Odio sentirme de esta manera, esperando a que el depredador aparezca entre los matorrales, esperando a ser atacado, esperando la mordida de unos colmillos sedientos de sangre, odio esperar.
Más no puedo hacer otra cosa ahora.
No dejare que me gane, porque no tengo nada que perder, puedo darlo todo hasta el final esta vez.
Por ello, le pedí a Shiki un último puesto de trabajo, el puesto que mi madre solía tener en su bar.
El camerino que han dispuesto para mí, es espacioso y limpio, no hay de que quejarse. También me han dado un traje oscuro, una camisa blanca y buenos zapatos, una mujer ha arreglado mi cabello un poco. En mi reflejo ante el espejo, parezco un hombre de clase alta con esta ropa, alguien que está muy por encima de un lugar como este, parezco alguien... como mi verdadero padre.
Me alejo del espejo, es asqueroso pensar que luzco como ese hombre, no soy como él, yo no abandonaría a mi propio hijo antes de nacer, tampoco lo ignoraría por el resto de su vida. Bueno, tiene sus razones, sé que me odia por la atención que mi madre me dio.
Tan infantil.
No me importa lo que piense, sus pasos en este mundo, son algo que no quiero seguir y no voy a hacerlo. Porque si el me odia, también lo odio entonces. Orihara Kaoru no es mi padre, nunca lo ha sido, nunca lo será, nunca desee que lo fuera tampoco.
Llaman a mi puerta.
El tiempo de alistarse ha terminado.
Salgo al pasillo, encuentro un par de personas divirtiéndose con alcohol y música. No he cantado en público desde hace mucho tiempo. Me detengo un instante. ¿Podré hacerlo? Miro mis manos. Veo los anillos en mis dedos, puedo sentir los brazos de mamá rodearme.
Sigo caminando, con paso firme como Ena me enseño, mostrándome dueño de todo, nunca mirar al suelo, levantando el mentón y enderezando la espalda.
Subo al escenario, escucho aplausos y la voz de una mujer terminar al presentarme.
Me acerco al micrófono, es uno clásico, lo toco suavemente como mi madre me enseño con el suyo, sujeto el soporte con la mano izquierda, escucho mi respiración en los amplificadores, escucho la música sonar y las voces de los demás, puedo cantar, lo sé, porque mi madre está aquí conmigo.
Esta noche... puedo cantar.
ESTÁS LEYENDO
Rosez |Shizaya|
FanfictionMe pregunto, en mi soledad, si tú, ¿aún me amas? acaso, ¿me esperaras en la puesta de sol si te llamo? en el alto cielo nocturno, veo dos estrellas idénticas a nosotros, ¿tú también puedes verlas? aquí, a mi lado, me pregunto si vendrás. Las rosas...