𝐋𝐎𝐒(𝐕)𝐄 | REDDIE

17 | Propuesta

—¿Crees que él también este vivo? — el ojiazul preguntó dudoso.

—¿Stanley?, no lo sé. — el castaño suspiró. Era una pregunta que se había hecho muy seguido.

—Aún no entiendo como es que estas acá. Escuché cada parte de los que nos contaste. Pero aún así, es extraño. — la pelirroja miró a Eddie, este asintió.

—Ni yo lo sé, sólo... estoy acá. — rascó su nuca nervioso.

—¿Y qué harás?

—¿Mmmh...? — Eddie miró a Mike, este volvió a preguntarle.

—¿Qué harás ahora? Llevas días con Richie, ahora que fuiste capaz de decirnos también lo harás con tu familia. ¿Tú esposa?

Richie se acomodó los lentes incomodo, Eddie pareció sentirse igual que él ya que se miró las manos mientras las frotaba contra sus muslos.

—Hablaré con ella mañana. — bufó. Richie por poco se atora por lo que dijo el castaño, nunca le había mencionado que hablaría tan pronto con ella. —Quería decirles a ustedes primero.

—Pero es tu esposa. Llevas muerto cerca de 15 meses. — Bill menciono acongojado. —Debe estar destrozada.

—Si. — el castaño se frotó los ojos pensativo, esto era algo que no quería hablar con sus amigos porque ni siquiera él lo tenía claro.

Richie lo noto frustrado, colocó su mano en su muslo cerca de la rodilla y apretó ligeramente dándole apoyo. Beverly fue la única en su grupo de amigos la cual notó ese pequeño detalle.

Todos se encontraban sentados en los diferentes sofás en el living. Richie, Eddie y Bill en el más grande al centro, Beverly y Ben a su izquierda en otro sofá de 2 cuerpos y Mike a la derecha, solo.

—Wow. — suspiró Bill —Realmente estoy muy complacido de que por esto fuera tu llamada. Estaba preocupado.

—¿Por qué? — Eddie fue quién preguntó. Bill recibió una mirada de advertencia de Beverly y ahí se percató de lo que había dicho.

Bill y Beverly habían sido los únicos que habían hablado más seriamente de la posible depresión, y todo lo que sucedió con Richie después de Derry.

—Por cualquier otra cosa. — balbuceó. —Algo grave, malo, como eso.

Eddie asintió comprendiendo, aún recuerda cuando lo llamaron y el terror que lo absorbió.

Muy pronto todos comenzaron a sentir el peso de la noche, eran pasadas las 2 de la mañana así que Richie les enseño las habitaciones donde podían quedarse a dormir. Le designó una a cada uno —a excepción de la pareja casada la cual compartió habitación— y se despidieron. Mañana podrían seguir conversando y colocándose al día.

Richie fue el último en ingresar a su cuarto, se había lavado los dientes y se acercó a la cama en dónde el castaño se encontraba mirando el techo desprevenido.

—¿Sucede algo? — preguntó, Eddie negó y siguió observando hacia arriba. —¿Qué tanto le ves? ¿Está mi cara ahí o qué?

Eddie sonrió, negó divertido. Richie se le acercó y le abrazó ligeramente mientras cerraba los ojos, estaba agotado.

Al poco tiempo después ambos se quedaron dormidos.

[•••]

Eddie se despertó por el crujido de unos pasos en el pasillo, miró a su costado y Richie parecía seguir en su profundo sueño así que se hizo a un lado desligándose de su cuerpo y salió de la habitación. Camino escaleras abajo hasta llegar a la cocina y ahí se encontró con la espalda de Bill quien rápidamente se dio vuelta dando un ligero brinco por el susto que le causó la aparición de su amigo.