-Capitulo 1-

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Y llego el gran día

El día en que darían bienvenida al novato.

Al que su nombre ya susurraban algunos alumnos.

A las afueras de la gran estructura no había ningún sonido, ni una bulla, solo una paz entre estudiantes con ansias, ya faltaba tan solo una semana para comenzar las clases, muchos de ellos ya habían estado mudándose al lugar desde hace medio mes, pues sus padres, que ni un céntimo les faltaba, los dejaban en esa universidad de riquillos e prestigio, que mas decir?

En los adentros del lugar, había una supuesta calma, algunos alumnos pasaban caminando e visualizando aquella áreas e campos que les brindaba.

Sin embargo, no se le podría decir mismo el director de aquel lugar, que con un semblante serio, miraba por si algún momento llegaba el chico que tanto le había ilusionado en venir.

- Quizás se acobardo, o capas ni para el carro tenia - Se burlo el de lentes mientras se mantenía en su asiento con posición que ni que hablar de comodidad, estaba  prácticamente casi rompiéndose la espalda del werito ese -

- Tu deberías ser estar apoyando - Suspiro con una sonrisa débil la organización, haciendo que el de cabellos rubios lo mirara con  una ceja levantada-

- Te apoyo y lo sabes, pero no me puedes negar que fue mala idea - Se sentó de una forma mas normal que digamos - Ademas, le avisaste a los otros? 

- Pense que tu lo harías

-...Fuck... 

- Y dale con malas palabras, si no fueras un pariente te juro que a patadas te sacaba - Desviando su mirada de la ventana, mira al contrario con algo de molestia en su mirar -

- Se que sin mi esta universidad ni baños tendría - El de lentes oscuros solo se los acomodo, mientras mostraba una sonrisa egocéntrica -

- Dale con la burra al trigo - Un poco frustrado refuto mientras agarraba los periódicos de la pequeña mesa y se iba a quien sabe donde -

El de habla inglesa tomo un poco de su café , moviendo su pie intranquilo, aunque no lo quisiese admitir, estaba algo ansioso del que un nuevo profesor llegara, no era por nada pero, si las sospechas de que era un muerto de hambre eran ciertas, se estaría riéndose por siglos de su pariente.

No tenia esperanzas, y que mas decirle? Aquel profesor recién empezaría su profesión en esa misma universidad, que con suerte -y pena cof cof- había logrado ingresar.

No tardaron segundos para que el peruano llegara sin avisar.

Freno en seco al terminar en las puertas del lugar, que comparado a el, pues ni modo, parecían la gran muralla china.

- Y ahora que hago? - Miro a los lados para buscar a alguien, pero nadie estaba, incluso una bolitas esa del desierto se las atravesó -

Suspiro y decidió entrar por su cuenta, hace mas decir que estaba acojonado? nervioso y sumamente incomodo?

Se sentía como un vagabundo en restaurante 5 estrellas, despeinado y con ropa algo descuidada, cargo sus dos cajas en manos y entro por los dos grandes portones. -claro no sin antes asegurar su bicicleta, que por ahí aparece un choro y ni mas la vuelves a ver -

Con mas detalle miro el lugar, los hermosos pastos si que eran de apreciar, tomo un pequeño girasol para darle suerte y lo puso en su caja para decorar un poco, suspiro e busco el lugar en donde se quedaría por lo menos...5 meses? 7? había acaso revisado su contrato? Nop, ni bien se lo dieron lo firmo, capaz ahí decía que cedería su alma, pero ñeh, cosas que pasan.

Después de unos minutos e ir de una en una habitación sin encontrar nada ni nadie, decidió simplemente esperar en una esquina esperanzado de que alguien por casualidad pasase por ahí.

Comenzó a jugar un poco con las cosas que traía, viendo fotos, algunas pulseras, e leyendo un buen libro de Jose María Arguedas, ozi.

Entre tantas cosas que encontró, vio un pequeño folleto, lo saco para revisarlo , encontrándose con la reconfortante idea de que el ahora estaba en aquel tan lugar soñado.

Sonrió un poco y rió, recordando el duro trabajo que le había costado, de aquí para acá con el papeleo, hasta tal extremo de pedir a sus hermanos ser sus representantes para hablar bien de el.

Al momento de levantar el folleto, se dio cuenta de que una mirada se había quedado en el.

- E-esto... - Se sintió intimidado y guardo rápidamente sus cosas, aquella mirada dada por el tricolor lo dejo sin aliento y con temor, podía jurar que estaba siendo escaneado por el de lentes rectangulares -

- Como es que te dejaron pasar? No pareces ser de familia - Tomo de la muñeca al mas bajo, levantándolo sin ningún cuidado del suelo y dejando a un lado las cosas que traía -

- S-soy... - Estaba totalmente nervioso, no sabia quien era el de mayor altura, pero se sentía impotente ante esa gran figura, y la cabellera junto a aquella camisa apretada no ayudaba mucho-

- No me importa quien mierda eres - No tuvo ninguna delicadeza en sus palabras - Vete, no tengo que estar lideando con muertos de hambre - Y sin ningún remordimiento, dejo caer al menor al suelo -

- Q-que? - Apenas decía una o dos palabras, se suponía que estaría conviviendo con aquellas persona por lo que quedaba del año? enserio así estaría su primera bienvenida?

- Se nota que no eres de dinero, tus ropas ni que hablar - De forma algo graciosa, rió secamente al ver la expresión del mas pequeño, asustadiza e nerviosa, una que daba risa e ternura, pero hablemos enserio, este ser sin corazón no pensaría en encariñarse con alguien que apenas y tenia pasaje- Solo vete, ni se que harás aquí pero sera un total desastre.

Perú se quedo callado, mirando al suelo con ambas pupilas como pulgas, temblando un poco por la forma impotente que el mayor daba a presumir - Tengo todo el derecho de estar aquí! - Lo enfrento, no se de donde habrá sacado los webos, pero al caso - Idiota - Susurro algo frustrado y molesto, comenzando a caminar para encontrar otro lugar que no fuera junto al mayor-

Por desgracia o no, el de cabellera negra escucho detalladamente las palabras, y no estaba para nada feliz.

El mayor jalo del cuello de la camisa al nombrado, valla tolerancia tendría después - Escúchame bien, pequeña escoria - Aquella voz profunda hizo dar un escalofrió al menor - Trabaje años en esta escuela, tengo el derecho de estar aquí, y ningún simple estudiante, o simple vago que se quiere hacer pasar por uno, lograra hacerme menos - Entre dientes dijo, cierto que se dejaba insultar por estudiantes, pero era por su gran fago de billetes al terminar la quincena, oh pero si alguien que ni era de ahí, encima de apariencia humilde, se le enfrentaba , si que ibas a pasar un mal rato -

Pero sin que nadie lo divisara, el peruano lo miro con aquellas orbes doradas, que mostraban miedo e inseguridad, aquel brillo de querer llorar por aquello era real, El mayor volvió en si y lo dejo caer al suelo, agotado y sin ganas.

Perú trago saliva, se paro del suelo y se puso firme - No me iré de aquí, las personas como tu...simplemente dan...asco... -Lo miro con sus orbes amenazando llorar, pero que puedo decir, ya se habían acostumbrado al trato tal, desvió la mirada e camino alzando sus cajas -

- No llegaras lejos con esa actitud...oye...la salida es por haya - Volteo divisando que el peruano ni caso hacia, siguiendo su camino , el alemán solo bufeo al ya no ver por esos rumbos a ese blanquirojo - Que va...no creo que pase a Onu - Sonrió un poco al imaginarse tan solo botarlo a patadas-

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DAHJDGKASHDVAKDGKA Ays el comienzo bien kk pero ñeh, me gusto como quedo 

Sin mas que decir, Los tequeño!~

Pd: Muchas gracias por el apoyo chicos ;w;

Estoy pensando en hacer otra portada, que dicen?

-Kiss me- ((Peru x Potencias))Donde viven las historias. Descúbrelo ahora