four

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El ritmo de la música nos hacia fundirnos en la pista como si fuéramos las únicas personas en el lugar.

Apoye mi cabeza en su pecho mientras comenzaba a sentir los latidos de su corazón acelerarse rápidamente. Acto seguido, mi pulso se acelero a más no poder y si el no estuviera sosteniéndome de la cintura, juraría que caería al piso en ese precisó momento.

Sentí su respiración chocar en mi frente y, con nerviosismo levante la cabeza haciendo que su boca quedara a la altura de mi oído. Su tierna respiración provocaba un leve sonrojo en mis mejillas por alguna extraña razón, y no dudare en que me gusta la forma en la que se mecía en el vértigo de la ternura.

- "So honey now, take me into your loving arms, kiss me under the light of a thousand stars. Place your head on my beating heart, and I'm thinking out loud, maybe we found love right where we are" - susurro en mi oído mandando un escalofrío que recorrió cada esquina de mi cuerpo.

Me giro unos dos veces antes de pegar frente en la mía y combinar respiraciones. 

Sus ojos mostraban ternura, brillaban junto a los míos, aquel hermoso verde que recién me había dado cuenta que me comenzaban a gustar muchísimo mirar. Su mano comenzó a trazar caricias en mi cintura y de nuevo, ese escalofrió volvió a aparecer en mi cuerpo. 

Me detuve a pensar. En Michael, en mi, en un futuro "nosotros". Quiero decir, no puedo ser la única que crea que las cosas no seguirán igual después de esto.

Rozo suavemente sus labios contra los míos para terminar girándome por ultima vez. La gente comenzó a aplaudir y cuando Michael noto que había logrado acelerar mi respiración, sonrió entre dientes.

- Idiota - murmure lo suficientemente alto para que escuchara.

- Me alagas - contesto en un susurro.

- Deberíamos irnos - afirme soltando su mano.

- Deberíamos, pero no quiero, estoy disfrutando esto - sonrió tirando de mi hacia nuestro puesto.

- Nos quedan solo 10 minutos para volver a casa Mike - suplique como una niña pequeña.

- Esta bien, déjame pagar esto y nos vamos - se rindió finalmente.

Luego de suplicarle que no pagara por mi (lo cual no sirvió de mucho ya que igualmente pago por ambos), tomamos un taxi fuera del lugar con dirección a casa. Al llegar, Calum estaba sentado en sofá viendo películas (sospecho que era alguna clase de película porno ya que la apago en cuanto sintió la puerta abrirse).

- Mamá y Malí vienen en camino - sonrió parándose frente a nosotros.

- ¿Ves Cass? Llegamos justo a tiempo, te dije que si nos quedábamos un rato más llegaríamos tarde - bromeo Mike

- Eres un mentir... - el timbre interrumpió lo que seria una lista de insultos hacia el pálido de cabello teñido.

Mire a Calum quien me miraba desafiante para ver quien abría la puerta y antes de que pudieras decir "mar" salí corriendo con Calum literalmente pisándome los talones. Cuando estuve dispuesta el gran cuerpo de mi mejor amigo choco contra mi haciéndolo caer de espalda al suelo.

Abrí la puerta para ver a una tierna y joven Malí y junto a ella, aquella mujer que era como mi segunda madre.

- ¡Cassy! - grito Malí en su nota más chillona.

- ¡Malí! - le imite lanzándome a sus brazos.

- No puede ser que cada vez que venga a verlos, estés tirado en el piso Calum Thomas Hood - lo regaño Joy ayudándolo a levantarse.

summer rain ⛅ mgcDonde viven las historias. Descúbrelo ahora