Alguien había descubierto el cadáver y pronto una masa de personas se había amontonado alrededor del edificio. Los Guardias habían atravesado algunas dificultades para lograr dispersar a la multitud y lograr que todos volvieran a sus habitaciones. Había bajado y había exhibido el mismo horror que todos los demás... la sorpresa había sido parcialmente fingida pero había sido suficiente, pues me había asegurado de no acercarme lo suficiente para alcanzar a ver el cuerpo.
Había alcanzado a ver un atisbo de los cabellos alborotados de Tyler entre la multitud, pero había desviado la mirada casi inmediatamente y evitado con determinación volver a mirar en la dirección en la que lo había vislumbrado. La situación había resultado en un llamado a toque de queda, así que cuando nos vimos obligados a volver a nuestras habitaciones lo había agradecido profundamente, incluso cuando eso significaba que probablemente continuaría pasando hambre durante la mayor parte de aquel día también.
Comenzaba a sentirme débil, cansada, sin energías... y estaba bastante segura de que estaba por enfermarme. Arrastrando los pies hacia el baño, me incliné sobre el lavabo y bebí un poco de agua directamente de la pila... al menos tenía que mantenerme hidratada si quería sobrevivir para escapar. Me di un vistazo a mí misma en el pequeño espejo del baño... lucía realmente mal. Estaba pálida, más de lo usual y mis profundas ojeras eran tan oscuras que simulaban unos surcos bajo mis ojos. Y mis ojos verdes estaban apagados, al igual que cualquier otro rastro de emoción en mi rostro.
Decidí que si no podía salir de mi habitación, al menos debía intentar dormir aunque fuese un poco. No estaba segura pero creía que había sobrepasado las cuarenta y ocho horas sin dormir... y mi mente comenzaba a jugarme sucio haciéndome ver cosas que realmente no estaban ahí. Arrastré los pies de regreso hacia la cama y me cubrí con las frazadas hasta la barbilla, era una mañana fría y las calles estaban cubiertas de neblina. Cerré los ojos y a pesar de los rugidos de mi estómago y los gritos de mi mente... logré quedarme dormida.
Desperté estimaba que al menos un par de horas más tarde cuando alguien llamó a la puerta con fuerza y seguridad. Me incorporé de golpe en la cama, mirando a mí alrededor sin saber muy bien que era lo que estaba sucediendo. Un segundo llamado me hizo ponerme de pie, para descubrir que me sentía peor que antes de tomar la siesta. Pequeños escalofríos recorrían mi cuerpo y mis articulaciones dolían.
No tenía idea de quién podía estar llamando a mi puerta. Sabía que no podía ser Tyler porque habíamos acordado no vernos en absoluto. Había toque de queda así que no podía ser ningún otro residente... y las opciones que quedaban hacían que la sangre se helara en mis venas, transformando los pequeños escalofríos en violentas sacudidas. Abrí la puerta con manos temblorosas, en parte por el malestar y en parte por el miedo.
Dos Guardias se encontraban de pie en el pasillo, esperando con paciencia que atendiera a la puerta. Tuve que recordarme a mí misma que debía seguir respirando o de lo contrario me desmayaría y aquello no daría muy buena impresión... pero no pude controlar la voz cargada de pánico que susurro en mi mente: lo saben.
- ¿Sujeto Veintiuno? – inquirió el más alto, que era un hombre musculoso de piel oscura y ojos cafés. Yo me limité a asentir porque aquello era todo lo que el miedo que experimentaba me permitía hacer. – Necesitamos que venga con nosotros.
Quise preguntar por qué pero todo lo que logré hacer fue asentir y cruzar el umbral de la puerta, cerrando ésta al salir. Los Guardias tomaron la delantera y yo los seguí con la cabeza gacha. Me costaba un poco mantener el ritmo seguro e imponente de los Guardias, así que optaron por sujetarme cada uno de un brazo y prácticamente sacarme arrastrada del edificio. Las personas que nos cruzamos en el camino observaron la escena con morbosa curiosidad, susurrándose cosas en los oídos unos a los otros.
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WELCØME TØ TRENCH | [Josh Dun]
FanfictionWhen Bishops come together they will know that Dema don't control us... - Inspirado en el universo de Trench de la asombrosa banda Twenty One Pilots. Todo lo que creas conocer probablemente sea de ellos, lo que no... es cosa mía.