Ahí estaba, la luz se reflejaba sobre su silueta. No era una figura de una modelo, de una réplica de Beyoncé, más bien era una generosa silueta de una chica, quien llevaba unos labios tan rojos, tan...deseables.Un corazón estaba pintando en ellos. Sus ojos iban cubiertos por un antifaz de brillos a negros, rojos y detalles dorados. Era...increíble. Captaba su atención y no sólo la de él, sino la de muchos más. Los chicos estaban mirándola estupefactos, ¿quién era ella? Pero Matt no quería que la miraran. Su corazón sentía enojo y rabia ¡ellos no debían mirarla! ¡Sólo él podía hacerlo! ¡Nadie más! Se sintió aún peor cuando se dio cuenta de que algunos de sus amigos también la miraban. ¡Es que nadie entendía que no debían hacerlo! Su mejillas se teñían de un color carmín intenso del enojo de...de...
<< ¡Los celos Matthew!>>
¡Debía estar jugando! Se había atrapado a él mismo en ese sentimiento tan terrible como eran los desgraciados celos. Los temibles celos. Los detestaba, los odiaba con toda su alma. Lo habían destruido poco a poco a él y a su corazón. Negó con la cabeza. ¡Dios en qué estaba pensando cuando miraba a esa chica!
-¡Te vi Espinosa! -la voz de una chica lo sobresaltó haciéndolo tirar el vaso de ponche que tenía en la mano.
-¿LOX? -le preguntó, una vez que miró a la pelirroja con una sonrisa pícara y divertida en los labios.
-Pequeño Matt, lamento decirte que te he pillado viendo a aquella chica guapa de allá -Mahogany señaló hacia su derecha.
Con algo de torpeza, la chica de los corazones...no, perdón; La reina de los corazones, buscaba a alguien desesperadamente con la mirada, se giraba a todos lados, sin parar de buscar. Matthew la contempló de nuevo, era simplemente preciosa...o al menos, de lejos lo parecía. Un nuevo sentimiento inundó su pecho, un dolor...impotencia. Decepción. Si estaba buscando a alguien entonces...ella...ella ya nunca podría corresponderle, ¿cierto? ¡Corresponderle! Y él ya estaba pensando en corresponder los sentimientos. Que locura.
<< ¡Basta Matt, has perdido la cabeza! >>
Pero seguía oprimiéndole el pecho fuertemente. ¿Quién era ella y por qué nunca se había percatado de su existencia? Él no quería eso, no quería ser como sus amigos, aquellos quienes veían la silueta de una chica y casi de inmediato le estaban pidiendo una cita, él no. Porque sentía que era demasiado rápido, porque Matt quería caminar con ella y no correr. Porque estaba convencido que los ojos engañan y que una imagen no siempre es la correcta. Como si fuese un video, si viéramos a un señor empujando a una señora todos dirían: "¡Pero que señor más desconsiderado! ¡Grosero!" "¡Inhumano!" "¡Qué clase de persona es!" Pero si viéramos el video de lo que pasó, entonces veríamos que el señor ha empujado a la señora porque una bicicleta casi lo ha arrollado y se ha visto obligado a empujarla. Bueno, eso es lo que pensaba Matt, que necesitaba ver el video en vez de una imagen.
Y se sentía abrumado, tonto, desorientado.
-¿Matt? ¡Matt! -la voz de Mahogany se alejaba, lentamente, cada vez podía escucharla menos. Su cuerpo se debilitaba, la vista le fallaba, todo estaba poniéndose borroso. Sus parpados le estaban fallando, sentía como se cerraban lentamente. Su cuerpo estaba casi flotando, no había ningún tipo de espacio-tiempo a su alrededor.
-¡Matt!
Abrió los ojos precipitadamente. Estaba oscuro, era de noche. Las estrellas brillaban como bellos luceros. Un frío viento le hizo estremecer. Levantó la mitad de su cuerpo quedando sus piernas aún estiradas. Miró a su alrededor. Estaba por la casa de los Grier. Más bien, en la calle dónde estos vivían. Las casas estaban adornadas por cosas de Halloween y los niños aún rondaban por ahí pidiendo dulces en las casas. Le pasaban de largo, sin decirle nada, ellos tenían un propósito y no era precisamente pararse a mitad de la calle a gritarle a un muchacho con traje de dinosaurio que se quitara de en medio porque estaba obstruyendo el paso. Su cabeza comenzó a darle muchas vueltas, se llevó una mano a la sien y cerró los ojos fuertemente. Un millón de flashazos llovían en su cabeza: Halloween, la escuela, una chica, corazones, reinas, labios rojos, celos, deseos de besar, decepción, Mahogany, gritos, ponche, negro, visiones borrosas y nada. Abrió los ojos nuevamente, seguía ahí en la calle. Pero un pequeño bichito, tan pequeño pero tan poderoso, lo hizo voltear.
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❝F.E.A.❞ |matthew espinosa| EDITANDO
Fanfic❝F.E.A.❞ Ella es torpe, también es tímida pero sobre todo torpe. Los espejos se han de romper cuando su reflejo en ellos ha de ver. Frenos, lentes, los peores conjuntos de ropa que pueden existir y los zapatos más aburridos y sucios que se puede u...