Capitulo 3

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𝐔𝐧 𝐒𝐨𝐥𝐝𝐚𝐝𝐨 𝐍𝐨 𝐏𝐞𝐥𝐞𝐚 𝐏𝐨𝐫𝐪𝐮𝐞
𝐎𝐝𝐢𝐚 𝐋𝐨 𝐐𝐮𝐞 𝐓𝐢𝐞𝐧𝐞 𝐄𝐧𝐟𝐫𝐞𝐧𝐭𝐞
𝐒𝐢 𝐍𝐨 𝐏𝐨𝐫𝐪𝐮𝐞 𝐀𝐦𝐚 𝐋𝐨 𝐐𝐮𝐞 𝐓𝐢𝐞𝐧𝐞 𝐀𝐭𝐫𝐚𝐬

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Estar en una cita triple y ser la única que estuviera sola sería algo decepcionante si no fuera porque las dos chicas se iban con Bucky. Como era de esperar, y esto siempre terminaba de la misma manera: Steve y yo atrás, jugando. Me sorprendía cuánto se esforzaba mi amigo en fingir ser alguien más para evitar el rechazo de su solicitud, fingir en los informes es algo grave. Me gustaba su determinación, aunque lamentablemente había sido rechazado nuevamente.

Llegamos a la exposición de un famoso inventor que estaba presentando su Auto Volador. La multitud se apiñaba alrededor del prototipo, y no me sorprendió en absoluto ver que el vehículo fallaba estrepitosamente. Las piezas no estaban a la altura, el motor se sobrecalentaba rápidamente debido a la presión constante, y el dispositivo necesitaba un potenciador para funcionar correctamente. ¡Ja! Y decían que no valía la pena estudiar mecánica.

A medida que la demostración se desarrollaba, me desconecté, sabiendo que el Auto Volador no iba a despegar esta noche. Algo más me llamó la atención, algo mucho más relevante para mí que cualquier mecanismo volador.

–¿Qué pasa, Roxy? –Steve se giró hacia mí. Lo tomé del brazo y lo arrastré hacia un cartel que claramente buscaba soldados.

–¿Qué tal intentarlo una vez más? –le pregunté con entusiasmo. Steve no respondió de inmediato, pero su silencio era una confirmación. Se dejó guiar hacia las instalaciones, aunque su mirada mostraba cierta preocupación –Aún puedes arrepentirte.

–Lo haré. Una vez más –respondió con determinación.

–No, no deberías –intervino Bucky, como era de esperar, con su voz cargada de preocupación. –Se supone que era una doble cita.

–Era aburrida. Además, uno nunca debe rendirse, Bucky, especialmente si es por algo que realmente desea –dije, mi voz era calmada pero desafiante al mismo tiempo.

–Lo sé, pero piénsalo. Ya ha hecho varios intentos y no lo han aceptado. Además, mentir en los informes es ilegal.

–Ese es un detalle menor. ¿Qué podría salir mal en un último intento? –desafíe.

–Bueno, podrían llevarlo o, peor aún, podrían aceptarlo –advirtió Bucky, intentando que recapacitara.

Coloqué mi mano en mi mentón, inclinando la cabeza en señal de reflexión. A pesar de su tono serio, ninguna de las dos opciones parecía realmente buenas. Finalmente, después de un largo suspiro, miré a Bucky con determinación.

–Decidido, un intento más no hace daño –dije con una sonrisa amplia.

–Cuando se lo lleven o le pase algo malo, verás tu error y te arrepentirás.

–No hay errores en la vida, solo lecciones –sentencié, celebrando mi pequeña victoria al escuchar su suspiro.

–Steve, por favor –Bucky recurrió a nuestro amigo como última esperanza.

–Lo siento, Bucky, pero necesito hacer esto. No quiero trabajar en una fábrica, no quiero quedarme de brazos cruzados. Quiero hacer algo por nuestra nación. Lo haré –Steve respondió con firmeza.

Una Agente Diferente || Marvel [EN EDICION]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora