❝F.E.A.❞ |matthew espinosa| EDITANDO

15. Corazón de piedra

Otro viaje más en autobús. La madre Louise consideraba una tontería que se levantara más temprano para caminar a la escuela. Decía que sólo se cansaría en vano y que además atraparía un refriado cada semana con el frío aire de otoño. Qué vida.

Esta vez, dos niñas de primero se habían pasado todo el camino jalándole la trenza que llevaba. Siempre caían bolitas de papel masticadas en su ropa y cabello. Y no se diga de los lentes. Siempre debía existir aquel estúpido que se las tirara, se las pusiera para decirle ¡Oh pero qué ciega estás! O quien se las tiraba a propósito pensando en que por no ver nada, haría cosas torpes. Eso era totalmente falso. Louise veía casi bien, sólo tenía un poco de astigmatismo y miopía en un grado muy bajo. Así si se quitaba los lentes, podía ver sin mayor problema.

Bajó de autobús, la última. Apresurada por el chofer que le pedía de mala gana que ya se bajara porque no tenía tiempo que perder, debía regresar a ver sus partidos de fútbol. Claro, como el fútbol era más importante (Quizás para Silvia si era así).

Cuando bajó, encontró rápidamente a sus amigas.

-¡Lou! No sabíamos que tomabas el bus.

-Ah, si eso. Mamá me ha obligado -sonrió desganada.

-¡Oh vamos Lou! Dilo, el bus es un asco.

Ella enrojeció, dándoles a entender que estaban en lo correcto. Le da mucha vergüenza decir que eran todos unos malditos en el bus con ella.

-Yo puedo pasar por ti -le sonrió Shawn.

Las mejillas de Louise ardieron aún más, ¿Y si City se enojaba?

-No...yo, es demasiado.

-¡Di que sí Lucha! Me he estado aguantando a estos dos tira mieles dos meses! ¡Dos meses! No me dejes morir sola -dramatizó Nadia.

City se tornó roja y le dio un pellizco.

-¡Qué te sucede perra! -dijo sobándose el brazo.

-¡Nadia esa boca! -reprimió Mili.

-¡Suficiente! Discutirán eso más tarde, ¡Dónde están las demás! Bren, Mara, Malena... -dijo desesperada Mahogany.

-¿Pasa algo? -preguntó inocentemente Louise.

-¡Quién olvidó decirle! -gritó Claudia.

-¡Mara! Con lo de ayer seguro que no le dijo, hoy es el cumpleaños de Becka-respondió Brisa.

-Chicas, no quiero ponerlas más nerviosas, pero Becka viene para acá -dijo Jacob mirando su teléfono.

-¿Funcionó el plan hagan mierda el coche de Becka para que llegue en patineta?

-Pues supongo, vamos chicos, iremos por los clavos y el martillo, las vemos adentro -finalizó Aaron alejándose con los otros dos.

Un coche se estacionó cerca, las puertas se abrieron y aventaron dos mochilas al suelo. Una de cuadros de colores con mucho morado y otra negra con símbolos de las casas de Hogwarts.

Después bajó Mara, con un enorme "ramo" de globos de distintos colores. Luego bajó Bren con una enorme manta doblada y ambas cerraron la puerta y echaron a correr hasta ellas.

-¡Se nos hizo tarde! -gritaron.

-¡Pues que esperan! -todas comenzaron a entrar como burros sin mecate, todas entraban en pánico.

-Louise, tú quédate aquí. Ayuda a ver si viene Becka.

Ella asintió sintiéndose una inútil. Hasta Nadia que era menor que ella, estaba haciendo algo productivo.