"EL ELEGIDO A QUIEN NO ELIGIERON"
En el día más importante de su vida, el gran Harry Potter es traicionado por la mujer que ama. Sin saber muy bien que hacer, va en busca de un escape. La humillante situación lo orilla a buscar ayuda de una slytheri...
No entendía a qué se refería Draco. Veo que esta noche está muy nervioso. Los dos lo estamos. Solo espero que funcione. Draco no me perdonará si sabe porque hago todo esto. Aun así, también lo hago por amor. Pero por amor a más de una persona.
Creo que ya han pasado los cinco minutos que me pidió esperar. Solo deseo que detrás de la puerta no haya una multitud de gente y que no me digan demasiado por mi apariencia. No esperaba salir sin la máscara tan rápido, pensaba que tal vez él querría reservar el momento para más tarde.
Tomo el pomo de la puerta por donde él ha entrado apenas unos minutos atrás y lo giro despacio. No escucho nada, aquí no hay nadie. Casi cuando creo que es una pequeña broma que él me ha preparado, distingo una silueta, está de espaldas. Hay algo que no se siente en orden y por instinto tomo mi varita por de entre mi ropa.
Esta persona escucha mis pasos y primero se queda mirando una puerta del otro lado de la habitación. Luego voltea hacia mí y sus ojos se quedan clavados en el míos.
Pareciese otra pintura como las que hay en las paredes. A excepción de que las pinturas si se están moviendo. Él no es Draco, pero hay algo peculiar en su mirada, algo familiar. Como si fuese algo que necesitara desde hace mucho. Siento un calor interno que me sobrecoge. Pero él está estático. No se ha movido. Solo no puede dejar de mirarme, y por extraño que parezca, no quiero que deje de hacerlo.
—buenas noches— dije.
Él se acerca a mí despacio y me acoge una angustia, o miedo.
El levanta sus manos como si quisiera tocarme y pone mis nervios a tope. Pero no me toca, sigue subiendo las manos y las lleva detrás de su cabeza, para desabrocharse la máscara.
La retira de a poco y la vida abandona mi cuerpo.
Debo estar soñando...
¿Cómo...
Ahogo un grito.
Mi boca se abre, pero no puedo decir nada.
¡ES ÉL!
¡POR MERLIN ES ÉL! ¡ES ÉL!
Siempre he sabido como descifrar sus miradas, las de él y las de Ron. Pero pareciese que es otra persona.
¡esto no es real! Finalmente está aquí.
Se sintió como si hubiese esperado una vida por él.
Luce muy radiante, me atrevo a decir, Incluso pareciese que trae puesta la misma ropa.
¡lo encontró! ¡Draco lo encontró!
Y le pareció correcto mostrármelo ahora, en caso de que me arrepienta de salir. Cuando entro en sí, no hago nada más que saltar sobre él.
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