Sr. Collins

Capítulo 27

...

Al siguiente día me levante temprano para trotar un rato y pensar sobre algo que estaba pensando hacer y al regresar me consigo con Pamela y William.

—¿Y Alison? ¿Cómo la terminaron de pasar anoche?—escucho decir a Pamela curiosa por mi respuesta.

—Alison por lo visto sigue durmiendo —digo con total tranquilidad agarrando una botella de agua.

—Nosotros iremos a nadar —añade William.

—Cuando despierte Alison los alcanzamos allá —les digo a ambos.

—William...

—¿Si?

—Necesito comentarte algo antes de que se vayan.

—Te espero en la playa —dice Pamela dándole un beso a William.

—Está bien nena.

Después de hablar con William, tome una ducha y luego baje para prepararle el desayuno a Alison antes de que despertara.

De repente siento pasos y en cuando volteo la veo a ella, por su expresión en su rostro se notaba que quería salir huyendo.

—Hola —la escucho decir algo apenada.

Tal vez recuerde algo sobre anoche.

—Buenos días Alison, ¿cómo amaneciste?

—Bueno... amanecí con un fuerte dolor de cabeza —dice sentándose frente del mesón de la cocina haciendo una mueca.

—Toma esta pastilla —digo pasándole la pastilla y un vaso de agua.

—Voy a bañarme —dice levantándose nuevamente y alejándose de mí.

—¿Alison?

—¿Si?

—Los chicos nos están esperando para nadar y yo... yo te estoy preparando el desayuno —termino diciendo.

—Ahorita vuelvo —dice algo incomoda esquivándome la mirada.

Narra Alison

—No puedo creer mi comportamiento de anoche, no tengo cara para mirar a los ojos a James —murmure en voz baja mientras me duchaba.

¿Cómo pude comportarme así?

Lo pienso llevándome una mano a la cabeza.

Cuando salgo del baño, escojo un traje de baño menos revelador y un vestido transparente por encima.

Bajo las escaleras a paso lento y me percato que James ya no se encontraba en la cocina, cuando estoy sentándome para desayunar lo veo bajar las escaleras con un short y sin camisa viéndose jodidamente sexy.

¡Dios mío, que hermoso hombre!

—Te esperamos en la playa —lo escucho decir mirándome con esos ojos profundos y esa sonrisa que me derretía por dentro.

—Ok —digo apenas moviendo mis labios y con mis ojos puestos en él... viendo cómo se alejaba.

Minutos después...

—Alison... por fin llegas —escucho decir a Pamela con ese tono peculiar en ella y mirándome con picardía.

—Ya veo que la terminaste de pasar increíble anoche —dice guiñándome un ojo.

Yo estaba que la mataba con la mirada, disimule un poco sentándome en una de las sillas bajo una gran sombrilla azul, en eso veo saliendo de la playa a James.

Ok, este hombre no puede ser más perfecto porque no puede

Y yo tragando grueso mientras lo examinaba disimuladamente con mis lentes de sol.

—Prima, disimula un poco se nota que te estas comiendo a James con la mirada —escucho decir a Pamela entre risas.

Su comentario hizo que me sonrojara.

—Pame...¿me puedes colocar el protector solar? —digo quitándome el vestido y tendiendo la toalla en la arena.

—Porque mejor no le preguntamos a James si quiere colocártelo —la escucho decir con picardía.

—Pamela no te...

Cuando volteo me consigo con sus ojos y esa hermosa sonrisa.

—James... ¿podrías colocarle el protector solar a Alison? Es que voy a ver dónde está William —escucho decir a Pamela alejándose y dejándonos solos.

—Por mí no hay problema dice James sonriendo de lado.

¡Dios mío que no se siga riendo así!

—Yo... yo esperare a Pamela —digo casi tartamudeando tragando grueso.

—Anda, yo te lo coloco.

—OK —digo tímidamente.

Cuando James me empieza a colocar el protector sobre mi espalda siento un escalofrió y un cosquilleo recorrer por todo mi cuerpo, sus manos sobre mi piel desnuda provocaba que mi cuerpo se estremeciera y mi respiración se entrecortaba.

Narra James

Era notable lo intimidada que estaba Alison, cuando termine de colocarle el protector aproveche de hablar con ella.

—Alison necesitamos hablar sobre lo que pasó anoche.

—Yo... —la escucho decir bajando su mirada y totalmente sonrojada.

—Alison... tú sabes que me encantas, y creo que tú misma lo sabes.

—Anoche me dijiste que quieres estar conmigo, yo de verdad necesito saber si eso es verdad o solo lo dijiste porque estabas...

—No, yo realmente quiero estar contigo—la escucho decir ruborizándose.

—Entonces... ¿porque a veces me esquivabas?

—Es que... es que... nunca he estado con ningún hombre—me dice apretando sus labios.

— ¿Ni con Lucas? —pregunto sorprendido de forma automática.

—No, es que yo... esperaba ese momento para el día de mi boda.

Eres realmente adorable

Y así nomas le doy un beso en su mejilla.

Me quede mirándola por unos segundos, pensando en lo hermosa que era Alison y lo idiota que había sido Lucas por haberla perdido y lo afortunado que era yo por haberla encontrado en mi camino.

—¿Por que me vez así? —la escucho decir con timidez.

—Por nada, solo veo lo hermosa que eres —digo curveando mis labios haciendo que ella sonriera de lado con timidez.