ocho

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PORQUE SU CORAZÓN NO SUPO DECIRLE NO AL AMOR

PORQUE TODA SU ALMA ESTABA NECESITADA DE AMOR

PORQUE TODO EL ANHELABA UN POQUITO DE AMOR

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YoonGi despertó de mal humor después de haber experimentado las mismas pesadillas de todos los días, tiró las sábanas al piso y se apresuró a ponerse el uniforme sin ni siquiera permitirse una ducha que le relajara el cuerpo. Estaba ansioso por llegar a su centro de estudios y hablar con Jimin, desde la noche anterior su mente estaba ocupada con el recuerdo de la nariz arrugada del rubio. Quería volver a verlo, o mejor dicho necesitaba verlo, necesitaba sentirlo, necesitaba deleitar su tacto con la dulce suavidad de su tercia piel.

—Buenos días, hoy no tomaré el desayuno ¿Papá, puedes hacerme el favor de llevarme? —Después de soltar un saludo despectivo se aceleró hacia la puerta de la calle.

— ¿A dónde quieres ir? YoonGi espera —Su padre corrió detrás de él.

—Quiero ir a la escuela, papá y si te apresuras te lo agradecería mucho —Se atrevió a ver a su padre directamente a los ojos.

—Hoy es sábado — Los ojos avivados de YoonGi se ensombrecieron, no podía estar pasándole a él, no ahora.

—Joder...

—¡¡No te permito ese vocabulario!! —Su madre intervino —Creo que nos debes una explicación, ayer encontré a ese chico encima de ti, no quisiste hablar y te dimos tu espacio, pero es momento de poner las cartas sobre la mesa, ¡¡somos tus padres, caray!! Nos debes respeto —Su madre no quiso sonar tan dura, pero el albino así lo sintió.

—No voy a decirles nada, también tengo una vida privada por si no lo sabían —YoonGi arremetió como mejor pudo hacerlo.

—No le respondas a tu madre. Esta casa tiene reglas y tu estas incumpliendo una muy importante —Fue su padre quien quiso tomar las riendas del asunto Prometimos hablar siempre con la verdad, tienes que confiar en nosotros, sabes que no te vamos a juzgar por nada. Nosotros también fuimos jóvenes y créeme que hemos vivido lo mismo que estas experimentando... —Hizo una pausa —De manera un poco diferente, pero al final sigue siendo lo mismo —El señor Min deseaba que su hijo confiara en él, aunque le estaba resultando una travesía bastante complicada.

— ¿Diferente cómo, papá? ¿Por qué no eres más directo? Hablemos con la verdad, entonces ¿Te molesta que tu único hijo no sea un hombre completamente? ¿Te molesta que yo sea diferente? —Hizo una larga pausa, quizá, esperando la reacción de sus padres—Esa es la única verdad. Soy gay —Ni siquiera había trastabillado en sus palabras —Me enseñaste que el amor no tiene formas, ni color, ni género. Felicidades, papá, te tome la palabra. No le vi género al amor, simplemente no pude distinguirlo. Esto es lo que soy —Abrió los brazos mostrándose tal cual.

Su padre lo único que atino a hacer fue abrazarlo, no tenía palabras para expresar lo orgulloso que se sentía por tener un hijo tan valiente, no quiso o no pudo decírselo, por ello se lo mostro en ese abrazo tan fraternal y enternecedor. Él tenía sus sospechas desde mucho antes, por eso mismo no se sorprendió por la noticia, estaba esperando desde hace tiempo que fuera YoonGi quien lo dijera, que fuera él quien lo confesara con sus propias palabras.

—Ya lo sabíamos —Su madre se sumó al abrazo y deseó por un instante que esa unión fuera eterna.

— ¿En serio? ¿Cómo? —YoonGi hizo una mueca interrogativa después de separarse del abrazo.

ROTO - YOONMIN +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora