Capitulo 2

2.2K 167 2
                                    


・・・・・・・・・・・・
𝐃𝐨𝐧𝐝𝐞 𝐕𝐚𝐲𝐚𝐬 𝐓𝐮, 𝐈𝐫𝐞 𝐘𝐨
・・・・・・・・・・・・

・・・

No era la única con problemas. En 1935, cuando la madre de Steve falleció, Bucky y yo decidimos acompañarlo a su casa después del entierro. Nos esforzamos por levantarle el ánimo y darle todo el apoyo que necesitaba, aunque él siempre se resistía a aceptar ayuda.

—Puedes quedarte conmigo. No me molestaría —le ofrecí con sinceridad, queriendo demostrarle que no estaba solo en ese difícil momento.

—Si te incomoda porque es mujer, tienes la opción de ir conmigo —dijo Bucky, con una sonrisa que trataba de aliviar el ambiente. —Podemos poner cobijas en el suelo, como cuando éramos niños.

—Puedo con esto — Steve buscó la llave de su casa en sus bolsillos, pero no la encontraba. Vi una piedra cerca, que al levantarla reveló una llave escondida. Bucky la recogió y se la entregó a Steve, quien la tomó con un suspiro de alivio.

—Sabemos bien que puedes con esto, pequeñín —dijo Bucky, tratando de ofrecerle consuelo con su tono habitual. —Es solo que...

—No tienes que hacerlo —le interrumpí. Bucky y yo intercambiamos una mirada significativa y una ligera sonrisa. —Estaremos contigo, hasta el final del túnel.

»Hasta el final del túnel« Esa frase tenía un significado profundo para nosotros. Se originó después de una gran discusión que casi nos separa. En una pelea muy intensa, Steve fue el primero en recapacitar y disculparse. Salimos del lugar en silencio; el ambiente en el coche era tenso. Bucky conducía mientras Steve miraba por la ventana, y yo estaba en los asientos traseros. Un completo silencio que Bucky quiso alejar.

—No sigues enojada, ¿verdad, Roxy? —dijo, con una mezcla de humor y preocupación en su voz.

—Tienes suerte de que no lo esté. Pero eso no significa que te hayas librado de mí —respondí, con una sonrisa que pretendía ser severa.

—Chicos... No me dejarán solo, ¿verdad? —preguntó Steve, con una vulnerabilidad que rara vez mostraba. —Ustedes son lo único que tengo, y no soy bueno hablando con las personas.

—¿Qué te hace pensar que te dejaremos solo? —le pregunté con firmeza. —Escucha bien, Grant Rogers.

—Sabes bien que no me gusta que me llames por mi segundo nombre —dijo Steve, con una mueca de desagrado.

—Criticas al final, escucha primero —le respondí, rodando los ojos. —Donde vayas tú, iré yo. No te dejaré solo, ¿entendido?

—¿En qué momento te volviste Cursi?

— Cállate Barnes –Lo vi molesta.

—¿En qué momento te volviste cursi?

—Cállate, Barnes —le respondí, con una expresión que ocultaba mi preocupación con una pizca de diversión.

—¿Hasta el final del túnel? —preguntó Steve, mirando el túnel que se dibujaba a lo lejos mientras avanzábamos.

—Hasta el final del túnel —le sonreí. Steve me devolvió la sonrisa, y Bucky, por un momento, dejó de observar la carretera para mirarnos a los dos.

—Hasta el final del túnel —susurró Bucky, con un tono serio pero lleno de afecto.

—Los quiero tanto, chicos —dije mientras entrábamos en el túnel. Sentía la fuerza de nuestra amistad en ese momento, un vínculo indestructible.

Una Agente Diferente || Marvel [EN EDICION]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora