puso la chaqueta arriba del  uniforme azul que debía usar y se encaminó hasta la salida.

Grande fue su sorpresa al encontrarse ahí mismo con el rubio que había anhelado tanto ver, pero lo que más le sorprendió fue verlo con un pequeño en brazos que no era nada más ni nada menos que el pequeño Hoseok.

—¿De dónde sacaste ese avión bebé? —Jin preguntó mientras cerraba la chaqueta de su pequeño —hay que devolvérselo a las tías Hobi. Dámelo.

Hoseok lo apretó en su puño al momento que decía un rotundo ¡NO!, Jin suspiró por la nueva palabra aprendida. Odiaba que su hijo llegara con cosas que no eran de él a casa.

Lo trató de tomar de la mano pero Hoseok se soltó y salió corriendo hasta la salida. Jin se enderezó rápidamente y se giró para ir tras su hijo, pero quedó estático en su lugar cuando vio a su Hobi en compañía de Jungkook.

Abrió su boca sorprendido en medio del patio del jardín mientras su hijo volvía hacia él de la mano del menor.

—El avión... se lo di yo. —Jungkook dijo cuando se paró frente a él.

—¿Cómo...?

—Jinnie amor, vamos, mi madre nos está esperando.

Jungkook se giró inmediatamente al escuchar eso.

Sungmin alzó una ceja al ver a su marido en compañía de ese chiquillo y su hijo en medio de ambos.

—Si, cierto —balbuceó el rubio.

—Hola —Jungkook le sonrió socarrón, era bueno ponerle una rostro al marido de Jin, se lo había imaginado mucho más guapo e imponente. Incluso más alto. Sonrió de nuevo —Soy Jungkook, compañero de trabajo de Jin.

—Hola —estrecharon sus manos.

Jin se sintió desfallecer con la actitud imponente de Jungkook frente a su marido. Lamió sus labios tratando de no mirar al menor y salir pillado por su marido.

Sungmin miró al chico y una mueca se formó en sus labios.

—Bien, tengo que irme —Jungkook se agachó hasta quedar a la altura de Hoseok y le revolvió el cabello juguetonamente. —Nos vemos amiguito, hoy te portaste super bien.

Jin se sorprendió al ver como su hijo sonreía ante Jungkook y cuando este se levantó su pequeño se despidió con su manito.

Jungkook se despidió también de la mano con una enorme sonrisa en su rostro y dejó a la familia atrás.

—Interesante Jinnie.

—¿Que? —Jin se quitó un mechón de pelo de la frente. Derrepente hacía mucha calor en ese lugar.

—Vamos, mi mamá quiere ver a Hobi. —Jin asintió y los tres salieron del lugar.

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