Pobre Chica Rica

Capítulo 30

Le costó llegar hasta la puta oficina porque todos los maestros trataban de detenerlo para hacerlo volver al salón, creó un alboroto tan grande que incluso varios de los estudiantes salieron de los salones para ver qué diablos pasaba, pues insultó a cada maestro que se le cruzaba, arrancó los carteles de las paredes de la furia e incluso pateó varios cubos de basura a lo largo de su camino hasta la dirección llamando la atención de Jakotsu que estaba acosando a unos chicos de menor edad, entonces asustado al ver su actitud extraña desde ayer corrió hacia él.

Jakotsu: ¡Hey! ¿A dónde vas Bankotsu? ¡Espera!

No, no hizo ni pensaba hacerle caso a las palabras de su hermano, no haría caso a las peticiones de un preocupado y posiblemente aterrado Jakotsu porque después de todo, era la primera vez que experimentaba un maldito coraje a punto de consumirlo, ni siquiera era comparable del que sintió cuando se enteró que Kikyou lo engañaba con otro puto cabrón que aún no conocía y no quería conocer.

Jakotsu: ¡¿Por qué estás tan enojado?! ¿Qué ocurrió?

Las palabras metiches de Jakotsu solo empeoraban el coraje que sentía, uno que nació desde el preciso momento en que ese estúpido se hizo presente con su voz a un lado de ella en el celular ¡¿Por qué estaba con ella?! ¡Por qué seguramente habían follado hasta el cansancio! Y porque sabía perfectamente que quizás él tenía la culpa.

Así que embravecido pateó con odio la puerta de la dirección sin medir las consecuencias, a la primera que vio levantarse en un reflejo de susto fue a la directora, después omitió el gesto iracundo del que probablemente era su esposo para caminar y plantarse frente al escritorio.

Rin: ¡¿Pero qué demonios le pasa Renkitt?! *Protestó cuando le pasó el susto y asimiló su coraje*

Bankotsu: ¡Es lo mismo que yo le cuestiono! *Bramó con los puños apretados* ¡¿Que acaso no se ha dado cuenta de que su sobrina no durmió en la escuela?! ¿Así es como planea hacer “bien” un trabajo que Naraku quizá ya hubiese notado?

Kohaku: ¡No le permito que…!

Rin: Kohaku *Gritó llamando su atención y negó con la cabeza* Agradezco que viniera a avisarme de la ausencia de mi sobrina pero eso no le da el derecho de interrumpir en mi oficina de la forma en que lo hizo, así que me hace el favor de…

Bankotsu: ¡Esta con ese pendejo! *Soltó más cabreado que antes* ¡PASÓ LA NOCHE CON ÉL!

Kohaku: No le grites *Regañó al avanzar y tomarlo por el hombro*

Bankotsu: ¡No me toque! *Se apartó*

Rin: ¡SUFICIENTE! *Intervino molesta* En primera, señor Renkitt no le permito ese tono conmigo, en segunda, modere ese lenguaje soez si no quiere una amonestación severa y en tercera, omitiré el hecho de que entró a mi oficina de esa manera, me gritó y ofendió en agradecimiento por avisarme de la ausencia de Kagome pero eso no…

??: ¡Bank!...

Gritaron el grupo de alumnos que se habían amontonado en el umbral de la puerta, era increíble el desorden que una sola persona con tal furia había causado en el internado, Kohaku se asomó por la ventana y notó que todos estaban fuera de sus aulas tratando de indagar sobre la actitud de Bankotsu.

Kohaku: Rin… *Una gota de sudor apareció en su frente*

Sango entonces salió del aglomerado grupo de la puerta donde además estaban todos los hermanos de Bankotsu, Yura y otros compañeros de su mismo salón.

Sango: Lo sentimos mucho señora directora, lamentamos lo que Bankotsu está haciendo, desde ayer ha estado muy raro y…

Bankotsu: ¡YA LES DIJE QUE ESTOY PERFECTAMENTE BIEN! ES KAGOME LA QUE…