Sr. Collins

Capítulo 24

Salimos los dos al parque, Julia no dejaba de mirarme y sonreía de esa forma como queriéndome decir ¿ya se conocían?

Un niño se acercó a James y le paso la pelota.

—¿Él es tu novio Alison? —me pregunto el niño con inocencia al hablar.

—No Luisito, yo trabajo con él —dije algo incómoda por su pregunta.

James solo me miraba y sonreía de esa forma fascinante.

¡Deja de reírte así o seguirás derritiéndome!

Nos sentamos en una de las bancas viendo a los niños jugar.

—No sabía que frecuentabas mucho este lugar —escucho decir a James.

—Me reconforta poder ayudar a estos niños.

—Es un gesto muy lindo de tu parte.

Yo solo lo mire y le dedique una pequeña sonrisa de lado.

—Mi madre me abandono cuando estaba pequeña.

No sé en qué estaba pensando cuando le confesé algo tan personal.

—Yo... de verdad no sabía que tu...

—No, tranquilo no te preocupes —dije mirándolo por cortos segundos y luego baje la mirada.

—Mi madre nos abandonó a mi padre y a mí, ella prefirió irse con otro hombre, el cual para ese entonces era millonario y mi padre apenas comenzaba en el mundo de los negocios y desde ahí la vida de mi padre ha sido su empresa.

—No sé qué hago contándote todo esto, es que yo...

—Tranquila, sabes que puedes contar conmigo, me imagino que no debió ser nada fácil todo eso para ti siendo apenas una niña.

—Alison... ¿te parece si partimos el pastel? —escucho decir a Julia haciéndome levantar de la banca.

—Sí, me parece bien —digo sonriendo.

—¿Interrumpo? Disculpen por ser tan inoportuna —dijo Julia apenada.

—Tranquila, no interrumpes nada —digo sonriéndole de lado colocando mi brazo sobre su hombro mientras caminábamos al comedor.

James me miraba con dulzura haciéndome sonrojar y justo en ese momento recibió una llamada.

Julia y yo estábamos en el comedor preparando las cosas para los niños cuando entro James.

—Alison tengo que irme, nos vemos mañana —dice dándome un pequeño abrazo y dejándome un beso cerca de la comisura de mis labios.

¡Este hombre quiere que muera de un infarto!

Los cortos segundos que me vio a los ojos fueron más que suficientes para despertar mis hormonas, su perfume era otra cosa que me enloquecía.

—Un placer conocerla Sra. Julia —dijo amablemente James despidiéndose con un apretón de mano.

—Igualmente —le respondió ella sonriendo de lado.

Cuando James se fue el primer comentario de la señora Julia fue: —ese hombre es un encanto —lo dijo con una sonrisa de oreja a oreja.

— ¿Me lo dices o me lo preguntas? —digo para mí misma.

—No sabía que ustedes se conocían —escucho decir a Julia con picardía al mirarme.

—Sí, James y yo trabajamos juntos en un proyecto —respondí sintiendo mis mejillas sonrojarse.

...

En el camino a mi apartamento recibí una llamada de Pamela, la coloque en alta voz ya que estaba manejando.

—Hola Pame...—digo con voz suave.

—Hola Alison —escucho decir a Pamela con su voz chillona.

—Willliam y yo te haremos una invitación y no aceptamos un no por respuesta —la escucho decir en tono divertido.

—¿Que estas tramando? —le pregunto desconcertada.

—Solo te diré que te vas a divertir mucho —la escucho decir entre risas.

—¿Estas tomando verdad? —pregunto con seriedad al hablar.

—Por supuesto que no —la escucho decir carcajeándose de la risa.

—Mañana te pasare buscando con William, te deje lista la maleta, por cierto guarde ropa playera para los días que estaremos en la playa.

—¿A la playa? —pregunto sorprendida.

—Y de paso te tomaste el atrevimiento de hacerme la maleta, sin saber si voy o no... —digo riendo con ironía.

—Tú de verdad eres un caso perdido —agrego.

—Mañana es viernes y tengo que seguir trabajando en el proyecto.

—Relájate...eres la hija del dueño, mi tío no creo que se moleste porque su hija salga a distraerse un poco...además no te vendría nada mal distraerte.

Me quede pensando en la invitación de Pamela, a decir verdad necesitaba distraerme un poco.

¿Qué podría salir mal?

—Está bien, acepto, pero la única condición es que iré a trabajar hasta el mediodía y luego pueden pasar por mí.

—Ok, como tu quieras, sabía que ibas a aceptar—escucho a Pamela gritar emocionada.

—Adiós Aliii... —termina diciendo Pamela alargando mi nombre.

Pamela tiene razón, además me gustaría ir a la playa.

Y James... ¿también estará invitado?

Lo pienso y una sonrisa se dibujaba en mi rostro.

¿Y yo qué hago pensando en James? ¿Porque últimamente lo tengo metido en mi cabeza?