Tres meses después...
Estaba con Pamela en el apartamento de James cuando escuchamos el sonido del ascensor.
—¿Esperas a alguien? —me pregunta Pamela agarrado una galleta.
—James dijo que vendría más tarde —digo confundida.
—Cuando voy acercándome a la entrada del apartamento veo a Thomas con una maleta.
—Thomas —digo sorprendida.
—¿Quién es? —escucho la voz de Pamela atrás de mí.
Cuando miro a Pamela de reojo, me asombro cuando veo su cara embobada viendo a Thomas, mientras ella terminaba de comer su galleta en cámara lenta.
El efecto que causan los hermanos Collins a simple vista
pienso rápidamente apretando mis labios para no reírme.
—¿Cómo estas Alison? —dice Thomas acercándose a mi saludándome amablemente con un beso en mi mejilla.
—Hola, Thomas —digo aun sorprendida.
—No sabía...
—Lo sé, no le comente a mi hermano que vendría, vine a un congreso, solo estaré por aquí un par de días.
—James se pondrá contento de verte —digo mostrándole una sonrisa.
—Espero no molestarlos —dice bajando su mirada algo apenado.
—Podría quedarme en un hotel mientras termina el congreso —dice algo incómodo.
—No, que cosas dices —digo con total sinceridad haciendo un gesto con mi mano.
—Le diré a Keila que te prepare una habitación —dije girando encontrándome a Pamela.
—Por cierto, ella es mi prima Pamela —digo mirándola y luego a Thomas.
—Mucho gusto, Thomas Collins —dice Thomas con su voz suave y cálida.
—Pamela —la escucho decir por lo bajito intimidada.
Creo que ya la perdimos
pienso apretando mis labios en una sonrisa mientras caminaba de espalda hacia ellos buscando a Keila.
Después de unos minutos regrese al lugar donde había dejado a solas a Pamela y a Thomas.
—Ya está lista tu habitación Thomas.
—Gracias Alison —dijo mostrando una pequeña sonrisa.
—Por cierto ya le dije a James que estas aquí, me dijo para salir esta noche a cenar todos juntos.
—Ok, me parece buena idea.
—Iré a cambiarme —hizo una pequeña pausa mirando su reloj, en una hora empieza la reunión.
—Le diré a Keila que te prepare algo.
—No te preocupes Alison, ya comí algo por ahí, eres muy amable —dijo con una sonrisa de lado.
Pamela lo siguió con la mirada mientras Thomas se alejaba por el pasillo.
...
Media hora después...
—¿Por qué tan callada Pamela? —digo en tono burlón aclarando mi garganta con una sonrisa burlona.
—¿Por qué no me habías dicho que James tenía un hermano tan guapo?
—¿Y cuál es la diferencia de saberlo ahora? —digo de forma automática.
—Bueno en parte tienes razón, nunca es tarde cuando la dicha llega —dice sonriendo de lado.
—Pamela... Pamela —digo cruzándome de brazos con mis ojos abiertos.
—No me digas que ahora vas a atacar a Thomas —digo negando levemente con mi cabeza con una sonrisa de lado.
—¿Y tú que crees? —dice Pamela levantando una ceja mirándome con esa picardía que la caracterizaba.
—Cuando dijo que se iba a ir a un hotel, en mi mente solo estaba pensando en darle hospedaje en mi apartamento —dice de lo más tranquila.
—De verdad que eres todo un caso —digo riendo a causa de su comentario.
—Es el hermano de James —digo hablando serio.
—¿Y que tiene?
—Tú sales con William.
—Corrección —dice haciendo una pausa levantando su dedo.
—Salía, querrás decir —dice con su voz peculiar.
—No mientas —digo rodando los ojos.
—Ok, ok... a veces salimos pero estamos claros que solo es algo pasajero.
—Mejor olvida tu descabellada idea de seducir a Thomas.
—Sabes que no lo haré, además creo que es el amor de mi vida.
Su comentario me hizo reír a carcajadas.
—Por dios Pamela, lo acabas de conocer —digo entre risas.
—Es que cuando lo vi lo supe —dice suspirando.
—Supiste que será otro de tu lista —digo riendo sin parar.
Pamela solo me miraba seria.
—Ya verás —dijo ella retándome.
—Además pienso terminar por completo lo que tengo con William.
Mi cara de sorpresa me delataba.
...
Seis horas más tarde...
—¿Me veo bien con este vestido? —escucho decir a Pamela viéndose una y otra vez en el espejo algo inquieta.
—Estas perfecta —dije con sinceridad.
Justo en ese momento entro un mensaje a mi teléfono.
James:
Hermosa estoy algo retrasado, William pasara por ustedes.
—William pasara por nosotras —dije mientras leía el mensaje.
—¡¿Qué?! —dice sorprendida Pamela girando bruscamente.
Solo me encogí de hombros mientras veía a Pamela angustiada.
Cuando llegamos al lugar nos encontramos a Thomas con una chica platicando de lo más agradable.
¡Oh my Gad!
—Esto sí que no me lo esperaba —murmuro en voz baja Pamela sin despegar sus ojos de Thomas.
—¿Pasa algo? —escuchó la voz de William atrás de nosotras.
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Sr. Collins
Любовные романыJames Collins un apuesto y atractivo empresario de tan solo 27 años, Alison White una joven de 22 años de buen corazón, atractiva y cariñosa... se conocerán de la manera menos esperada y coincidirán en muchos lugares. Ella no tenía problema de dine...