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(Sé que voy a seguir, sigo respirando.)
Jordyn miro su habitación de hotel y suspiró. Había sobrevivido a su primer día en Toronto.
El sonido de la puerta la hizo sobresaltarse—. ¿Quién es? —preguntó confundida, se había despedido de María apenas llegaron al piso.
—Soy yo, Chris —su corazón se congelo por microsegundos—. ¿Podemos hablar?
Lo pensó unos segundos.
—No creo que sea necesario —murmuró recargada en la puerta.
—Por favor, serán unos minutos.
La rubia lo pensó por unos minutos antes de abrir la puerta.
—Gracias —el rubio entro a la habitación rápidamente.
—Empieza a hablar —se recargo en la puerta nerviosamente.
Chris suspiro varías veces antes de poder hablar.
—Te amo —la actriz dejo de mirar el suelo para ver los ojos azules que tanto le hacían perder el aliento—. Te amo demasiado, te amo tanto que siento que todo este sentimiento me quema por dentro... pero no puedo seguir con esto, no quiero seguir dañándote. Quiero pedirte perdón por ser un idiota que no supo valorar lo que tenía hasta que te vio en brazos de otro hombre.
Jordyn quería golpearlo.
—Espero que algún dia puedas perdonarme y... —su voz se quebró—. Podamos ser amigos o algo.
—Gracias, Chris —sonrió ligeramente—. Y te perdonó.
El rubio se acerco lentamente—. ¿Puedo abrazarte?
La rubia se tensó, no sabía si debía dejarlo abrazarla o no.
—Por favor —pidio con voz quedita.
—Está bien —se despego de la puerta sintiendo los brazos de Chris enredarse en su cintura.
La cabeza del actor descansó en el hombro de la joven y no supo en que momento empezó a llorar.
—Tranquilo —Jordyn se despegó unos centimetros dejando su cara cerca de la del actor bostoniano.
El rubio miro los labios de Jordyn y suspiró, ¿debía hacerlo? ¿debía dejarse controlar por sus instintos y arriesgarse?
—Chris —lo llamó nerviosa.
Estaban tan cerca que podían sentir la respiración del otro, ¿se iban a besar? Chris podía sentir la felicidad invadir su cuerpo, la emoción de volver a tocar los labios de su amada. Faltaba un centímetro y se iba a sentir completo nuevamente.
—Creo que debes irte —el mundo del actor se vino abajo al sentirla alejarse de el—. Es tarde y debemos descansar.
Chris aclaro su garganta y asintió.
Al estar en el pasillo regreso su vista a la rubia—. Buenas noches, Jordyn.
