12.

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NARRADOR.

Evie y Chad se escabulleron hasta debajo de las gradas del campo de tourney como si se tratara de un par de tórtolos encontrándose a escondidas.

Chad: ¿Todos en tu familia son así de lindos?

Evie: Quiero creer que soy la más linda del reino. 

Sonrió y ambos soltaron una pequeña risa.

Evie: ¿Hay muchos cuartos en tu castillo? 

Chad: Demasiados para contarlos.

Evie volvió a sonreír y comenzó a acercarse para besarlo. Chad lo notó y dijo:

Chad: Que bien resolviste el problema de química hoy. Todos los nerds se enamorarán de ti.

Evie: Soy mala en la escuela -confesó.

Chad: Ay, por favor -dijo creyendo que era sarcasmo.

Evie: No, en serio, es verdad. Pero soy muy bueno cosiendo, cocinando y aseando. Igual que tu madre, Cenicienta, pero mejor vestida -abrió su bolso y sacó su pequeño espejo- ¿Ves esto? Si pregunto donde está algo, lo averigua.

Chad: ¿Acaso es broma? -Evie negó.

Chad la miró con los ojos bien abiertos y le arrebató el espejo de las manos.

Chad: ¿Dónde está mi teléfono? -le dijo al espejo y luego se lo puso cerca del oído, esperando una respuesta.

Evie: No funciona para ti -le dijo sonriendo.

Chad: No importa -le devolvió el espejo- Mi papá me comprará uno nuevo.

Evie: El Príncipe Encantador.

Chad: Sí.

Evie: Y Cenicienta.

Chad: Sí. 

Evie: Y el Hada Madrina -ambos estaban muy cerca el uno del otro- Oye, oí que su varita está en un aburrido museo. ¿La dejan siempre ahí?

Iban a besarse. O al menos eso le hizo creer Chad a Evie, pero se alejó.

Chad: Me gustaría hablar más pero, estoy ocupado. Aunque...

Evie: ¿Aunque? -sonrió.

Chad: Si haces mi tarea junto a la tuya, tal vez podría acompañarte y charlar -se quitó la mochila del hombro y se la extendió a Evie.

Evie: Okey -dijo tomando la mochila del idiota de Chad.

Chad: Gracias belleza -le guiñó un ojo y se fue.

Y Doug apareció de pronto.

Doug: Resultó inevitable oír...

Evie: ¿Estás siguiéndome?

Doug: Bueno, en realidad, sí. Reconozco que me fascina la varita del Hada Madrina, lo cual es otra razón para esperar la Coronación. Podríamos, quizá, sentarnos juntos y discutir sus atributos. 

Evie lo miró victoriosa.

Evie: ¿Entonces la usarán en la Coronación? 

Doug: Sí, y quisiera que fueras mi cita.

Evie le sonrió y se fue. Doug la siguió con la mirada hasta que la perdió de vista.

Lizzie: Amigo mío, acaban de batearte.

No Debo Enamorarme (Jay & Lizzie) TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora