-¿De dónde lo sacaste?- fue el saludo que le dio Enjolras al vernos llegar al salón vacío, tuve que disculparme con Grantaire, normalmente somos más formales, pero es algo que al parecer Enjolras ha olvidado
-Estaba abajo en la plaza de la palabra, tal vez viene a clases- bromeó y rascó su propio cabello al no obtener reacción en Enjolras
-Courfeyrac- asegura y afirmé, "esta despistado, le va a salir pasando algo por no fijarse donde se mete" le explico y exhala, "lo sé, es agotante lidiar con el cachorro problemático"- tiene que ser que dejó abierto- le explica a Grantaire que nos mira entretenido- ¿Qué hago contigo aquí? Tengo clases todo el día- reniega mientras veo este lugar lleno de cosas, "¿has visto esto? De seguro es para mí, es un buen regalo, estoy complacido" admito pasándome entre sus pies
Les dejó aparte mientras voy a explorar el lugar y como siempre, logro capturar todas las miradas a cada paso que doy, pero la tercera vez que giro a verles, me encuentro con esa mirada brillante de Grantaire viendo a Enjolras, que al parecer está planeando como llevar estas cosas a casa o en algo tiene ocupada la mente. Lo sé por el gesto que tiene y porque ignora a Grantaire
-Yo... no tengo más clases, pensaba ir a beber y al billar, pero eso podría esperar- asegura Grantaire en voz baja de repente y se remueve el cabello antes de volver a hablar en cuanto Enjolras le mira; me acerco a ellos y Enjolras se cruza de brazos- lo que quiero decir, es que podría llevarlo- propone y me rio que Enjolras no le cree, lo está mirando como Nana cuando regaña a alguien, con la ceja en alto y esa mueca de molestia tan propia de ellos dos
-No te garantizo que quiera ir contigo, es esquivo con extraños- le jura Enjolras y yo aseguro que no me quiero ir aun
-Otra cosa que tienen en común- es toda la respuesta que obtiene por parte de Grantaire antes de acercarse y cargarme- ves, no puso problema, ya no soy un extraño- le plantea rascándome la cabeza- no le pasará nada- promete dejando de rascarme, por lo que le empujo la mano para que siga- pensaba ir a beber pero si necesitas que le lleve, le dejo en casa y después si voy- insiste y hasta yo quiero ir con él, pese a que no aun, apenas llegué. Enjolras solo vuelve la vista a la puerta dudoso de creerle- ¿Qué dices?- insiste con una sonrisa forzada
-Que no es tranquilizante encomendarte su regreso- admite y ante esa crueldad de palabras Grantaire deja de rascarme- no, escucha, lo lamento ¿sí?, pero para empezar, él no debería estar acá- corrige al captar lo dicho y la sonrisa forzada que le dedica Grantaire me duele hasta a mí, me baja con cuidado y retrocede
-Pues si tienes otra opción- plantea con manos en los bolsillos y le oigo exhalar
-No, la verdad es que no- admite y la sonrisa del pintor se ensancha- ¿podrías?, Grantaire lo digo enserio ¿podrías llevarle sin ningún contratiempo? Que llegue a casa y no salga- le recalca incapaz de creerlo capaz, pero R solo le extiende la mano esperando que le de las llaves- gracias- se limita a decirle entregándoselas
-Jamás pondría en riesgo algo que te importe, Apolo- promete y le creo, su pecho también, pero Enjolras no- no pienso venir hasta acá a devolverte las llaves, espero a que llegues- condiciona y salimos de ahí. Sé que esa respuesta no le gustó, pero lo que sea que Enjolras tenga que hacer es importante y tiene prisa así que tuvo que aceptar su ayuda. Al salir de ese sitio, solo vuelve la vista a nosotros, cuando le maúllo a modo de despedida, pero retoma su rumbo
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El Guardián de L'ABC [Completa]
FanfictionDesde tiempos inmemorables, todo miembro en la familia Helzinger tiene por compañía un gato y en el caso de Alexandre Enjolras Helzinger, es un gato angora, de nombre Robespierre que llegó a su vida a los once años para acompañarle incluso cuando la...