47. La playlist de Louise

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Louise se envolvió en las mantas. No quería despertar puesto que los exámenes habían acabado con ella. Ni siquiera recordaba que era su cumpleaños, tan solo deseaba seguir sumergida en el mundo de los sueños. Sintió que unas manos intentaban jalar las mantas, pero Louise luchaba por seguir cubriéndose con ellas.

-¡Vamos Lou! -gritaron dos voces al mismo tiempo y finalmente lograron arrancarle las mantas.

Lou se cubrió la cara con las manos.

-Ya Louise, anda. Tengo que ponerte especial en tu día especial. -habló Mary divertida.

Louise negó. -¿Qué día especial? ¿De qué hablan?

Nate miró a su hermana gemela sin entender si era broma o de verdad Louise había olvidado su propio cumpleaños.

-Lou, hoy es tu cumpleaños. -dijo Nate.

Entonces, se quedó estática y fue quitando sus manos de su cara poco a poco. Miró a sus dos primos que la miraban con cariño y con las mantas en sus manos.

-Estuve tan preocupada por los exámenes que olvidé mi propio cumpleaños.

Ambos gemelos rieron y la vieron con ternura. Parecía tan indefensa. Louise estaba sonrojada y su cabello alborotado la hacía lucir graciosa. Mary la jaló del brazo para que se pusiera de pie.

-Adivina a quien llamamos...

Lou la miró esperando que dijera de quien se trataba.

-¡Mahogany, Clau! ¡Adelante! -gritaron los gemelos.

Las dos muchachas entraron cayéndose de sueño, pero reaccionaron y chillaron emocionadas.

-¡Louise! ¡Feliz cumpleaños! -gritaron con los ojos caídos.

Ella rio y se mordió el labio inferior conteniendo su risa.

-Hoy cumples 18 años, dios... ¡Qué rápido crecen!

-Bueno, yo me retiro, es tiempo de chicas. -rio Nate y salió de la habitación.

Las tres chicas miraron a Lou, hicieron caras perversas.

-Louise, entra a la ducha que tenemos que esmpezar ya con esto.

Mary le puso la bata de baño en las manos y la guio con sus manos en los hombros de ella. Abrió la puerta del baño y con un leve empujón Louise entró al baño y Mary cerró la puerta.

Mientras se duchaba, sonrió genuinamente. Hoy era un día especial. Más que especial, único. Tenía que ser el mejor día desde su llegada a California, debía ser simplemente diferente a otros días. Clau le había comprado ropa nueva y la había depositado en el baño para que se vistiera dentro.

Era un conjunto sencillo, pero lindo. Una camiseta gris que marcaba GEEK con letras grandes y negras, unos shorts de mezclilla rasgados de abajo con una camiseta tipo franela que iba amarrada a la cintura completado con unas confiables converse color gris azulado. Su cabello estaba mojado y necesitaba sus gafas.

Al salir del baño, se dio cuenta que Clau y Mahogany había montado todo un salón de belleza en su cuarto mientras que Mary sólo leía mangas sentadas en su cama. Louise jugó con sus manos.

-¡Preciosa! -dijo Lox.

La guiaron hasta la silla y la sentaron.

-Quédate quietecita Lou, no vamos a quitarte tu esencia, solo vamos a dar unos retoques para que brilles más.

Ella asintió torpemente y dejó que le hicieran lo que tenían que hacerle, para ser una princesa otra vez.

Bajó las escaleras. Su madre parecía querer llorar.

❝F.E.A.❞ |matthew espinosa| EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora