Capítulo 30

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Era algo tarde, Yokozawa había recibido un informe en su oficina y aquel documento solo le había hecho enfadar, se levantó de su asiento dirigiéndose a la salida sin decir nada a nadie, subió al piso de Japun molesto y con los documentos en sus manos, el personal que se topaba con él en el camino se hacia a un lado al verle molesto y el ojiazul caminó hasta el escritorio del editor en jefe azotando los documentos contra el escritorio logrando sorprender al castaño.

---¿Yokozawa qué pasa?--- el mayor levantó la vista mirando al de ventas, lo observó molesto pero no le tomó importancia a aquello.

---¡hazme un favor, trabaja con seriedad y deja de enviarme estos trabajos de mierda!

---¿¡te das cuenta de la manera en que me estás hablando?!

---¡me importa muy poco! ¡Sólo no quiero que me sigas haciendo perder mi tiempo!

---¡no lo hago! ¡Ya mismo estoy trabajando! ¿Porqué nos vas con tus subordinados y venden lo que tienen que vender? ¡Las ventas han bajado, por si no te habías dado cuenta!---respondió un poco molesto.

---¡ni mis vendedores ni yo lograremos vender nada si nos sigues trayendo proyectos como éste!--- se defendió señalando los documentos.--- ¡si llevamos esto a la librería no se venderá nada! ¡Cuando volvamos a intentar vender otra cosa nadie nos tomará en serio! ¡Así que deja de enviarme porquerías como ésta!

Kirishima se sorprendió, tomó los documentos y los leyó rápidamente, tenía que admitir que el hombre frente a él tenía toda la razón,  pero algo ahí no encajaba, ni siquiera tenían que estar discutiendo entre ellos, ya que el proyecto no era estrictamente de Kirishima sino de uno de sus subordinados, lo que más le llamó la atención no fue el hecho de que el proyecto estuviera mal hecho sino que el documento parecía llevar su firma, lo cual daba a entender su aprobación y ello explicaba la furia de Yokozawa.--- yo no... Yo no firme esto---

---si, claro, ¿sabes qué? Sólo arreglalo, cuando lo envíes a ventas de nuevo no quiero tener que venir otra vez a asegurarme que haces tu trabajo como se debe.

---oye, te estás pasando--- comentó en voz baja conteniendo la voz, su mirada era seria y algo en su voz advertía sobre algo.

---no, no lo creo--- el ambiente se tensó y el resto del personal no hacían más que concentrarse en sus cosas tratando de no hacer contacto visual con ninguno de aquellos dos hombres.

---oigan chicos tranquilos, tranquilos.--- alguien se acercó a ellos con la intención de calmar la situación.

---¡¡Quieres callarte!!--- ambos alzaron la voz al mismo tiempo mirando al sujeto que se les había acercado, su sorpresa fue encontrar frente a ellos al presidente Isaka, quien cambio su expresión sonriente por una cara seria.

---quiero a ambos en mi oficina, ahora.--- dándose vuelta salió del lugar, Yokozawa y Kirishima se miraron un momento antes de seguir al presidente. Pero Yokozawa vió a Takano con Hisui, y al verlo demasiado ocupado prefirió llevarse al niño con él para no causarle molestias al azabache.

Cuando cruzaron la puerta de la oficina, Yokozawa fue el último en entrar y tomar asiento, Asahina salió del lugar para darles espacio a hablar.

---¿y bien, a qué se debe el lamentable espectáculo de hoy?--- Yokozawa no dijo nada y miró hacia otro lado, aún tenía a Hisui entre sus brazos y  Kirishima también guardó silencio un momento.

---eso fue... Porque el equipo de Japun envió un proyecto de bajo nivel.--- reprochó el menor mirando a su pareja, antes de que el castaño pudiera refutar algo fue interrumpido por Isaka.

---¡eso no es excusa Yokozawa! Todos los días ésta gente hace proyectos de bajo nivel y debemos asegurarnos de no aprobar ninguno de ellos, los regresamos todos  hasta que lleguen convertidos en un buen negocio.

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